F1 | GP MÓNACO

Carlos Sainz presume de juego en equipo y hace piña: "Vamos cada vez más y más fuertes"

El piloto de Ferrari se limitó a alegrarse por su compañero Charles Leclerc, ganador del GP de Mónaco, y augurar próximos buenos resultados.

Carlos Sainz felicita a Charles Leclerc. /REUTERS
Carlos Sainz felicita a Charles Leclerc. REUTERS
Daniel Knecht Escobar

Daniel Knecht Escobar

En Ferrari, por mucho que Carlos Sainz se haya embolsado su 22º podio en Fórmula 1 en un circuito en el que ser uno de los tres mejores cuesta sudor y lágrimas, el tema del día es Charles Leclerc y su primera victoria en casa tras muchas decepciones y rupturas de corazón. Su propio compañero agacha la cabeza y le aplaude sabiendo que hoy los focos deben apuntar al monegasco: "Estoy muy contento de ver ganar a Charles, por cómo ha conducido todo el fin de semana, se lo merece".

A pesar de ello, la labor del madrileño es titánica. Aguantó durante toda la carrera a Lando Norris y sus envites, y sólo fue frenado por un mal sábado. "Ya sabíamos desde el viernes que mi ritmo de carrera no ha sido el problema". Lo mismo aseguró ayer tras marcar el tercer mejor tiempo de la sesión clasificatoria, y así se reafirmó tras las 78 eternas vueltas al Circuit de Monaco.

"Incómodo" y con "dos vueltas decentes" le fue suficiente para salir en segunda línea el domingo, pero ya es sabido que en Mónaco no es precisamente sencillo ganar posiciones en pista. De hecho, para él, "imposible". Lo decía con pena, ya que tras la resalida se veía fuerte, ya que "desde el principio el ritmo era bueno", pero no encontró el hueco necesario para, siquiera intentarlo.

Lo que sí pudo hacer fue asomar el morro: "Sabía que Lando (Norris) no iba a parar, así que me he centrado en hacer buenas vueltas y provocar el error de Oscar (Piastri), en presionarle". Y, después de todo, la nota positiva del fin de semana en Mónaco se centra en una buena actuación colectiva. "Al final, un primer y tercer puesto de cara al campeonato de constructores son muy buenos para el equipo. Parece que vamos cada vez más fuertes" .

Mónaco e Imola, un "toque de atención grande"

"Mala suerte". Ese es el sumario de Fernando Alonso sobre todo lo ocurrido en Mónaco. Ya no solo por el tráfico sufrido ayer, sino por una temprana bandera roja que echó por tierra todos los planes de Aston Martin en la carrera: "Intentamos todo lo que teníamos en nuestra mano para sumar algún punto, pero era difícil. Un fin de semana en el que tuvimos otra vez mala suerte".

"Cuando sales con duros y quieres ir muy tarde en la parada, sale una bandera roja y tienes que poner unos medios es un suicidio. Después del incidente también tuvimos mala suerte porque Lance (Stroll) estaba décimo, ya con un punto, pero reposicionaron a todos los coches". Y no es que hayan perdido gran cosa, porque el monoplaza en Montecarlo no daba para muchos más: "No digo que hayamos perdido una oportunidad de oro hoy, el coche no daba para puntos".  

Canaliza toda esa mala suerte y trata de sacar el lado positivo de un segundo fin de semana consecutivo sumando un desastre. Al igual que Ímola, Mónaco ha supuesto un reconocimiento propio para Alonso, 15 días "cruciales": "Para entender nuestras debilidades, para entender el coche, para mejorar... En las dificultades siempre sacas más conclusiones que en las victorias, que pasan por encima todos los problemas, con la euforia. Estamos aprendiendo mucho de cara a lo que queda de año, de 2025 y 2026. Han sido un toque de atención grande".