BALONMANO

Julen Aguinagalde, una leyenda para la eternidad

El pivote se retira como jugador y verá cómo el número '13' quedará colgado para siempre en la pared de Artaleku.

Julen Aguinagalde, un fijo con los 'Hispanos'. /REUTERS
Julen Aguinagalde, un fijo con los 'Hispanos'. REUTERS
Álvaro Valdemoro García

Álvaro Valdemoro García

Los años van pasando poco a poco. En el caso de los deportistas de élite, las temporadas. Siempre es complicado despedir a una leyenda de nuestro balonmano que ha dejado una huella imborrable en todos los clubes en los que ha jugado y en la Selección. Julen Aguinagalde, a sus 40 años, ha puesto fin a una carrera llena de éxitos colectivos e individuales. "Ha sido uno de los mejores pivotes en España", comenta Viran Morros para Relevo.

Como ocurre siempre en la recta final de cada curso, son muchos los equipos que comunican que varios jugadores no seguirán en las filas de cada club en la próxima temporada. En este caso, el irundarra cerrará una etapa en su casa y en el club de sus amores, en un final soñado para una trayectoria impecable en la Liga ASOBAL.

El internacional español vive su último partido como profesional este fin de semana frente a Ángel Ximénez Puente Genil ante su gente, en el Polideportivo Municipal de Artaleku. El pabellón se vestirá de gala para decir adiós a uno de los mejores jugadores que ha vestido y defendido la camiseta del Bidasoa Irún.

Para despedir al jugador con honores, el club vasco ha preparado varias iniciativas antes y después del choque. Entre ellas, una subasta con la camiseta conmemorativa en la que el dorsal 13 será protagonista, número que lleva el pivote por detrás. En ella, destacan algunos detalles: en la parte delantera aparecerá su nombre y dos apellidos junto a los años de su primer y último partido (Julen Aginagalde Akizu, 1999-2023). También en la parte trasera estará una imagen del rostro del jugador dentro del escudo bidasotarra.

También, un momento muy esperado para todos los aficionados a este deporte será cuando el club vasco retirará la camiseta del jugador a la conclusión del choque y quedará colgado para siempre en la techo de Artaleku, como reconocimiento a su trayectoria.

Los Aguinagalde a los mandos de la dirección deportiva

Pese a que no se vestirá nunca más de corto, Julen seguirá vinculado al mundo del balonmano como ha estado desempeñando en esta última temporada, dando el salto a la dirección deportiva del Bidasoa junto a su hermano Gurutz Aguinagalde, presidente del club. De hecho, el jugador ha estado compatibilizando esta campaña ambas funciones. "Llevo unos meses trabajando en la dirección deportiva, compaginándolo con mi faceta de jugador. Evidentemente, es complicado compaginarlo, pero yo lo estoy haciendo con toda la ilusión posible".

Este nombramiento se hizo con dos objetivos claros. El primero de ellos, consolidar el área deportiva del club a corto plazo, cubriendo así las necesidades del área deportiva profesional surgidas por el crecimiento del club en las últimas temporadas; y, a largo plazo, este perfil debe contribuir a mejorar la planificación y organización deportiva, tanto de puertas para adentro como hacia afuera, en lo referente al mercado.

Una persona divertida

Si hablas con varios compañeros de Julen, todos te dicen lo mismo: "Era una persona muy querida, que le encantaba hacer bromas con todos". Así le definen para este medio Viran Morros, Hombrados y Ángel Montoro, tres compañeros que han vivido muchas noches de gloria dentro y fuera de la pista.

Para el actual jugador del Olympiacos siempre ha sentido una admiración por él. Fue Julen quien le ayudó con varios consejos en su primera temporada en el Ademar León sobre cómo debía comportarse fuera del pabellón para conseguir los objetivos.

Además, tanto el madrileño como el catalán cuentan que el pivote siempre ha sido una voz cantante en el vestuario, de esos jugadores que siempre quieres tener en tu equipo. De hecho, el ex portero confiesa que el jugador vasco junto a otros compañeros le hicieron una parodia súper divertida por sus 40 años.

Una carrera llena de títulos

La trayectoria de Julen Aguinagalde está a la altura de las grandes leyendas que nos ha dejado el balonmano español, como los hermanos Entrerríos o el portero José Javier Hombrados. Sin duda, una trayectoria difícilmente que se pueda superar, según los datos.

El jugador bidasotarra ha militado en varios equipos. Desde su debut hace 24 años (temporada 1999/2000), ha jugado 4442 partidos en la Liga ASOBAL. En España, aparte de vestir la elástica del conjunto vasco, también se ha enfundado la camiseta del C.D. Ademar León, BM. Ciudad Real y del Atlético de Madrid. En la temporada 2013-2014 decidió probar suerte en el extranjero. Jugó siete temporadas en el Kielce hasta volver al equipo que le vio crecer.

Su carrera tampoco se entiende sin sus logros con los 'Hispanos'. El internacional español debutó con los colores de la Selección en junio de 2006. Fue el primero de los 205 encuentros oficiales que ha disputado. Tocó el cielo con la medalla de oro en el Mundial de 2013 y con los Europeos de 2018 y 2020. También se colgó la plata en el Campeonato de Europa de 2016. El tercer escalón en el podio lo consiguió tres veces, la última en sus segundos Juegos Olímpicos en Tokio.

En cuanto a los premios individuales, Julen Aguinagalde fue nombrado mejor jugador de la Liga Asobal tres temporadas (2010, 2012 y 2013); mejor pivote del Mundial y de la VELUX EHF Champions League en el año 2013 y 2019; mejor pivote del Campeonato de Europa en 2014 y en 2016; y mejor pivote de los Juegos Olímpicos de Londres en 2012.

A nivel de clubes también alcanzó la cima en 2015-2016, al levantar la máxima competición continental, la VELUX EHF Champions League. En su etapa en Polonia también ganó varias veces la liga doméstica y la Copa. Antes, en España, había logrado con el BM. Ciudad Real una Liga Asobal (2009/2010), una Copa Asobal (2010/2011), una Supercopa de España (2010- 2011) y un Mundial de Clubes (2009/2010); una Copa Asobal con Ademar León (2008/2009); y con el BM. Atlético de Madrid dos Copas de S.M. el Rey (2011/2012 y 2012/2013), una Supercopa de España (2011/2012) y un Mundial de Clubes (2012).