Pogacar brinda el primer gran duelo con Vingegaard en Bolonia y es líder del Tour 718 días después

Arrancaba la contienda en Cesenatico, tierra del añorado Marco Pantani, y Tadej Pogacar cruzaba dardos con Tom Pidcock en los micrófonos de Eurosport. "Ha dicho que ayer te esperaba mejor", le comentan al esloveno. "¿Sí? Pues si ha dicho eso, yo le esperaba mejor en el sprint final [donde Pogacar fue segundo, solo por detrás de Van Aert]". Todo, como siempre, se resuelve y se cierra con risas. No vaya a ser.

Menos humor debía respirarse pocas horas después en el autocar del Visma-Lease a Bike, que vio cómo Wout van Aert despertaba viejos fantasmas tras irse al suelo en una acción desafortunada junto a Matteo Jorgenson y Laurent De Plus.

Salvada la papeleta, llegó el plato fuerte del día, la doble ascensión a San Luca, ya en Bolonia capital. La primera, aún con mucho terreno por delante, se resolvió con los favoritos inquietos pero tranquilos. La segunda, en cambio, desencadenó el primer gran duelo del Tour de Francia.

Con la fuga asegurada por delante, más si cabe para Kévin Vauquelin, que dejó atrás a sus compañeros de escapada a poco de coronar y voló en solitario hasta el triunfo final, Pogacar atacó con una violencia desmesurada y solo Vingegaard fue capaz de seguirle la rueda.

Atrás quedaron, rezagados, Geraint Thomas, Tom Pidcock, Egan Bernal, el líder, Romain Bardet, y Carlos Rodríguez. Poco después, siguieron su paso Juan Ayuso y Primoz Roglic. Solo Remco Evenepoel y Richard Carapaz pudieron aguantar el chaparrón y, descenso mediante, consiguieron cerrar el hueco para entrar a meta con las dos bestias del Tour.

Así con todo, Pogacar es nuevo líder del Tour de Francia y se viste con el maillot amarillo por primera vez desde el 12 de junio de 2022, hace 718 días. Vingegaard, Evenepoel y Carapaz le siguen en la clasificación general con el mismo tiempo.