Nikola Jokic luce anillo para demostrar a LeBron James quién es el nuevo rey de la NBA

Como si nada hubiera cambiado. Volvió la NBA, volvieron a ganar los Denver Nuggets con un triple-doble de Nikola Jokic ante Los Angeles Lakers (117-109). El serbio mantiene clara la postura de demostrar cada noche que es el mejor jugador del planeta y que no hay una receta viable para frenarle, no a día de hoy. Una noche perfecta en Colorado, que empezó con fiesta y acabó con celebración. 

Y es que la vuelta de la NBA cada año va de la mano con la entrega del anillo para el campeón del curso pasado, que siempre abre el curso como local. Lo hicieron en Denver, en una ceremonia que ha tocado cada fibra sentimental del aficionado de los Nuggets y del baloncesto en general. Con el Ball Arena repleto hasta la bandera para ver la subida del primer banner de la historia de la franquicia, más de 19,500 espectadores disfrutaron viendo a Nikola Jokic, Jamal Murray y al resto del equipo recibir su anillo de campeón. Se abucheó a Adam Silver, comisionado y se celebró a Michael Malone, entrenador que llevó a Denver a la gloria.

Los mismo cinco que salieron titulares por parte de Denver en las finales abrían la temporada y la sensación fue la misma que en las finales de conferencia, donde barrieron a los Lakers. Porque comandados por Nikola Jokic, salieron dispuestos a romper el partido desde el primer minuto, impulsados por la energía de una rivalidad realmente inexistente. Mientras los Lakers siguen hablando sobre Denver, y sobre cómo habrá un momento para tomar represalias tras la serie del pasado mes de mayo, los Nuggets se dedican a competir. Y lo hacen a un nivel por encima del resto cuando encienden la maquinaria pesada. 

Los cinco titulares acabaron en dobles figuras. Jokic fue el mejor, por supuesto, con su triple-doble de 29 puntos, 13 rebotes y 11 asistencias, pero Jamal Murray se fue a 21 tantos, Kentavious Caldwell-Pope se quedó en 20 y tanto Aaron Gordon como Michael Porter Jr hicieron todo el trabajo sucio. Gordon acabó con 15 puntos, siete rebotes, seis asistencias y dos robos, y MPJ bajó doce rebotes en una mala noche en el tiro (5/13, 2/9 en el triple) pese a llegar a 12 puntos. Es la sexta victoria seguida de los Nuggets ante Los Lakers, incluyendo las cuatro de las últimas finales de conferencia. También es la séptima derrota seguida de los Lakers en el partido inaugural de la temporada.

Hubo detalles positivos para el equipo de Darvin Ham, que no pudo contar con Jarred Vanderbilt. Taurean Prince debutó con 18 puntos y 4/6 desde el triple, y físicamente LeBron James parece tener 25 años y no que fuera a cumplir 39 en dos meses. Pero en general, se vieron superados y solo respondieron por momentos al envite de Denver. Anthony Davis metió 11 en el segundo cuarto, y 17 al descanso, y no volvió a anotar. Se volvieron a ir los Nuggets en el tercero, con Jokic en pista, pero desde la defensa firmaron un 9-0 de parcial para cerrar el periodo y ponerse a una sola posesión. Ahí volvió a aparecer Nikola Jokic para cerrar el partido con un triple y varias asistencias a los compañeros abiertos.

Entre las caras nuevas de los Lakers, Jaxson Hayes entró en la rotación antes que Christian Wood, aunque el exjugador de los Mavericks terminó con 15 minutos (por 7 de Hayes) y siete puntos. Gabe Vincent no se pareció mucho al jugador que brilló en playoff con Miami y hasta Rui Hachimura, héroe en mayo con los Lakers, firmó un partido para el olvido en ambos lados de la pista. Solo el buen hacer de Austin Reaves, con 14 puntos, ocho rebotes, cuatro asistencias y dos robos, evitó que la debacle fuera mayor, aunque por momentos se vio superado físicamente por los exteriores de Denver. Una noche que querrán olvidar muy rápido en Los Angeles por no poder arruinar la fiesta.

La NBA ha vuelto oficialmente. Los Nuggets se han llevado la primera victoria, Nikola Jokic ha sido el mejor jugador del partido y por un momento, ha dado la sensación de que no han pasado cuatro meses. De que todo sigue igual.