Emanuel Navarrete, tras la victoria más importante de su carrera: "Nadie ha querido unificar conmigo"

"Un mexicano se hace notar en cualquier lugar. De alguna forma me voy a sentir como en casa", relata sonriente a Relevo Emanuel Vaquero Navarrete (38-1, 31 KO). El boxeador de San Juan Zitlalpetec espera que su combate del próximo 16 de noviembre en Las Vegas sea una fiesta para los muchos compatriotas que acudirán. La Ciudad del Pecado acogerá por primera vez un Gran Premio de Fórmula 1 ese fin de semana (del 17 al 19 de noviembre). Checo Pérez mueve afición y la idea de Top Rank, su promotora y organizadora del evento, es aprovechar el arrastre de aficionados que van a ver la carrera para que acudan al T-Mobile Arena.

El campeón mundial WBO del superpluma no tiene dudas de que sus paisanos le estarán arropando y prevé un combate "muy duro y animado". Navarrete hará su segunda defensa de su faja frente al campeón olímpico en 2016, Robson Conceiçao (17-2, 8 KO). "Ganar un oro olímpico es uno de los méritos más grandes. Sólo con decir eso ya nos hace saber que voy a enfrentarme a alguien con mucho peligro. Es un boxeador muy complicado. Tiene una gran experiencia y sólida. Me va a dar una pelea muy difícil", afirma el mexicano. Su último combate fue en agosto, por lo que casi no ha tenido tiempo de parón. "Estuve descansando unos 20 días y volví al gimnasio. Digamos que pude regresar al 70% de mi capacidad. Fue el tiempo óptimo", añade.

El 2023 está siendo el año del Vaquero en el superpluma. Navarrete ganó su cinturón en febrero y en agosto tuvo su victoria más importante hasta la fecha. Derrotó, con gran holgura, a Óscar Valdez. "Decir que ha sido la más importante sería demeritar al resto de mis rivales, pero por la rivalidad entre mexicanos sí que es cierto que es la que más me ha dado. Noto mayor apoyo de la afición. Han crecido los números en redes sociales y los que no confiaban en mí ya lo hacen", reconoce el campeón mundial en tres divisiones.

Navarrete tiene tan sólo 28 años, pero ha logrado llegar a cotas muy altas. Reinar en tres pesos diferentes, en tan sólo cinco años, está al alcance de muy pocos. "Está siendo un trabajo en conjunto. La promotora que está llevando mi carrera me ha dado las oportunidades y yo he respondido. Las he aprovechado. También hay que destacar la labor de mi equipo, que han sabido cuidarme. Si el cuerpo está tronado no se puede pelear tan seguido y ese trabajo es algo que valoro y tengo en cuenta", asegura el campeón.

Aunque la cabeza del Vaquero está en Conceiçao, el mexicano no olvida dejar un mensaje claro que ya lleva tiempo replicando: "Hasta ahora ningún campeón ha querido unificar conmigo. Estoy en el momento ideal para hacerlo. Creo que es ahora… y de lo contrario no será nunca. Se ha hablado de Cordina. Ojalá pueda cerrarse para 2024", concluye el azteca.