Caramelo envenenado para Yuki Tsunoda en Red Bull y humillante descenso para Liam Lawson tras solo dos carreras
El japonés logra su ansiado ascenso para pilotar junto a Max Verstappen y se estrenará ante su afición en Suzuka.

Primer anuncio relevante en el paddock de Fórmula 1 en 2025. Si se habla de un movimiento en la parrilla, las probabilidades de que Red Bull esté involucrado son muy elevadas. Que Yuki Tsunoda haya logrado el ansiado ascenso que lleva toda su vida esperando y que Liam Lawson haya sido degradado al equipo filial tiene mucha letra pequeña.
El equipo de las bebidas energéticas ha anunciado ese intercambio (swap es como se conoce en Fórmula 1) entre sus pilotos que llevaba días siendo un secreto a voces. Concretamente, desde que terminó el Gran Premio de China el domingo. Durante la semana, se han incrementado hasta el comuniciado de Red Bull, que solo ha dado dos carreras a Liam Lawson porque cree que ya ha visto suficiente: decimoctavo en parrilla y abandono en Australia y último en parrilla en China.
Announcing that @yukitsunoda07 will partner Max from the #JapaneseGP 🇯🇵 pic.twitter.com/Pz05P7cFKF
— Oracle Red Bull Racing (@redbullracing) March 27, 2025
La reunión mantenida durante esta semana por los mandamases de Red Bull Helmut Marko y Christian Horner para examinar los datos del neozelandés le ha condenado. Entienden que no tiene margen de mejora y deciden bajarlo al equipo filial, Racing Bulls, en una antesala de su más que probable salida de la estructura. Una situación similar a la que vivieron Alex Albon o Pierre Gasly.
El propio Lawson intuía la que le venía encima. Tras cada sesión este año, comparecía como podía ante los medios: "Me falta tiempo con este coche pero sé que no tengo mucho". El neozelandés pilotará ahora junto a Isack Hadjar en la escudería con la que debutó en el Gran Circo: se lució con ellos, subió a Red Bull, no ha funcionado y, ahora, vuelve a bajar. Pensar en otro ascenso es remoto e imposible mientras Tsunoda olía sangre hace unos días: "¿Subirme al coche en Japón? Claro, es más rápido...".
Arma de doble filo para Tsunoda
La clave de la trama la arrojó el tetracampeón Max Verstappen con su "creo que Lawson iría más rápido en el otro coche". No es que el Red Bull sea más lento que el coche B. Simplemente, es un monoplaza más inestable y nervioso que solo parece capaz de ser domado por Verstappen. Esa bestia indomable hundió a Checo Pérez, ahora a Lawson en solo dos semanas y el próximo podría ser Tsunoda.
El movimiento soñado que lleva toda la vida esperando el nipón podría ser un caramelo envenenado y su carrera podría comprometerse si no rinde en el Red Bull. Ese monoplaza podría hundirle. El japonés, eso sí, vivirá una semana soñada cuando debute en el Gran Premio de Japón, ante su afición. Tsunoda nunca olvidará esa carrera en Suzuka en la que pilotó juntó a Verstappen.