La mutación de Nikola Jokic para aspirar a su tercer MVP consecutivo desde "el peor partido" de su vida con el Barça
Ognen Stojakovic, entrenador de desarrollo de jugadores en Denver, explica la mutación del "mejor jugador de la NBA".
Nikola Jokic camina de la mano de la historia en cada partido que juega con la camiseta de los Denver Nuggets. A golpe de triple-doble, el pívot serbio marcha con paso firme hacia su tercer título de MVP de la NBA de forma consecutiva. Es el máximo favorito a posar por tercer año seguido con el trofeo que le acreditará como mejor jugador de la temporada regular. Algo que sólo han conseguido Bill Russell, Wilt Chamberlain y Larry Bird. Ni Magic, ni Jordan ni LeBron, para hacernos una idea de la gesta.
Sus números hablan de un jugador único en su especie (sexto en la historia en llegar a los 100 triples-dobles y ahora suma 101 tras su partido ante los Grizzlies, primer jugador en firmar 2.000 puntos, 1.000 rebotes y 500 asistencias en una temporada) capaz de reinar por encima de atletas con mejores condiciones que él. Sin embargo, Jokic ha cambiado el paradigma del baloncesto actual y ha demostrado que el mejor músculo para triunfar en la cancha no está en las piernas. Y lo ha hecho casi sin querer.
Porque esa no era su voluntad mientras crecía en su Sombor natal. Allí, entre refugios antiaéreos y los caballos a los que se dedicaba en cuerpo y alma, descubrió el baloncesto por sus hermanos mayores, Strahinja y Nemanja. El pequeño Nikola empezó en la cancha por imitación. Sin embargo, pronto demostró que había algo que le hacía distinto al resto. Los centímetros eran los mismos, pero él baloncesto para él era diferente gracias a un cerebro privilegiado. El mismo órgano que le ha llevado a reinar en la mejor liga del mundo sin necesidad de un físico determinante .
"Es un jugador único, capaz de influir en todas las facetas del juego. El mejor jugador de la NBA ahora mismo", afirma a Relevo Ognen Stojakovic, director de desarrollo de jugadores en los Denver Nuggets y el hombre que ha cincelado el juego de Jokic hasta llevarlo a la cima de la NBA. "Es el prototipo de jugador moderno. Es a lo que debería parecerse cualquier jugador, capaz de jugar en diferentes posiciones e influir en el juego en todas las facetas".
El Barcelona, a la espera
Para Jokic esa forma de entender el baloncesto es algo natural. Lo lleva haciendo desde que comenzó a jugar en Sombor. Una localidad al norte de Serbia en la que muy pocos ojeadores fijaban su radar.Fue Miško Ražnatović, hoy uno de los agentes más importantes de Europa, quien se fijó casi por casualidad en las estadísticas que aparecían en los breves de un periódico serbio cada semana. En esas pocas líneas se veía el nombre de un chico al lado de números como 25 puntos, 20 rebotes o 60 de valoración.
"Es un jugador único, capaz de influir en todas las facetas del juego, el prototipo de jugador moderno"
Director de desarrollo de jugadores de DenverCada siete días se repetía la misma historia con números a los que hoy ya nos hemos acostumbrado. Cifras que dispararon las alarmas de Ražnatović, que le fichó para Mega Basket. Un fichaje que muchos miraron con escepticismo por su físico (llegaba pasado de peso y no era capaz de hacer más de dos flexiones), pero que pronto se demostró acertado por un talento fuera de lo común que llamó la atención de clubes como el Barcelona.
Jokic llegó a vestir la camiseta azulgrana durante una prueba… para el olvido. "Fue hace mucho tiempo, tuve un mal partido. De hecho, el peor que he jugado nunca", recordaba Jokic durante el último All Star. El Barça le puso en espera y en esas aparecieron los Nuggets y se llevaron al joven talento serbio a una NBA que ni siquiera sabía de dónde salía ese chico que estaba dormido cuando su nombre sonó en el puesto 41 del draft de 2015.
This pass 🤌 pic.twitter.com/UroTn2rDNW
— Denver Nuggets (@nuggets) March 1, 2023
Su llegada a la NBA y su cambio de físico
Nikola aterrizaba en la NBA con la sombra de la sospecha sobre su físico, pero pronto borró cualquier duda con su trabajo, como recuerda Stojakovic: "Vino con 19 años, pero no ha parado de evolucionar y de mejorar. Cada año encuentra una manera diferente en la que influir en el juego. No tiene nada que ver con el chico que era cuando fue drafteado. No para de crecer y todavía tiene mucho margen de mejora".
Uno de los aspectos que más ha cambiado en Jokic desde que aterrizó en la NBA es su físico y su capacidad de trabajo. El serbio cambió por completo su dieta ("Me bebía dos litros de Coca-Cola al día", reconocía en una entrevista en 2017) sustituyendo los carbohidratos y el azúcar por el pescado, las proteínas y los vegetales. Pero su cambio no fue sólo físico.
"Lo más importante es que ha construido buenos hábitos", apunta el miembro del cuerpo técnico de los Nuggets sobre un Jokic al que califica como "un gran trabajador. Es algo que la gente no sabe y no se imagina y que hay que resaltar. Trabaja muy muy duro cada día. Tanto en la cancha como en el gimnasio, donde pasa horas para mejorar tanto su físico como su juego".
Los números de MVP de Nikola Jokic
- 24,6 puntos
- 11,7 rebotes
- 10 asistencias
- 40% desde el triple
- 63% en tiros de campo
Una mentalidad que mantiene desde que llegó a Denver con sólo 19 años, cuando sólo era un "joven confundido", como recuerda un Ognen Stojakovic que ha sido algo más que un entrenador para Jokic desde su llegada a la NBA. "No sabía qué esperar de Estados Unidos y de la NBA. Era joven, estaba un poco confundido, pero estaba listo para adaptarse cuanto antes. Su mentalidad era 'ok, voy a venir cada día a entrenar y voy a dar lo mejor de mí". Y empezamos a construir lo que es hoy a partir de ahí".
Unos comienzos que hoy tanto Jokic como Stojakovic recuerdan entre risas, "porque al principio Nikola se enfadaba conmigo porque yo le empujaba a hacer cosas y a trabajar en aspectos diferentes a los que él estaba acostumbrado. Él era joven y yo le presionaba para que trabajara.Y yo también me enfadaba con él porque él no siempre hacía caso. Ahora nos reímos cuando recordamos todo eso. En los dos o tres primeros años estábamos constantemente peleando y ahora somos más que amigos".
"Es un chico con tanto talento que sólo tenía que explotar. Y lo ha hecho y se ha convertido en el mejor jugador de la liga"
Stojakovic se ha convertido en parte de su familia, además del hombre que ha moldeado a un jugador que nunca se dio por vencido. "Nunca pensó que la NBA fuese demasiado dura para él. Es un chico con tanto talento que sólo tenía que explotar. Y lo ha hecho y se ha convertido en el mejor jugador de la liga. Somos el primer equipo de la liga, él promedia un triple-doble, su eficiencia es increíble… Definitivamente es el mejor jugador de la liga y cuyo pico va a llegar en los próximos cuatro años". Mejor… imposible.