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Sobreponerse a "una de las peores lesiones posibles" para eclipsar a Wembanyama: la historia de superación de Holmgren

El pívot de los Thunder pelea con el francés por ser novato del año.

Sobreponerse a “una de las peores lesiones posibles” para eclipsar a Wembanyama: la historia de superación de Holmgren
Diego Otero Fontán

Diego Otero Fontán

Oklahoma City Thunder es uno de los proyectos más atractivos de la NBA. Una reconstrucción en tiempo récord ideada por Sam Presti, el General Manager de la franquicia, y comandados desde el banquillo por Mark Daigneault y desde la pista por Shai Gilgeous-Alexander y que les llevó a una meritoria temporada 22/23 que se quedó a un palmo de tener premio en forma de clasificación para los playoffs. Pero cayeron ante los Minnesota Timberwolves en la final del play-in.

Tras una temporada de revelación, este curso los Thunder, que se han visto salpicados por la polémica de Josh Giddey, se han asentado como uno de los mejores equipos del 'Salvaje Oeste'. Situados en los puestos de honor su conferencia son, después de los San Antonio Spurs, la plantilla más joven en la NBA con una media de 23,8 años.

Un salto cualitativo respecto a la anterior campaña (finalizaron 40-42) que responde a las expectativas puestas sobre ellos. Y uno de los principales motivos de esta notable mejoría es la recuperación de Chet Holmgren. El pívot de Gonzaga (2,16 metros) se perdió la pasada temporada por lesión y su estreno en la liga norteamericana está siendo de lo más impactante.

Con los focos puestos en Víctor Wembanyama en la carrera por ser rookie del año, Holmgren firma 17,9 puntos; 8 rebotes y 2,2 tapones este curso. Además, está cerca del selecto club del 50-40-90 (53,8% en tiros de campo; 43,1% en triples, y 87% en tiros libres) que conforman nueve jugadores en la historia de la NBA, con leyendas como Stephen Curry, Larry Bird, Kevin Durant o Dirk Nowitzki. El rendimiento de Holmgren le sitúa, según la NBA, como el mejor novato de la temporada y favorito al galardón que premia al mejor debutante.

Un choque con LeBron le dejó fuera su primer año

Holmgren está maravillando con su baloncesto, pero el comienzo de la andadura del pívot en la NBA fue una pesadilla. Tras ser elegido como número 2 del draft de 2022, el 'alumni' de Gonzaga sufrió una grave lesión en su pie derecho. Todo ocurrió el 21 de agosto, cuando el jugador disputaba un encuentro en 'The CrawsOver', un torneo organizado en Seattle por Jamal Crawford.

En una internada habitual de LeBron James. el pívot de 2,16 metros trató de taponar al alero de Ohio y, en la caída, sufrió una torsión en su pie derecho. Una circunstancia que provocó una fractura en la articulación de Lisfranc, zona de la bóveda del pie que contiene huesos como el escafoides, clave en la movilidad del pie, y los huesos cuneiformes que al inflamarse o, en este caso romperse, produce un dolor importante. Un duro varapalo para el jugador que se confirmó la baja para toda la temporada.

Una lesión que en baloncesto, según el Doctor Alfonso Del Corral ha señalado en declaraciones a Relevo, "es habitual", aunque previene de la gravedad. "Es una lesión mala en todos los aspectos y para todas las partes, médicos, osteópatas y jugadores. De las peores que puede tener en el pie un deportista de élite, y más, un atleta de su altura". Hay ejemplos de este tipo de percance, como la leyenda del baloncesto Arvydas Sabonis, ex jugador de Real Madrid y Portland Trail Blazers, que sufría una pseudo artrosis del escafoides, lesión derivada de una inflamación en la articulación de Lisfranc.

A partir de ese momento, comenzó un largo y conservador camino para volver al parqué. Chet fue operado en dos ocasiones para superar la lesión. Cirugías que recordaba en declaraciones a la propia NBA. "Cuando estaba en el meollo de la cuestión, despertándome de la operación y demás, intenté comprender que este es uno de los baches que hay que superar".

"Es uno de los baches que hay que superar"

Chet Holmgren

"Obviamente, no quieres que ocurra, pero no hay vuelta de hoja. Nadie más podía tener en cuenta mi esfuerzo, así que simplemente intenté lidiar con el mayor esfuerzo posible y encontrar todas las formas de volver y ser mejor a partir de ahí", afirmaba Holmgren sobre el proceso de recuperación.

Tras las operaciones, inició una duradera rehabilitación sin riesgo. Primero con una bota ortopédica para, posteriormente, comenzar a caminar poco a poco y ganar fuerza en el pie dañado. Regresaría a las canchas en situaciones de 5 vs 0 y en abril empezaría a entrenar sin restricciones. Una recuperación calmada que desesperaba a Holmgren. "No puedo esperar para jugar de nuevo", confesaba entonces el pívot.

Finalmente, volvió a disputar un encuentro de baloncesto el 4 de julio, coincidiendo con el Día de la Independencia de los Estados Unidos, nueve meses desde que sufrió la lesión. Fue en la Summer League ante los Indiana Pacers. Un partido en el que Chet demostró las cualidades que le hicieron ganarse el segundo lugar de su clase de draft. En 29 minutos, terminó con 15 puntos y 6 de 14 tiros de campo, sumando 9 rebotes y 2 asistencias para acompañar a sus 4 tapones. "Quería salir y ser agresivo, sentí que lo hice", decía tras el choque.

Un 'sobrado' que cruzó palabras con Jokic

El inicio de temporada de Holmgren ha dejado atrás cualquier atisbo de duda por la inactividad. En él se ve un jugador sobrio y con un talento especial. Asimismo, el año pasado viajó constantemente con el equipo para empaparse de los conceptos del juego de la NBA, un hecho que destacó Shai Gilgeous-Alexander. "Es un conocedor del juego. El último año nos observó mucho, aprendió mucho. Obviamente no lo desperdició. Ha empezado con buen pie por eso, por el trabajo que hace".

Un jugador que también hace notar su personalidad. Un 'fanfarrón' que antes de entrar en la NBA indicó que sería el mejor jugador de la competición en "dos meses". Tampoco tiene miedo a enfrentarse dialécticamente con estrellas de la liga como Nikola Jokic. El dos veces MVP de la temporada regular le aconsejó que necesitaba engordar. Sin pelos en la lengua, Holmgren respondió inmediatamente al serbio. "Es difícil engordar cuando no eres gordo", en alusión a los problemas de peso que presentaba Jokic al llegar a la NBA.

Un jugador diferente y con gran personalidad que ya ha vivido en sus propias carnes lo peor del deporte. Aun así, Holmgren tiene un hambre voraz y, de la mano de los Oklahoma City Thunder, espera lograr grandes metas en el baloncesto norteamericano y olvidar por completo el calvario que sufrió.