"Contador a cero" y objetivo Giro para Pello Bilbao después de un 2024 "decepcionante"

Altea.- Se sienta con Relevo y pide un zumo de melocotón. "Yo soy un ciclista que está enchufado o desenchufado", razona, "y ahora estoy enchufado. Suficientes cervezas me bebí en las vacaciones". Fueron dos meses alejado del ciclismo: cuatro semanas sin tocar la bici, en las que aprovechó para viajar con su familia a Japón, y las demás en casa. Él es uno de esos ejemplos positivos que ha optado por la lealtad a sus raíces, residente vital y fiscal en País Vasco sin sucumbir a los cantos de sirena de Andorra, Mónaco y compañía. Aparte del periplo por el país del sol naciente, no se ha movido de su corrala. "Cuanto más viejo soy, menos necesito viajar. Ya hay suficientes planes y lugares interesantes cerca de casa. 2024 ha sido especialmente estresante para nosotros, y he preferido vivir lento durante este tiempo".

Pello Bilbao (1990, Gernika, Vizcaya) asume la realidad: Bahrain Victorious no estuvo esta campaña al mismo nivel que la anterior. 12 triunfos en primera división contra 4; tres victorias de etapa con tres ciclistas diferentes en el Tour de Francia contra una prestación invisible. "Por supuesto, esta temporada ha sido decepcionante comparado con la previa", admite. "Yo diría que, como bloque, en 2023 rendimos por encima de lo esperado y todo nos vino de cara. El año pasado, en cambio, sufrimos bastantes problemas, y ciclistas muy importantes estuvieron lesionados o enfermos en los momentos clave de la campaña". Y de ahí una ansiedad colectiva que ha llevado a cambios de calado: el principal, el regreso de Rod Ellingworth al cuerpo técnico en el rol de 'director de proyectos especiales'.

"A título personal, siento que mi nivel era bueno y equiparable al de años anteriores", continúa reflexionando el bilbaíno. "No obstante, no logré marcar la diferencia en ningún momento para conseguir ese gran resultado que sí obtuve en temporadas anteriores". Podio en el UAE Tour, 6º en la Itzulia, victoria de etapa en Eslovenia coincidiendo con el aniversario del deceso de Gino Mäder; retirada enfermo en el Tour de Francia, cruel final de temporada con un costalazo en el Mundial al que llegaba esperanzado tras subir al podio junto a Tadej Pogačar en el Gran Premio de Montreal. "Podría haber estado en el grupo de las medallas", lamenta. "Y también haber disputado Lombardía, que nunca he llegado lograr a tope de forma y me gustaría hacerlo algún año…"

"Yo diría que en los años previos había vivido temporadas muy, muy redondas, ¿no?", reflexiona. "Venía de sufrir muy pocos percances, y este año no ha sido así: me ha faltado esa continuidad de no sufrir problemas físicos, de no caer enfermo cada dos por tres. Y es que los ciclistas somos muy delicados en ese sentido, porque nos exponemos a muchos riesgos. Casi es un milagro completar una temporada sin contratiempos y poder aprovechar tu condición física en cada carrera. Este año no lo he conseguido y, aparte, cuando estaba a mi mejor nivel me faltó ese instinto para afinar el tiro y brillar".

"Ahora, el contador está a cero", continúa Bilbao. "El estado de ánimo dentro del equipo es mucho mejor. La falta de resultados nos llevó el año pasado a sentir cierto estrés y ya lo hemos olvidado para concentrarnos en trabajar de cara a lo que viene. En cuanto a mí, quiero cambiar lo que no funcionó". En ese aspecto, su calendario sufrirá una modificación esencial: el eje de la temporada no será el Tour de Francia, sino el Giro de Italia en el cual ha logrado ya dos victorias de etapa (ambas en 2019) y tres puestos entre los seis primeros de la general (5º en 2020 y 2022; 6º en 2018).

"Me motiva mucho volver al Giro", expresa entusiasmado el líder de Bahrain Victorious. "Es la gran vuelta en la que me encuentro más cómodo; casi te diría que en mi salsa… Sí que el Tour me ha dado mucho; probablemente, la victoria de etapa de hace dos años me regaló las emociones más fuertes que he vivido en el ciclismo. Aun así, el Giro siempre ha sido especial para mí y veo que es una carrera que me puede dar más oportunidades para correr a mi manera". ¿Cómo? "Jugando un papel de segundo espada, moviéndome de lejos sin estar atado a la general y buscando victorias de etapa".

Si la posibilidad de disputar una segunda gran vuelta está abierta para Bilbao en un Bahrain Victorious que piensa en aupar a Santiago Buitrago, Antonio Tiberi o su flamante fichaje Lenny Martinez al podio del Tour de Francia en el futuro inmediato, los Mundiales de Ruanda están prácticamente descartados en su mente. "No rindo bien cuando paso demasiado tiempo en altitud", explica, "y esa semana de viaje y adaptación creo que puede limitar bastante mi rendimiento".