Después de un año "difícil" de antibióticos y psicólogos, 'Juanpe' López vuelve al Giro
El sevillano ejercerá de jefe de filas de Lidl-Trek en la 'corsa rosa', carrera en la que se reveló para el gran público, tras vivir una temporada aciaga.
![Juan Pedro López, durante la 16ª etapa de la pasada edición de La Vuelta. /UNIPUBLIC / SPRINT CYCLING AGENCY](http://s1.sportstatics.com/relevo/www/multimedia/202403/18/media/cortadas/20240318_juanpe_20230912VUE02031-UNIPUBLIC_SPRINT_portada-RLZvgC8bUzECd4FXgq8aF8J-1200x648@Relevo.jpg)
Giulio Ciccone se alzó con el maillot de lunares de mejor escalador del pasado Tour de Francia a base de escapadas; fácilmente, media docena. En buena parte de ellas le acompañó Juan Pedro López (1997, Lebrija), siempre atento a los movimientos de su líder para respaldarle y tirar de él montaña arriba. Así lo hizo, día tras día, hasta que poco a poco fue a menos: de aguantar hasta el momento decisivo a descolgarse pronto; de estar en la fuga a no estarlo.
'Juanpe' llegó a París hecho una sombra, pero llegó. Fue una experiencia durísima; una más en un 2023 aciago, marrado por problemas físicos y psicológicos de los que no logró recuperarse hasta final de temporada para completar con dignidad La Vuelta. Esta temporada, en cambio, la ha descalzado con presteza y solvencia en sus primeros compromisos. Entre ceja y ceja, el regreso al Giro que le convirtió en una estrella hace dos campañas. El 'hype' provocado por aquellos diez días de la maglia rosa ya se ha calmado, pero su ambición está intacta. Antes de concentrarse en la gran ronda italiana, el sevillano atiende a Relevo desde su hogar en Andorra mientras se apresta para disputar la Volta a Catalunya en auxilio de su equipo.
¿Cómo llegas a esta Volta a Catalunya?
Bien. Empecé la temporada bastante pronto, con la gira de Australia y el UAE Tour, lo cual ha supuesto pasar bastantes días fuera de casa. Cuando regresé de los Emiratos, me tomé una semana de descanso con vistas a retomar los entrenamientos en casa y pasar tres semanas concentrado en el Teide para preparar el Tour de los Alpes y el Giro de Italia. No obstante, mis planes han cambiado porque varios compañeros de Lidl-Trek están enfermos o lesionados y el equipo me pidió que viniera a la Volta. No estoy a un gran nivel, pero trataré de ofrecer mi mejor versión antes de volver al calendario previsto de Teide, Alpes y Giro.
No estaba en los planes, pero el próximo lunes voy a estar en la salida de la @VoltaCatalunya 😍 Así que hoy tocó día de mochila y cantimplora en dirección a Port Ainé 😜
— Juanpe López (@juanpelopez97) March 13, 2024
📸 @Airan_Fernandez pic.twitter.com/Wf3bCVuoEb
Enfermo o lesionado pasaste buena parte de 2023.
Efectivamente, no fue una temporada buena para mí. Me rompí la clavícula nada más arrancar el año y, además, me había operado en octubre de sinusitis, una intervención que supone pasar un año siendo muy vulnerable a las infecciones. De ahí que estuviera casi siempre enfermo, y que en el Tour agarrara una bronquitis tan dañina. Si no me fallan las cuentas, en solo un año me tomé cinco ciclos de antibióticos, una medicación que a los deportistas nos deja hechos polvo. Hasta La Vuelta no pude remontar. Espero que este año sea muy diferente. Por lo pronto, pinta bonito e ilusionante.
También contrajiste miedo a la bicicleta. En otras entrevistas contaste que no te atrevías a soltarte de manos; que pasabas miedo rodando en el pelotón. ¿Cuánto tiempo duró? ¿Cómo te recuperaste?
Fue una época difícil. Mi fractura de clavícula se produjo en un descenso, entrenando, porque me tiró una ráfaga de viento. A raíz de eso le tomé mucho miedo a las bajadas y a ir en el pelotón. Empecé a trabajar con un psicólogo y con Óscar Saiz, un especialista en descensos que trabaja con Lidl-Trek, y poco a poco fui soltándome. Fue un bache pero, como para todo en la vida, hay que estar firme en los buenos momentos y en los malos. De hecho, siempre se aprende siempre más de lo malo que de lo bueno.
¿Qué aprendiste de estos problemas con los descensos?
