Shai y Holmgren propinan la sexta derrota seguida de los Warriors en la noche más clutch de la temporada

Una de las estadísticas que controla la NBA es puntos en el clutch: aquellos anotados en los últimos cinco minutos en un partido donde hay cinco o menos puntos de diferencia. Una lista donde destacan Damian Lillard y Steph Curry, y nombres como DeMar DeRozan, Luka Doncic, Jimmy Butler o Alex Caruso se cuelan en el top-15. Todos ellos jugaron esta madrugada, y todos tuvieron que lucirse en el clutch. Porque la NBA agendó seis partidos la noche del sábado y solo dos de ellos se decidieron antes del último minuto, con Golden State y Oklahoma necesitando prórroga para decidir el ganador. Es la grandeza de la NBA, que cada noche tiene una sorpresa preparada, y en este caso, la firmó Chet Holmgren.

Uno de los favoritos a llevarse el premio al mejor novato firmó el mejor partido de su joven carrera, y en qué escenario. Oklahoma volvía a San Francisco, donde ganaron el jueves, y repitieron victoria en el Chase Center. El rookie firmó 36 puntos con 14/22 en tiros, 10 rebotes, 5 asistencias, además de dos robos y un tapón. No solo eso, metió el triple sobre la bocina que mandaba el partido al tiempo extra, si bien lo hizo tras dos errores graves en ataque. Con Shai Gilgeous-Alexander, autor de 40 puntos y diferencial en el tiempo extra, dejaron a los Warriors en récord negativo, 6-8 y solo medio partido por encima de las posiciones de play-in.

Y eso que Golden State tuvo motivos para sonreír. El primero, la vuelta de Andrew Wiggins, que si bien nunca se había ido, estaba lejos de su nivel. El canadiense anotó 31 puntos y un triple faltando segundo y medio que podía haber sido el de la victoria si no hubiera sido por Holmgren. Steph se movió en sus habituales registros, con 25 puntos en el que es el segundo partido sin Draymond Green, todavía sancionado. Se dejaron remontar los Warriors, que dominaban al tercer cuarto por 18 puntos, y que acabaron sufriendo la sexta derrota consecutiva, cinco de ellas en casa. Es la tercera vez en la carrera de Kerr que los Warriors sufren al menos cinco seguidas en casa, aunque las otras dos rachas son de la infame temporada 2020.

El triunfo de los Thunder es, por su parte, otra gesta del jovencísimo equipo que en los últimos días no solo ha ganado dos veces a Golden State, si no que también asaltaron Phoenix y apalizaron a los Spurs de Wemby. Están empatados por la tercera posición en el Oeste con Dallas, a solo medio partido del #1 y soñando en grande. Pero no fue el único equipo que ganó en el clutch: Chicago, Minnesota y Milwaukee, todos llegaron al último minuto con el partido igualado.

En New Orleans, una canasta de Karl-Anthony Towns a falta de cinco segundos le dio la victoria a los Minnesota Timberwolves que se ponen primeros de la conferencia, empatados con Denver. El dominicano anotó 29 puntos, liderando a unos Wolves que vieron a su estrella en problemas de faltas todo el partido, Anthony Edwards, pese a acabar con 23 puntos. Remontaron 14 puntos de diferencia en el último periodo con un parcial de 27-12 en ocho minutos, del 108-94 al 120-121 final. Sin Zion Williamson, Brandon Ingram anotó 30 puntos y Jonas Valanciunas firmó un doble-doble con 26 puntos y 11 rebotes.

Si Dallas hubiera ganado, se habría quedado con esa primera posición del Oeste, pero Damian Lillard tenía otros planes y Giannis Antetokounmpo le ayudó a cumplirlos, y viceversa. La pareja de los Bucks dominó en el último cuarto con 25 puntos entre los dos, de los 43 que metieron en el parcial para cerrar el partido de 31-14. En total fueron 40 para el griego y 27 para el base, ambos con doble-doble. Y si la pareja de los Bucks metió 67, la de Dallas 74: 39 para Kyrie, haciendo el mejor partido de su temporada, y 35 para Luka Doncic a solo un rebote y una asistencia del triple-doble. Y muchos ojos en los colegiados, sobre todo por la diferencia de tiros libres.

Los Heat empezaron arrasando en Chicago con un parcial de 22-1, pero los Bulls supieron aguantarse al partido y poco a poco remontar hasta igualar el encuentro con apenas minuto y medio por jugarse. En el clutch, Alex Caruso, Jimmy Butler y DeMar DeRozan se turnaron para intercambiar canastas, y se lo acabó llevando Chicago. Doble racha rota: la de siete triunfos de los Heat y la de tres derrotas de los Bulls, que si bien suman en positivo, no recuperan la dinámica de equipo. Zach LaVine, todavía en rumores de traspaso, se quedó en 13 puntos y solo 10 tiros de campo y los Bulls fueron mejores cuando los balones se los jugaron Caruso y DeRozan.

Empezaron la jornada los Knicks venciendo relativamente fácil en Charlotte. Los Hornets siguen siendo un equipo sin una alternativa a LaMelo Ball. El base metió 34 y rozó el doble-doble con nueve asistencias, pero solo el novato Brandon Miller, con 29 puntos, estuvo a la altura. Tercer triunfo seguido para Nueva York que sigue subiendo posiciones en el Este. En el otro partido fácil de la noche, ganaron los Grizzlies, que se aprovecharon de San Antonio y sus ocho derrotas seguidas. Victor Wembanyama volvió a hacer buenos números, con 19 puntos, 13 rebotes y ocho tapones, algo no visto por un rookie desde 1999, pero se dejaron remontar. El parcial en la segunda parte de 69-40, con el séptimo doble-doble de Santi Aldama en su carrera NBA: 17 puntos y 10 rebotes desde el banquillo, aunque salió de titular en la segunda parte. La pareja Desmond Bane (26) y Jaren Jackson Jr (27) fueron diferenciales y los Spurs son el primer equipo del Oeste en llegar a las 10 derrotas.