Jayson Tatum firma el contrato más grande de la historia de la NBA... y los Celtics la plantilla más cara
Cinco años y casi $314 millones para la estrella de los Celtics, que ya tienen la plantilla más cara de la historia.

Día de mucho movimiento en Boston, que en un plazo de seis horas ha anunciado la extensión de Derrick White por casi $130 millones, que la franquicia está a la venta y que Jayson Tatum firmará un supermax por $313,9 millones y cinco años, el contrato más grande de la historia de la NBA en cifras totales. Solo en su último año, en 2030, se embolsará algo más de 71 millones de dólares, primer jugador que supera la barrera de los $70 en una temporada. El contrato incluye una opción de jugador para que Tatum pueda salirse un año antes en caso de querer renovar, algo habitual entre los acuerdos por un máximo como el de Tatum.
Brad Stevens vuelve a hacer los deberes antes de tiempo. Porque en los últimos doce meses, el gerente de los Celtics y ganador al premio del mejor ejecutivo del año, ha extendido los contratos de Jrue Holiday, Kristaps Porzingis, Derrick White, Jaylen Brown y ahora Tatum. Los dos últimos firmando un supermax, convirtiéndose en la primera pareja de compañeros en firmar el máximo contrato posible en la NBA. Tatum se volvió elegible para firmar el contrato el verano pasado al ser nombrado All NBA, algo que repitió esta temporada. Todavía tiene un año más en su actual contrato por casi $35 millones, pero a partir del verano de 2025, las cuentas de los Celtics explotan. Y si Tatum tiene el mayor contrato, Boston la plantilla más cara de la historia.
Solo sus cinco titulares, los dos Jays, Holiday, White y Porzingis, sumarán $198 millones a falta de añadir los contratos de Payton Pritchard o las primeras rondas. Y sin contar los agentes libres, como Al Horford o Sam Hauser, pieza clave en el anillo de este año. Y los Celtics, que vienen de pagar solo en multa por superar el impuesto de lujo $69,1 millones el año pasado y algo más de $40 millones en la temporada que recién finalizó, ya se acercan a los $50 millones esta temporada. Una cifra que se disparará el próximo curso cuando los Celtics empiecen a considerarse repetidores en el pago de la multa, y al implementarse el nuevo valor. Se espera que entre plantilla y sanción, Boston pague casi $250 millones únicamente de multa (y $225 en salarios). El récord hasta ahora lo tienen los Warriors de este año con $176 millones en multa.
Saber que Boston tendrá que empezar a pagar cifras inimaginables de sanción ha sido uno de los motivos por los que los propietarios mayoritarios de la franquicia han decidido vender al equipo en el momento oportuno, con los Celtics campeones. La valoración del equipo se ha disparado y seguirá creciendo, y aprovechan la oportunidad para vender al máximo valor. Pero en la pista, por ahora, nada cambia. Lo importante para el aficionado verde es que, con cambio de dueño incluído, por ahora el núcleo que levantó el anillo seguirá jugando en Boston. Y los Celtics, que no ganan anillos consecutivos desde 1969, buscarán ser el primero desde los Warriors de Kevin Durant.