Chente García Acosta: "Enric Mas ya nos ha pedido un rodillo para darle a la bici en Mallorca"

"Lo primero que nos ha dicho Enric es que tenemos que buscar una bici de rodillo para llevársela a Mallorca", confiesa entre risas Chente García Acosta, dirigente y alma del conjunto telefónico. "Sin duda, es buena señal". No es para menos tras la caída y posterior abandono de este sábado, en la primera etapa del Tour de Francia.

Es difícil estar animado ante una situación así, claro. Más teniendo en cuenta que, con el de ayer, el balear, que ya viaja a Mallorca con su familia, encadena su segundo abandono consecutivo en la ronda francesa. "Hombre, anímicamente no está al 100%, está claro", reconoce Chente, encargado de llevar los mandos en la reunión previa a cada etapa. "Tenemos que echarle una mano entre todos, pero esto sigue, el ciclismo es así".

El objetivo de Mas, ahora, es estar listo para La Vuelta a España que comienza en Barcelona el próximo 26 de agosto, dentro de algo menos de dos meses. "Vamos a ver cómo va soldando el hueso, tiempo hay de sobra [para llegar a La Vuelta]. Se ha visto que no tiene desplazamiento, pero ya sabemos que para recuperar un hueso como el omóplato hace falta tiempo y estar muy quieto", zanja el dirigente telefónico.

"Está desanimado, como es normal". Quien habla es Alex Aranburu, hombre para todo de Movistar y compañero de Enric Mas, a quien se refiere tras el abandono de este sábado con visible desánimo. "Nos hemos quedado sin líder, así que nos quedamos sin el objetivo de la clasificación general, pero el otro sigue en pie, así que a partir de ahora iremos a por etapas".

Lo afirma uno de los ciclistas señalados para intentar este domingo, entre Vitoria y San Sebastián, la etapa más larga del Tour (209 kilómetros), brindar una victoria que haría las veces de homenaje para el corredor balear, caído en batalla a las primeras de cambio. "Lo intentaremos, claro. A ver cómo salimos, si llega la fuga o no. Tenemos un equipo muy completo y con potencial para todo".

Mas, líder del Movistar, se ha acercado este domingo al camión del equipo telefónico, en Vitoria, para animar a sus compañeros tras pasar una noche complicada, en lo físico y en lo anímico, en el hospital de Cruces, a las afueras de Bilbao. "Le dolía bastante, pero dentro de lo malo será recuperar y listo. Da mucha pena porque se va todo el trabajo hecho en el primer día del Tour", asegura Aranburu.