El equipo de Pogačar no esconde la debilidad de Ayuso: "Tuvo un mal momento..."

Confesaba Juan Ayuso hace menos de un año en Relevo que todavía no se sentía preparado para comer en la mesa de los Pogačar, Vingegaard y compañía. Desde entonces, el ciclista alicantino, aún de 21 años —serán 22 en septiembre—, se ha empeñado en trabajar a destajo para recortar la distancia con los mejores.

No le ha ido mal, todo sea dicho. Tras abrir la temporada a medio gas en la clásica de Jaén, Ayuso ganó la Faun-Ardèche, en Francia, hizo podio en otras dos clásicas de manera consecutiva, fue segundo en la Tirreno-Adriático, solo por detrás de Vingegaard, ganó la Vuelta al País Vasco —sí, tras las caídas del astro danés, Roglic y Evenepoel, pero ganador al fin y al cabo— y terminó quinto un Tour de Romandía en el que llegó a vestirse de líder.

Sin embargo, el comienzo del Tour, su primer Tour, ese por el que tanto ha peleado con los responsables de diseñar el calendario del UAE Team Emirates, parece haber devuelto al alicantino a la realidad de la que quería escapar hace solo unos meses.

En la durísima primera etapa de la ronda francesa, y todavía con un último puerto por delante, Ayuso sufrió un apagón físico a falta de 38 kilómetros de meta, justo cuando el pelotón ascendía a la cima de Montemaggio, algo que no pasó desapercibido para nadie.

"Sí, tuvo un momento realmente complicado durante la etapa de ayer", ha reconocido este domingo en Eurosport, durante la previa de la segunda jornada, Joxean Fernández 'Matxín', director del conjunto emiratí. "Por suerte fue solo un momento, pero lo pasó mal y cayó a la parte trasera del grupo. Fue un momento difícil".

Desde el propio coche de carrera, el equipo instó a Ayuso para reconectar con la parte delantera del pelotón. "Juan, vuelve con tus compañeros, vuelve con tu equipo, vuelve con el equipo", advirtieron por radio, algo que, por suerte para el alicantino, sucedió poco después.

Menos de 24 horas después, y tras finalizar la primera jornada con el grupo de favoritos —en 37ª posición—, Ayuso parece estar recuperado de su crisis. Tal es así que en la salida neutralizada de Cesenatico, lugar de nacimiento de Marco Pantani y punto de partida de la segunda etapa del Tour de Francia, el alicantino se ha mostrado sonriente, charlando con el sudafricano Ryan Gibbons, del Lidl-Trek, y luciendo su dorsal 13 del revés en la parte trasera del maillot. Un despiste seguramente sin importancia.