NBA

La temporada con más palizas en la historia de la NBA: Miami destroza por 60 puntos a Portland

Los Heat abusaron de los Trail Blazers, que se llevaron su segunda derrota por al menos 60 puntos, en lo que ya empieza a ser una tendencia.

Scoot Henderson y Bam Adebayo pugnan por un balón./Reuters
Scoot Henderson y Bam Adebayo pugnan por un balón. Reuters
Alejandro Gaitán

Alejandro Gaitán

45 puntos en el segundo cuarto fueron suficientes para saber lo que se venía en Miami esta madrugada. Los Heat, cogiendo ritmo para los playoff, ganaban por 34 al descanso ante unos Blazers perdidos. Rotaron a sus titulares en el tercer cuarto, pero nunca frenaron el ritmo y al final el resultado fue sangrante para la franquicia de Oregon: 142-82, 60 puntos de diferencia. La novena mayor victoria de la historia de la liga, aunque no ha sido una anomalía este año. 

Ya que por segunda vez esta temporada, los Blazers salen derrotados por al menos 60 puntos, algo que ya les pasó en enero en su visita a Oklahoma, cuando los Thunder ganaron por 62 puntos. Fue la quinta victoria más abultada en la historia de la NBA y una de las siete palizas que se han dado esta temporada. Siete veces, contando a los Heat esta madrugada, un equipo se ha llevado el partido por al menos 50 puntos de diferencia, la cifra más alta en la historia de la liga, que nunca había superado las cuatro, cifra más alta, en 2022. En los últimos cinco años se han conseguido tantas palizas (15) como entre 1994 y 2019, o desde el inicio de la NBA hasta 1986. Tramos de décadas enteras.

Liderados por Boston, con tres victorias por 50 puntos, además de los Thunder y Miami, también Philadelphia y Dallas han conseguido una cada uno. Los Celtics son el único equipo que se lo hizo a un rival de playoff, dos veces además, tras ganarle a Golden State por 52 puntos y a los Indiana Pacers, sin Tyrese Haliburton, por 51. La tercera fue ante Brooklyn por 50, misma diferencia que tuvieron los Mavericks de Luka Doncic al recibir a Utah a principios de diciembre. Los Sixers son los únicos que lo consiguieron de visitantes, ganando en Charlotte por 53 puntos en una noche en la que Joel Embiid anotó 42 puntos en apenas 30 minutos de partido. La mayor paliza de la historia siguen siendo los 73 que Memphis consiguió ante Oklahoma en diciembre de 2021.

Y uno de los motivos es que nunca había habido una desigualdad tan grande entre los equipos muy buenos y los equipos muy malos. Los Celtics tienen, pese a las dos derrotas de esta semana, el quinto diferencial más alto de la historia de la NBA (+11,37) y son uno de los tres equipos que en promedio gana cada partido por más de 6.5 puntos de diferencia, junto con Oklahoma (+7,22) y Minnesota Timberwolves (+6.74). Al contrario, por segunda vez en la historia hay cinco equipos que tienen un diferencial de -7, igualando un récord de 2022. Charlotte (-10,4), Washington (-9,6), Detroit (9,15), Portland (-8,29) y San Antonio (-7,23) son élite en el arte de no ser competitivos. Y cuando se enfrentan, se crean disparidades que no se habían visto nunca por amplias y por repetitivas.

Además, el estilo de juego invita a diferencias tan grandes. Esta temporada es la de mayor ratio ofensivo y mejores porcentajes de triple nunca vistas en la competición, lo que ayuda a crear desventajas tan amplias, y al mismo tiempo, a recortarlas. El talento, con hasta siete jugadores anotando al menos 60 puntos en un partido esta temporada (otro récord de la NBA), influye también. La NBA está en el momento de máximo esplendor ofensivo, con las defensas reaccionando a los Giannis Antetokounmpo, Luka Doncic o Joel Embiid, tres de los jugadores que han superado los sesenta y los únicos que lo hicieron en un triunfo. Los otros, Karl-Anthony Towns, Devin Booker, Steph Curry y Jalen Brunson esta madrugada, lo consiguieron en una derrota.

Es la NBA actual: la de muchos puntos y donde cuando un partido se rompe, si el equipo superior quiere, puede abrir un hueco vergonzoso. Le pasó anoche a los Blazers en Miami, y que no sorprenda si entre este fin de semana y abril tenemos otra noche de +50. La nueva normalidad en la NBA.