Campazzo, cada vez más lejos del Madrid por 'culpa' de Doncic
Los Dallas Mavericks ofrecen una temporada no garantizada al base argentino.

El culebrón Campazzo está a punto de llegar a su final. El argentino ha ido deshojando la margarita de su futuro durante todo el verano y parece que su paciencia va a tener el fruto deseado. Sus planes pasaban por quedarse en la NBA y tras meses en los que esa opción parecía alejarse de su agenda, ahora es la más plausible.
Según ha adelantado el periodista estadounidense Marc Stein, una de las voces más reputadas en el entorno de la NBA, el base argentino está muy cerca de firmar un contrato por una temporada por los Dallas Mavericks de su amigo Luka Doncic, que ha presionado a la franquicia texana para fichar al base argentino con el que ya coincidió en el Real Madrid.
El club blanco ha sido el equipo que más ha sonado alrededor del Facu estos meses y le ofrecía volver a su contrato anterior: hasta 2025 y tres millones de euros. Sin embargo, el cordobés mantiene su deseo de seguir en la NBA a pesar de que el contrato sea no garantizado. ¿Qué significa eso? Que el jugador no tiene asegurado recibir el dinero del contrato firmado. En caso de ser cortado por su equipo, el jugador no cobrará la cantidad de dinero restante de su contrato.
El Real Madrid se ha mantenido a la espera para intentar el regreso del argentino, que todavía tiene que pagar tres millones de dólares al club blanco por el pago de su salida a la NBA en 2019. Una deuda que se mantiene y que no se puede condonar por motivos fiscales. Sin embargo, el jugador parece dispuesto a asumir el riesgo para seguir en la NBA.
El base cordobés ha jugado dos temporadas en los Denver Nuggets en las que su protagonismo fue de más a menos. En ese tiempo el argentino ha disputado 130 partidos y ha promediado 5,6 puntos, 3,5 asistencias y 1,6 rebotes en 20 minutos por encuentro.
Contrato por el mínimo para veterano
Los Mavs aún tienen que cerrar su plantilla y cubrir la decimoquinta plaza que queda libre en el roster. Un hueco que ahora mismo parece destinado para el internacional argentino de 31 años salvo, según Stein, "un cambio inesperado antes de que estén listas las plantillas de inicio de temporada". El curso comienza en apenas siete días, el próximo 18 de octubre.
El equipo de Mark Cuban ofrece al jugador argentino un contrato no garantizado por una temporada y por el mínimo para veteranos, 1,8 millones de euros, por lo que tras impuestos el salario que quedaría en el bolsillo del jugador se quedaría alrededor de los 900.000 euros. Un montante del que tiene que salir el pago de la deuda con el Real Madrid, que es de dos millones de euros.
Uno de los agentes del jugador, Claudio Villanueva, aseguraba el pasado martes que se daban un plazo de 48 horas para tomar una decisión sobre el futuro del jugador. Y ahora todo apunta a unos Dallas Mavericks en los que sería el tercer base tras su amigo Luka Doncic y Spencer Dinwiddie. Su papel, en un primer momento, será secundario en una franquicia que ya ha superado el límite salarial marcado por la NBA (121 millones de dólares esta temporada) y que tendrá que pagar impuesto de lujo al superar los 147 millones. Un equipo sin espacio salarial, pero con aspiraciones de convertirse en fuerza emergente en el Oeste.