TOUR DE FRANCIA

El gesto de Carlos Rodríguez con el que alucinan en el Ineos: "Dice mucho de su espíritu de equipo"

El director deportivo principal del conjunto británico, Steve Cummings, comparte con Relevo sus impresiones en torno a la calidad de su pupilo granadino.

Carlos Rodríguez, junto a Tadej Pogačar y Jonas Vingegaard en el Tour de Francia 2023. /EFE / ETIENNE GARNIER
Carlos Rodríguez, junto a Tadej Pogačar y Jonas Vingegaard en el Tour de Francia 2023. EFE / ETIENNE GARNIER
Fran Reyes

Fran Reyes

Hormiguean los alrededores del ibis Styles de Sallanches donde se hospeda Ineos Grenadiers durante la segunda jornada de descanso del Tour de Francia. Periodistas, técnicos, curiosos; y, por supuesto, ciclistas. Todos hablan, todos se mueven: cada uno en su película. Por su parte, Steve Cummings (1981, Clatterbridge), el director deportivo principal de Ineos Grenadiers en esta Grande Boucle, uno que cuando era ciclista definían como "artista", está simplemente sentado sobre una nevera de viaje. Tranquilo. Observando tras sus gafas de sol cómo su pupilo Carlos Rodríguez atiende a una treintena de medios de comunicación.

Cummings es uno de los muchos técnicos de Ineos Grenadiers que trabaja a diario con la joven promesa granadina en un staff donde figuran una decena de españoles como el también director Xabier Zandio o los preparadores físicos Xabier Artetxe y Adrián López, amén de varios masajistas y mecánicos. "Es excepcional", responde a Relevo cuando le preguntamos qué le parece el papel de Rodríguez en este Tour de Francia, donde es tercero a falta de una semana para el final. "La carrera es ya un éxito para él y para el equipo, en muchos aspectos. Éste es su primer Tour y sólo necesita seguir haciendo las cosas bien, seguir centrado en lo más básico, y ver hasta dónde le lleva. Hasta ahora lo está haciendo todo fenomenal".

El ciclismo, como todo el deporte profesional, está evolucionando hacia un paradigma de perfección en el cual el nivel deportivo de los mejores está muy igualado. En ese contexto, ¿cuál es la ventaja competitiva de Carlos Rodríguez respecto a los demás? "Que su rendimiento varía muy poco", responde Cummings sin dudar. "Es un tío muy sólido y estable, tanto a nivel físico como psicológico. Tiene los pies en el suelo; es tranquilo y muy humilde. Y sin embargo es también inteligente, y un auténtico 'killer' sobre la bicicleta. Sabe reconocer sus sensaciones para no pasarse de rosca, y sabe qué puede pedir a sus compañeros".

"Si revisas cómo ha sido su preparación para este Tour, verás que está muy lejos de haber sido la ideal", continúa, reflexionando sobre el margen de progresión de su pupilo. "Se rompió la clavícula en Strade Bianche y se perdió prácticamente toda la primavera. Y, sin embargo, cuando volvió en el Dauphiné estuvo ya a buen nivel. Sospecho que, por su estabilidad y regularidad, va a seguir mejorando año a año".

Para Cummings, poder trabajar con los jóvenes de Ineos Grenadiers es "auténtico privilegio"; algo más que un trabajo. "Además, a lo largo de los años acabas desarrollando una relación personal. En el caso particular de Carlos, nuestro desarrollo ha ido de la mano: los dos hemos crecido juntos hasta llegar a este momento de responsabilidad en este Tour de Francia. En estos días me acuerdo de aquellas primeras carreras juntos, como la Route d'Occitanie o la Ruta del Sol. Compartir el viaje y la progresión es genial".

Llega el momento de marcharse a revisar la contrarreloj que este martes definirá lo que resta de Grande Boucle. Pedimos a Cummings un detalle de este Tour que revele quién es Carlos Rodríguez. Vacila medio segundo. "Lo que pasó en el Col de Ramaz. Tom [Pidcock] estaba teniendo un mal día y le costaba seguir el ritmo del grupo del maillot amarillo. Cuando estaba a punto de quedarse, Carlos se puso a hablar por la radio para animarle. Dice mucho sobre su espíritu de equipo". Este lunes, Pidcock se comprometió a "darlo todo" por él: "No tengo mucha experiencia tirando para otros ciclistas, ni acarreando bidones. Pero lo haré lo mejor que sepa". Sin duda, el sexitano se hace querer.