FINAL FOUR

La Champions tapa otro milagro de la sección de balonmano del Barça: "Notamos los recortes"

El FC Barcelona logró su duodécima Copa de Europa pese a competir en clara inferioridad presupuestaria respecto a algunos rivales.

Los jugadores del Barcelona festejan la duodécima Champions culé. /EFE
Los jugadores del Barcelona festejan la duodécima Champions culé. EFE
Andrés G. Armero

Andrés G. Armero

Es muy difícil mantener una hegemonía en Europa, como la del FC Barcelona de balonmano, en inferioridad de condiciones respecto a algunos de sus más directos rivales. Por eso, la duodécima Champions de la sección, lograda este domingo en Colonia frente al Aalborg danés de Mikkel Hansen, tiene un mérito extraordinario.

"Sabemos que estamos en un club con mucha presión y queremos ganar, haya o no haya recortes", comenta Dika Mem, una de las estrellas del equipo. "Pero obviamente hay que valorar lo que hacemos, porque hemos bajado la plantilla. Hay muchos jóvenes. Petar Cikusa, por ejemplo, tiene 18 años", expone el francés antes de avalar al diamante blaugrana: "Está en un momento extraordinario, va a ser un buen jugador".

Uno de los veteranos del equipo, Aitor Ariño, que se recuperó en 2023 de su grave lesión en la rodilla izquierda para dar por enésima vez el do de pecho en la cancha en una Final Four, analiza la clave del éxito blaugrana: "Somos una familia, hay mucha unión dentro del grupo y piezas individuales que hacen que seamos una piña".

El extremo izquierdo, uno de los espejos para los más jóvenes por sus valores, explica la coyuntura: "Sabemos que el club está en una situación muy complicada, notamos mucho los recortes, más en la sección de balonmano, donde luchamos contra equipos que nos doblan en presupuesto. Por ahora están saliendo las cosas, aunque no creo que sea el camino el del recorte".

El Barça, por ejemplo, con sus 8 millones de euros de presupuesto, eliminó en los cuartos de la Champions al PSG, que tiene más de 16. Entre los culés y los parisinos están el Kiel alemán, al que arrasó el cuadro catalán en semifinales, a pesar de tener más de 13 millones, y el Veszprém húngaro, destino hace un año del pivote azulgrana Ludovic Fabregas, uno de los jugadores más completos y determinantes del mundo.

El hombre que ha dado al club seis Champions como jugador y dos como entrenador, Antonio Carlos Ortega, quiso "agradecer a la directiva el apoyo y la confianza desde el principio" y a todos los jugadores "el paso al frente que han dado". Eso sí, el malagueño sabe, con una sonrisa en sus labios, que es el momento de pedir: "Cuando ganas tienes más poder, te sientes con más fuerza. Ya veremos si podemos pedir. Hay alguna cosa que es importante cerrar en el equipo, sin duda".

La plantilla, en su práctica totalidad, tendrá continuidad la temporada que viene. El reto va a ser retener a sus estrellas en campañas sucesivas. El portero toledano Gonzalo Pérez de Vargas, uno de los pesos pesados de los Hispanos, hará las maletas en el verano de 2025 con destino al Kiel. Retener a Melvyn Richardson, MVP de la Final Four de Colonia y al que también le queda un año de contrato, será harto complicado. El alivio es que los mellizos Cikusa ya están renovados hasta 2027.

Eso sí, pase lo que pase y venga quien venga, la autoexigencia no se negocia, como recalca el entrenador Ortega. "Hay que luchar por los títulos, aquí se juega con presión. En el Barcelona en general, y en la sección de balonmano en particular, hay mucha presión. Yo he sido jugador 11 años y la sentía. Ha habido jugadores históricamente que han tenido que salir porque no la soportaban", comparte.

Otra de las leyendas del club, el exarquero sueco Tomas Svensson, hoy entrenador de porteros del Barcelona, toma la palabra. "La clave es el corazón, el alma del Barça y de esta sección. Hay una cultura desde la época de Valero Rivera", manifiesta uno de los integrantes del mítico Dream Team. "Sacamos casta de donde no hay, si no podíamos fichar lo que queríamos, hemos recurrido mucho a los jóvenes, a la cantera, ahí tenemos a los hermanos Cikusa", ejemplifica antes de concluir: "Esta es la grandeza del Barça. Tenemos un buen plan de futuro".