Josh Hart, otro nombre en la larga lista de lesionados de los New York Knicks

Cuando los New York Knicks hicieron, antes de acabar el 2023, el movimiento de OG Anunoby, querían mandar un mensaje. Cinco semanas más tarde consiguieron, además, a Bojan Bogdanovic y Alec Burks. El momento era ahora, el objetivo era pelear desde ya con un Jalen Brunson histórico. Lo que no contaban era que las lesiones iban a ser el gran problema de este equipo, que tendrá que jugar un séptimo partido contra Indiana Pacers para conseguir un billete para las finales de conferencia. Un partido que, pese a jugarse en el Madison Square Garden, será una pesadilla para el equipo de Tom Thibodeau por la cantidad de bajas. Porque con la lesión de Josh Hart, de quien todavía no hay noticias, pueden formar un quinteto capaz de pelear por el playoff en el Este: Bojan Bogdanovic, OG Anunoby, Julius Randle, Mitchell Robinson y Hart. 

Julius Randle fue el primero en caer. Desde el 27 de enero de baja por una lesión en el hombro, intentó volver para el playoff con un tratamiento conservador, pero fue imposible. En abril pasó por quirófano y se anunció la peor noticia, que sería baja para toda la postemporada sin importar hasta donde llegaba el equipo neoyorkino. Una de las mejores herramientas ofensivas del equipo, con 24 puntos por noche y All Star por segundo año consecutivo, se quedaba fuera de salida.

Y en primera ronda perdían otras dos piezas. Mitchell Robinson, que pasó por quirófano en diciembre y se esperaba que se perdiera toda la temporada, volvió en marzo. Fue clave en la serie ante Philadelphia, pero en el tercer partido, la polémica jugada con Joel Embiid le hizo recaer en la lesión, y perderse el cuarto partido. Volvió para los dos últimos e incluso jugó el primero ante Indiana, pero tuvo que volver a pasar por el bisturí y como Randle, se perderá el resto de la temporada por una lesión de estrés en el tobillo. Lo mismo con Bogdanovic, que pese a tener problemas en el ligamento de la muñeca, decidió posponer originalmente la operación. Una lesión en el pie fue el motivo que le hizo parar, y los Knicks decidieron realizar ambas cirugías, con otra baja desde el cuarto partido de la primera ronda.

En el caso de OG Anunoby la preocupación es la más alta. El exjugador de los Raptors también fue baja durante la temporada regular por problemas en el codo, e incluso al volver hubo miedo de una posible recaída, pero llegó al playoff en perfecto estado de forma. Hasta el segundo partido ante Indiana, cuando llevaba 28 puntos en 28 minutos. En un contragolpe, el británico hizo un mal movimiento que le dejó con una lesión en los isquiotibiales. Se ha perdido los últimos cuatro partidos y es poco probable que pueda volver para el séptimo, aunque en caso de ganar New York, se confía que pueda regresar en algún momento de las finales de conferencia. Clave para defender a Jaylen Brown, Jayson Tatum y el resto de jugadores exteriores de los Celtics.

La última mala noticia para New York Knicks, además de la derrota, fue la lesión de Josh Hart. El que parecía el jugador inmortal y que llegó a enlazar 12 cuartos seguidos y 153 minutos consecutivos sin descansar, sufrió una lesión en la zona abdominal. A falta de más pruebas y un diagnóstico oficial por parte de la franquicia, el jugador apareció la segunda parte del partido con una venda compresora en la zona del ombligo. Sus dolores empezaron en el primer cuarto tras pelear un rebote, y pese a jugar casi todo el segundo cuarto y ocho minutos del tercer periodo, los Knicks confirmaron a siete minutos que sería baja para el final. Los 31 minutos totales fueron su segunda cifra más baja tras los 24 que disputó en el cuarto partido con Indiana 30 puntos arriba al descanso.

Su presencia en el séptimo es clave. Sin él, Pascal Siakam se ha hecho de oro en la pintura y la media distancia, y los Pacers han ganado la lucha por el rebote (47-35), algo impensable con el guard disponible. Y ganar un séptimo sin tres titulares y tu mejor sexto hombre se presenta como un reto mayúsculo, uno para el que los Knicks van a necesitar a Jalen Brunson y la magia del Madison Square Garden.