BALONMANO

Vas ganando, tu rival te ofrece la Champions y la rechazas: el gesto deportivo de la final de balonmano

La final de Champions se interrumpió por una atención médica. El técnico del Magdeburgo ofreció al Kielce, que iba por delante, acabar ya con el resultado de ese momento.

Talant lamenta perder la Champions de balonmano./AFP
Talant lamenta perder la Champions de balonmano. AFP
Jonás Pérez

Jonás Pérez

La final de la Champions de balonmano en Colonia cayó en un segundo plano tras la atención a un periodista polaco a 12 minutos y 20 segundos de la conclusión del tiempo reglamentario. A posteriori, Pawel Kotwica, de 51 años de edad, falleció. El anuncio de su muerte se produjo una vez concluyó el encuentro, aunque los protagonistas eran conscientes de que la situación no invitaba al optimismo. Por ese motivo, Bennet Wiegert, entrenador del Magdeburgo, le propuso a Talant Dujshebaev la conclusión del partido con triunfo para el Kielce, que en ese momento estaba por delante.

Un gesto que honra al deporte, con un técnico dando prioridad a la atención médica de una persona en la grada sobre su propia victoria, a la que estaba dispuesto a renunciar. Sin embargo, Talant Dujshebaev también dio ejemplo con su respuesta. Según desvela Pawel Papaj, responsable de marketing del Kielce, su técnico aceptó la propuesta de Wiegert para suspender el partido en ese momento. Aunque no reconoció su propio triunfo.

"Estoy de acuerdo contigo. Bravo. Pero no reconocemos nuestra victoria, solo terminamos con dos equipos finalistas. Ningún ganador", replicó Dujshebaev a Wiegert en ese momento, siempre según el testimonio de Pawel Papaj, una voz autorizada. Finalmente, tras la atención al periodista y su retirada de la zona de la grada en la que se encontraba, el partido siguió su curso.

Pero, por supuesto, los equipos mantuvieron la preocupación por su estado de salud. La EFF anunció la muerte del periodista antes del arranque de la rueda de prensa post-partido. Fue cancelada y los equipos guardaron un minuto de silencio en memoria del periodista.

Pese a que lo deportivo pasó a un segundo plano, el Magdeburgo alemán celebró como pudo su triunfo en la gran final de la Champions por 30-29 en el tiempo extra. El Kielce, minutos antes, pudo pactar con el rival la conclusión del encuentro, que se hubiera podido traducir en éxito para ellos. Sin embargo, Talant decidió que lo justo, si el partido no llegaba a su fin, era declarar una final sin ganador. ¡Pese a que el rival les había ofrecido su propia derrota!

Desgraciadamente, Pawel Kotwica acabó falleciendo. El diario polaco Echo Dnia le brindó un mensaje homenaje: "Era un gran periodista, un destacado experto en balonmano, que amaba más que todo. Hablábamos horas y horas de partidos, de jugadores, de tácticas. Toda la redacción del Echo Dnia llora, es difícil expresar nuestra tristeza", Y el Kielce le dedicó su triunfo: "Pawel, te recordaremos y ganaremos, pero nadie nos devolverá estar contigo. Hoy no hay nada que importe más". El deporte perdió importancia. La deportividad siempre primó.