La razón del éxito de los Oklahoma City Thunder es... Serge Ibaka

Los Oklahoma City Thunder regresan a unas semifinales de Conferencia por primera vez desde la temporada 2015-2016 cuando cayeron en siete partidos ante los Golden State Warriors. En esta ocasión se miden ante los Dallas Mavericks de Luka Doncic y Kyrie Irving en una eliminatoria que será emocionante con dos equipos con estrellas jóvenes que buscarán el pase a las Finales de Conferencia.

Esa inexperiencia e insensatez es la que brilla en Oklahoma. Son la segunda plantilla más joven de toda la NBA (23,8 años), únicamente por detrás de los San Antonio Spurs de Victor Wembanyama (23,5). Además, dentro de su quinteto nadie sobrepasa los 25 años que marcan Shai Gilgeous-Alexander y Luguentz Dort. Jalen Williams (23 años), Chet Holmgren (22) y Josh Giddey (21) completan uno de los cinco iniciales más jóvenes en la historia de la postemporada.

Una reconstrucción que comenzó en la eliminatoria ante los Warriors, en la que perdieron una ventaja de 3-1 para avanzar a las Finales de Conferencia. Aquella serie marcó el último servicio de Kevin Durant en los Thunder antes de poner rumbo al equipo de San Francisco en la agencia libre. Además, ese verano tuvo lugar un traspaso que cambió el paradigma de la franquicia de Oklahoma.

El 24 de junio de 2016 una de las estrellas de aquel equipo, el español Serge Ibaka, fue traspasado a los Orlando Magic a cambio de Victor Oladipo, Domanatas Sabonis y Ersan Ilyasova. Un intercambio que supuso la llegada de dos futuros All Stars que no fueron capaces de destapar todo su potencial junto a Russell Westbrook, que esa misma campaña sería nombrado como MVP.

El próximo traspaso tendría como protagonistas a las dos jóvenes promesas que habían llegado desde el estado de Florida. Oladipo y Sabonis ponían rumbo a Indiana a cambio de una megaestrella de la NBA como era Paul George. Una intentona de formar un nuevo 'Big 3' junto a Westbrook y Carmelo Anthony que no funcionó como esperaban en la franquicia.

El fracaso del proyecto supuso una reconstrucción en la que las tres piezas principales saldrían del equipo y uno de ellos sería un Paul George que sería la última pieza en caer del dominó de Sam Priesti, General Manager de la franquicia. El verano de 2019 pondría fin a la efímera etapa del angelino en los Thunder y sería traspasado a Los Ángeles Clippers.

El pack que obtendría a cambio Oklahoma es de los más prolíficos en la historia de la NBA. El traspaso incluía a un Shai Gilgeous-Alexander que había disputado su primera temporada en la NBA, Danilo Gallinari, cinco primeras rondas del Draft y dos intercambios de rondas. En el caso del canadiense se ha convertido en una de las estrellas de la competición y su nombre figura entre los tres finalistas para el premio MVP tras un curso excepcional (30,1 puntos; 5,5 rebotes, y 6,2 asistencias).

Entre esos picks se encuentran el de Miami Heat de 2021 que acabó por convertirse en la elección de Tre Mann, ahora en los Charlotte Hornets, y la primera ronda de los californianos en 2022 fue utilizada para seleccionar a Jalen Williams. Es decir, los Thunder obtuvieron a través del traspaso de Serge Ibaka en 2016 lo siguiente: Shai Gilgeous-Alexander, Jaylen Williams, Tre Mann, dos primeras rondas del Draft (2024 y 2026) y un intercambio de picks en 2025.

Los Thunder confiaron su futuro a la recolección de Sam Presti de futuras rondas de Draft y la apuesta por jugadores escogidos en la lotería para desarrollarlos en la propia franquicia. Ocho años después del traspaso de Serge Ibaka que comenzó todo, los Oklahoma City Thunder son uno de los favoritos para ganar el anillo no sólo este año, sino la próxima década.