Australia no despeja las dudas de Fernando Alonso y Aston Martin... pero deja pistas
La lluvia impidió extraer datos de valor de la primera carrera del año. Lance Stroll, sexto en Melbourne, arroja esperanza sobre el equipo británico.

El Gran Premio de Australia ha sido entre poco y nada provechoso para sacar conclusiones. A los valientes que se pusieron un despertador a las 4:55 horas para ver la carrera, desde luego, les valió la pena el madrugón desde el momento en el que Isack Hadjar estrelló su Racing Bulls contra el muro en el calentamiento. Albert Park tendrá un grato recuerdo para el fan estándar, que ya cataloga la prueba inaugural como candidata a una de las mejores del año. Para los que pretendían estrenar libreto y sacar la bola de cristal de cara a las próximas carreras, sin embargo, fue un verdadero chasco, porque el termómetro finalmente tendrá que ser China este próximo fin de semana.
Sí hay leves pistas sobre lo que se verá de ahora en adelante. En seco, McLaren es imbatible, sin duda. El campeón de 2024 mantiene la supremacía con un coche que parece todavía más perfecto que el que cerró el telón en Abu Dhabi. El segundo mejor equipo probablemente sea Mercedes, que le ha comido la tostada a una Scuderia Ferrari que se aplicó aquello de "mucho ladrar y poco morder". Desastre para los italianos, que no fueron rápidos en ninguna circunstancia meteorológica y tienen la tarea de acostumbrar a un Lewis Hamilton que dio sus primeros problemas.
Williams y Carlos Sainz pueden sorprender. De hecho, desde McLaren insisten colocarlo en la terna para dar sorpresas a lo largo del 2025. "Quizás haya que ajustar el Top 4", avisaba Andrea Stella allá por febrero, una sensación que el español y Alex Albon han dejado esparcida en el aire. Sobre Max Verstappen poco más se puede decir. Sería inevitable incluso conduciendo un Kick Sauber. Opositó hasta el final por una victoria manejando un monoplaza que es una duda absoluta de en qué posición de la parrilla sería lógico ubicarlo. Muy arriba, no.
Quien también tiene horas de estudio por delante es Aston Martin, la gran interrogación. Sería exagerado afirmar que no han podido aprender nada, pero están más cerca de ella que de un informe de datos en condiciones. La clasificación sirvió para saber lo de siempre: Lance Stroll marca la normalidad y Fernando Alonso abre la posibilidad a rascar puntos que, en condiciones óptimas, no se cosecharían.
An unfortunate moment for Fernando Alonso, crashing out of the Grand Prix 😱#F1 #AusGP pic.twitter.com/Jt6dtSZInl
— Formula 1 (@F1) March 16, 2025
Es repetitivo afirmarlo, pero Australia confirmó que un porcentaje de su gafe sí afecta a Alonso. Un error en la crono del sábado que dañó su suelo, una montaña de piedras que le hicieron abandonar... Eso sí, hasta que besó el muro del circuito semiurbano de Albert Park volaba respecto a su compañero, que casualmente terminó sexto.
Los 8 puntos que se apuntó el canadiense siguen siendo poco 'reales'. La lluvia y los accidentes compactaron en varias ocasiones a la parrilla, desordenándola gracias al juego estratégico de las paradas y a la escasa posibilidad de adelantar en una pista que ya de por sí no ofrece demasiados huecos. Sin embargo, que Aston Martin ha escondido ritmo es evidente. En Baréin llegó a ser considerado el primer o segundo equipo por la cola. En Melbourne, nada más lejos de la realidad. Sus pilotos fueron 12º y 13º, a escasas décimas de asaltar la Q3.
Kept it clean from start to finish. 👏
— Aston Martin Aramco F1 Team (@AstonMartinF1) March 17, 2025
A calm and consistent drive from @lance_stroll brought home P6 to kick off the season despite tricky conditions.pic.twitter.com/1X95aR6J60
Pronosticar qué lugar hubiese ocupado Fernando Alonso de ver la bandera a cuadros es difícil o casi imposible. Justo cuando abandonó la carrera fue cuando más interesante se puso y más movimientos tuvieron lugar. Y en el caos es de los que menos se ablandan. Sin embargo, contaba con un ritmo solamente superado por Piastri, Norris y Verstappen, quien ya se sabe que ruedan con una marcha distinta, y ya escalaba puestos en busca de multiplicar unos puntos que ya tenía en su bolsillo. Sin datos referenciales, Aston Martin se aferra al esperanzador sexto lugar de Stroll y viaja a Shanghái con sed de reivindicación.
Nuevo cuento en China
Para los que sí hayan podido hacerse una idea de en qué posición está su equipo, aún así, puede haber giros drásticos. Aunque la lluvia fue protagonista del gran premio y afectó claramente al resultado, las situaciones de seco dejaron ver ritmos reales que se verán afectados en China, ya que la FIA ha endurecido su control con el arma secreta de los equipos punteros: el mini-DRS.
Mercedes (+24km/h), McLaren, Red Bull (ambos +23 km/h) y Ferrari (+22km/h) eran los equipos más beneficiados por esta herramienta desde el año pasado. A mediados de 2024, el equipo papaya se sacó de la manga un alerón trasero flexible que se abría hasta 2 milímetros en rectas en las que no estaba permitido el DRS con el fin de aumentar la velocidad. La FIA, a la que no le gusta este 'vacío legal', ha decidido modificar los artículos pertinentes y en China esta ranura solo podrá abrirse 0,5 milímetros. Esta rectificación hace que los equipos tengan que borrar todo lo registrado hasta ahora y Shanghái sea como la verdadera primera fecha del Mundial.