Por un lado, corroboré que hoy día en el ciclismo son igual de importantes las bajadas que las subidas. Por otro, sucedió que cuando estaba entrenando aquí en Andorra mis compañeros de 'grupeta' me veían un poco, por así decirlo, 'amargado'… pero yo no le contaba a nadie lo que llevaba en la cabeza, ni lo que yo tenía ni lo que yo sentía. Hasta que un día me abrí con mi amigo Juanjo Lobato, y me ayudó mucho. Fue una de las grandes lecciones de este período: cuando sufres problemas como éste, es necesario compartirlo con alguien de confianza. Por mucho que estés en manos de psicólogos, también son necesarias las personas de tu entorno.
¿Cuánto tiempo estuviste en tratamiento psicológico?
Cuatro o cinco meses. Yo pienso que siempre es bueno trabajar con el psicólogo, en el día a día, y no sólo cuando estás mal. No obstante, tu principal psicólogo eres tú mismo.
¿Cómo fue la experiencia del Tour, más allá de la bronquitis?
Pude comprobar que el Tour de Francia es una carrera bastante bonita; que, a nivel mediático, es la número uno del mundo. Poder correrla es una suerte. Mi experiencia estuvo marcada por que la primera semana estuve con bronquitis y antibióticos, y cuando eso ocurre en una gran vuelta es muy difícil darle la vuelta al cuerpo. Me costó gestionarlo.
2022 fue una temporada de terremoto, con la explosión de popularidad a raíz de los diez días vistiendo la 'maglia rosa' en el Giro de Italia. El invierno pasado había una entrevista tuya en la prensa cada dos o tres días; en éste has sido menos solicitado. ¿Lo has notado?
Sí que he notado menos 'meneo'. Pero vamos: que uno se adapta a todo. Quienes me conocéis sabéis que nunca digo 'no' a una petición; que siempre intento estar presente, y hasta día de hoy es así. Sí que recuerdo que, tras el Giro, la presión a nivel mediático y psicológico fue una pasada. Que si el teléfono, que si las televisiones, que si los periodistas… Todo eso hay que saberlo llevar.
¿Se agradece la tranquilidad?
Sí y no. Hablar no me pesa; el músculo de la lengua lo tengo bien entrenado… [ríe]
![Juan Pedro López no vivió un mes brillante en el pasado Tour de Francia. ASO / CHARLY LÓPEZ](http://s3.sportstatics.com/relevo/www/multimedia/202403/18/media/cortadas/20240318_juanpe_20230711TDF1010-aso-charly-saludo-tour-U77613753336JNf-624x385@Relevo.jpg?cw=780&ch=481)
Antes hablábamos de cambios de planes. Lidl-Trek ha perdido por lesión a su líder para el Giro de Italia, Giulio Ciccone. ¿Cómo será tu Giro sin él?
Ya en pretemporada estuve hablando tú a tú con Ciccone. Él quería que yo estuviera a su lado en el Giro para ayudarle a disputar la general respaldándole en los momentos clave. Que él no pueda estar en la salida probablemente significa que yo dispondré de más oportunidades a título individual. Yo, en cualquier caso, estoy seguro de que llegaré con motivación y ganas de darlo todo.
En tu último Giro acabaste 10º de la general, con un gran protagonismo, y fuiste 2º en el final en alto del Etna, sólo superado por Lennard Kämna. ¿Cuál será tu lugar en el próximo Giro?
Si lo tengo que soñar, mi lugar será el mismo que en 2022. No obstante, mi objetivo principal es quitarme la espina de conseguir una victoria de etapa. A partir de ahí, lo que venga… bienvenido será.
Contrarreloj del UAE Tour superada sin contratiempos 🇦🇪👌🏼 A por el primer final en alto mañana 💪🏼
— Juanpe López (@juanpelopez97) February 20, 2024
📸 @GettySport pic.twitter.com/WUHnLwbbPe
El máximo responsable deportivo de Lidl-Trek, Luca Guercilena, declaró hace dos años en VeloNews que con el tiempo serías capaz de subir al podio de una gran vuelta. ¿Tú lo ves factible?
¿Por qué no? Todos los años intento mejorar en todos los aspectos: la nutrición, el descanso… y mi punto débil, que por mi peso y mi estatura es la contrarreloj. De la mano de los técnicos del equipo trabajo en la aerodinámica, y echo muchas horas en la 'cabra'. Subir al podio de una grande es un sueño. Sé que es difícil, pero todos los corredores estamos aquí para triunfar; incluso el más gregario. Si no tuviéramos instinto de ganador, no seríamos ciclistas…