La historia tras un abrazo de locura en Moncofa que está poniendo a la Vuelta Femenina en todas las pantallas

Moncofa esperaba al pelotón de La Vuelta Femenina 24 by Carrefour.es, sujeto a una lluvia intermitente desde la salida de Buñol, con una llegada trazada con escuadra y cartabón, ideal para las ciclistas de mayor cilindrada y sus 'trenos'. Sucedió que las precipitaciones y las pinturas urbanas convirtieron el firme en una pista de patinaje; los nervios hicieron el resto para provocar una sucesión de caídas que desordenaron la llegada masiva. Ganó quien tuvo el acierto, la habilidad y, por qué no decirlo, la suerte de su parte. Ganó Alison Jackson. Ganaron las redes sociales que pudieron regocijarse con su jubilosa celebración y sus bailes.

Alison Jackson (1988, Vermilion) se abrazó con todas sus compañeras: la alasqueña Kristen Faulkner, que la había lanzado de forma impecable; la alemana Clara Koppenburg, que la había apoyado para pasar la selección que Visma | Lease a Bike había forzado el Puerto de l'Oronet. También abrazó a la australiana Brodie Chapman, ciclista del Lidl-Trek con quien comparte entrenamiento en Girona. Y bailó; bailó varias veces, con su peculiar estilo, porque es su forma de expresar la alegría cuando ésta desborda su cuerpo.

No es la primera vez que Jackson se viraliza por sacudir el esqueleto como nadie tras horas de esfuerzo sobre la bicicleta. En la París-Roubaix del año pasado, tras conseguir la gran victoria de su tardía carrera deportiva gracias a una fuga bien gestionada y un sprint final demoledor, la ciclista de EF Education-Cannondale se bajó de la bicicleta e inmediatamente se marcó un baile netamente 'tiktokero' que giró durante semanas por las redes sociales.

La victoria de Moncofa ha llegado en el momento perfecto para Jackson, quien había estado bastante lejos de la victoria en las carreras que había disputado hasta ahora. Su campaña de clásicas había sido, en sus propias palabras, "decepcionante"; se saldó con un anónimo 27º puesto en la Roubaix donde defendía 'adoquín'. "Había venido a esta Vuelta con muchas ganas de ganar", comentó tras sellar su triunfo. "Quería hacer todo lo posible para conseguir una victoria. El equipo creía en mí, desde el staff hasta las corredoras, y me lo tomé muy en serio. Una victoria en La Vuelta Femenina es otro gran logro que añadir a mi currículum".

Repetir triunfo no será sencillo: para una rodadora con punta de velocidad como ella, sólo la meta del miércoles en Zaragoza ofrece una oportunidad franca. No obstante, tanto las llegadas del martes en Teruel como la del sábado en el repecho de Sigüenza pueden ser propicias para su potencia. Si efectivamente resultan serlo, tal vez vuelva a deleitar al público con una de sus celebraciones extáticas.