James Harden a los Clippers con Kawhi y Paul George, un traspaso envuelto de mentiras, acusaciones y millones de dólares
El escolta sale de Philadelphia tras su guerra con Daryl Morey, el mánager general que un día fue su gran valedor en la NBA.

La noticia provocaba un seísmo a primera hora de la mañana en España. Adrian Wojnarowski, quién si no, era el encargado de soltar la bomba y anunciaba que los Philadelphia 76ers aceptaban la petición de traspaso de James Harden y enviaban al escolta a Los Ángeles Clippers donde compartirá vestuario con otras tres superestrellas de la liga como son Kawhi Leonard, Paul George y su excompañero en los Houston Rockets Russell Westbrook.
Los 76ers, que tendrán que cortar a Danny Green para hacer hueco en la plantilla, reciben a cambio a Marcus Morris, Nic Batum, Robert Covington, KJ Martin, una primera ronda del 2028 no protegida, dos segundas rondas y un pick swap, mientras que los Clippers, además de Harden, se hacen con PJ Tucker y Filip Petrusev. Un movimiento que supone el final de la guerra entre el jugador, MVP de la NBA en 2018, y Daryl Morey, el mánager general de la franquicia de Philadelphia y otrora amigo y gran valedor de Harden en la NBA.
Porque si hay alguien que había apostado por el escolta californiano durante su carrera fue Morey. Él fue quien decidió darle rango de superestrella cuando le fichó para los Houston Rockets y le convirtió en uno de los jugadores mejor pagados de la NBA. El directivo confió en el estilo de juego de 'La Barba', contrató un entrenador que favoreciera un ataque en el que el triple y Harden fueran protagonistas como era Mike D'Antoni y durante años los texanos fueron uno de los mejores equipos de la liga con Harden siendo MVP de la misma. Sin embargo, siempre llegaban los 'playoffs' y el resultado siempre era el mismo, derrota ante los Warriors.
BREAKING: The Philadelphia 76ers have agreed on a trade to send guard James Harden to the Los Angeles Clippers, sources tell ESPN. pic.twitter.com/wAyuJKMfAw
— Adrian Wojnarowski (@wojespn) October 31, 2023
Los Rockets terminaron cansándose de Morey y su proyecto y terminaron despidiendo al GM, que en su despedida mandó un mensaje de admiración hacia Harden. "No sólo transformó mi vida, sino que también revolucionó el baloncesto y continúa haciéndolo como casi nadie lo ha hecho antes. El baloncesto se juega de manera diferente debido a James y en todas las canchas del mundo. La próxima generación de talento es estudiar e imitar su juego".
"No sólo transformó mi vida, sino que también revolucionó el baloncesto y continúa haciéndolo como casi nadie lo ha hecho antes"
La salida de Morey supuso el divorcio entre los Rockets y Harden, que empezó a buscar la forma de volver a reunirse con su mentor. En 2021 'La Barba' apareció con sobrepeso y se declaró en rebeldía en Houston, que terminó cediendo a la voluntad del jugador y le traspasó a los Brooklyn Nets, donde se juntaba con Kevin Durant y Kyrie Irving en un equipo diseñado para conseguir el anillo esa misma temporada. Sin embargo la falta de química destruyó los sueños de los neoyorquinos y Harden volvía a pedir salir de un equipo. Aunque en esta ocasión tenía claro su objetivo: fichar por los Sixers donde estaba su viejo amigo Daryl Morey.
El 10 de febrero de 2022 los Nets anunciaban la salida de Harden rumbo a Philadelphia a cambio de Ben Simmons. 'La Barba' recuperaba la sonrisa. Llegaba a un proyecto ganador junto a Joel Embiid y con Daryl Morey en los despachos. Y lo hacía renunciando a varios millones de dólares para dar espacio salarial a la franquicia de la Ciudad del Amor Fraterno para construir un equipo campeón.
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A mediados de 2022, Harden declinó una opción de jugador por 47,4 millones de dólares para la temporada 2022-2023 y en su lugar firmó un contrato de dos años y 68,6 millones de dólares con los 76ers que incluía una opción de jugador en 2023-2024. "Aceptar menos dinero este año para firmar a tantos jugadores como necesitábamos para ayudarnos a competir por el título y ser el último equipo en pie era muy, muy importante para mí", dijo Harden en ese momento. "Quería demostrar a la organización, a los aficionados de los Sixers y a todos los demás que apoyan lo que estamos tratando de lograr, lo que estoy tratando de hacer".
Al firmar ese acuerdo, Harden habría sido elegible para firmar una extensión de cuatro años y 210 millones de dólares esta última temporada, optando por el segundo año de ese acuerdo. Sin embargo esa firma nunca llegó. Y ahí empezó la guerra que terminó con la relación entre Morey y Harden, que acusaba al directivo de nunca haberle realizado esa oferta por el máximo. En parte por el propio Morey y en parte por la desconfianza generada en los Sixers por el comportamiento del jugador en anteriores ocasiones como cuando pidió la salida de los Rockets o de los Nets.
"Daryl Morey es un mentiroso y no volveré a jugar en una organización de la que él forme parte"
La falta de una oferta que él consideraba hecha provocó el enfado de Harden, que durante el verano apareció en un acto promocional en China y sacó el hacha de guerra: "Daryl Morey es un mentiroso y no volveré a jugar en una organización de la que él forme parte", aseguraba entonces el escolta, dejando claro que no volvería a formar parte de los Sixers. Un mensaje que le valió una multa de 100.000 dólares, pero que más tarde reafirmó al no aparecer en el 'training camp' del equipo previo a la temporada.
Fue el momento en el que Harden comenzó a pedir el traspaso con un destino en mente: los Clippers. Sin embargo, los 76ers no estaban dispuestos a ceder a cualquier precio. De hecho en un principio no querían dar salida al jugador. Sin embargo, con una situación irreversible al final la franquicia de Philadelphia ha cedido a los intereses del escolta que ya está en Los Ángeles con sus admirados Kawhi y George, un nuevo 'Big Three' para buscar el ansiado anillo.