Carlos Sainz recuerda el año más difícil de su vida: "Me hizo cambiar mucho como persona"
El piloto español de Ferrari muestra su cara menos conocida para Relevo durante el GP de Países Bajos de F1.
Zandvoort (Países Bajos).- Han pasado 10 años desde que pisó por primera vez el paddock de la Fórmula 1 como piloto de una de sus categorías soporte. Ya no es el mismo. O no del todo. La amplitud de su sonrisa se ha comedido, quizás por el complejo mundo del Gran Circo y los sinsabores que le ha tocado vivir en todo este tiempo dentro y fuera de la pista. Aun así, cuando Carlos Sainz (Madrid, 1994) deja entrever qué hay detrás de la máscara de piloto -complemento indispensable en la élite del automovilismo- aparece una persona que no vive ajena al mundo que le rodea, que es capaz de mantener los pies en el suelo y a la que le gustaría sonreír un poco más.
Verle vestido de Ferrari no puede darse por obvio, pese a que disputa su tercera temporada de rojo y que ya sabe lo que es subirse al podio, conseguir una pole y ganar con estos colores. Tan solo tres españoles han podido formar parte de la legendaria historia de la escudería italiana en la F1, la más laureada de todos los tiempos. Él es uno de ellos. Y solo dos han logrado subirse a lo más alto del podio: Fernando Alonso y él mismo, en Silverstone, hace poco más de 12 meses.
Sainz reconoce la responsabilidad, la presión y la atención mediática que eso implica, sobre todo en Italia, donde el equipo de Maranello es un auténtico combinado nacional. Su mirada no se desvía de la de su interlocutor más que para beber dos sorbitos a un vaso de agua procedente de una lata que acaba de abrir. Y antes de darle al play, se interesa por el nuevo proyecto de Relevo, por su público y por su devenir. Así es Carlos Sainz, el hijo de campeón que sigue levantándose cada día con un único motor de impulso en la cabeza: ser campeón del mundo de F1.
La primera vez que te entrevisté estabas empezando tu temporada en GP3 en el Circuit de Barcelona-Catalunya. Han pasado ya 10 años, ¿cuánto has cambiado a nivel personal y profesional desde entonces?
Pues mira, bastante, sobre todo desde esa fecha. Porque recuerdo que ese fue el año más duro de mi carrera deportiva. Después de esa entrevista tuve una temporada bastante dura y me hizo cambiar mucho como persona, como atleta, como deportista, como piloto y a partir de ahí di un cambio muy grande a nivel físico y mental. Después gané las World Series y eso me permitió llegar a la F1. Pero fue gracias a ese año 2013 que me di cuenta de que tenía que modificar algunas cosas que me hicieron cambiar mucho. Así que mira, coinciden esos 10 años.
¿Qué fueron esas cosas?
Bueno… me convertí en una persona mucho más disciplinada, me quité, digamos, preocupaciones de la cabeza y me centré en darlo todo por llegar a la F1 y ponerme en la mejor posición posible para ello. Dediqué toda mi vida y mi esfuerzo en ello y coincidió que lo hice y al año siguiente fui campeón en las World Series y pude llegar a la F1. Esto me demostró que el trabajo y las cosas bien hechas siempre tienen su recompensa. Fue una buena lección de vida también.
No sé si aún queda algo de ese Carlos que hemos visto en algún vídeo trompeando con un correpasillos de pequeño, ¿o los sinsabores, los triunfos y la propia F1 te han cambiado?
No, yo creo que queda mucho todavía. Lo único que pasa es que vosotros me veis en un ambiente de mucha presión; un ambiente muy serio, de trabajo. Entonces, ese Carlos más niño, más tonto, más gamberro, solo lo puede ver la gente que realmente me conoce y en ambientes más relajados y mucho más familiares. Es una pena igual el no mostrar ese lado, pero es cierto que en los circuitos no te da para ello.
"El Carlos más niño, más gamberro, solo lo puede ver la gente que realmente me conoce y en ambientes más familiares"
Piloto de Ferrari en F1¿Y con todo lo que has vivido, qué le dirías a tu yo de 10 años si lo tuvieras aquí delante?
En esa época ni siquiera sabía si iba a querer ser piloto, o si iba a ser otra cosa. No sabía de qué iba la vida prácticamente. Sobre todo le diría que disfrutase del camino, porque tendrá momentos duros, pero también otros muy divertidos; momentos de poder tener la suerte de hacer lo que más le gusta y, sobre todo, siempre le diría que recordase la suerte que llegará a tener de poder dedicarse a su pasión, que es la F1 ahora mismo.
¿Cómo es la vida de un piloto de Ferrari detrás de las cámaras?
Primero, antes de llegar a ser piloto Ferrari, hay mucho esfuerzo y mucho sacrificio y obviamente cosas bien hechas para que te fiche una escudería como esta. Pero luego, una vez lo eres, es una vida que a mí sinceramente me gusta mucho. Estoy viviendo en Italia, estoy dedicando todo mi tiempo a Ferrari, a darlo todo por esta escudería. Pero sí que es verdad que todo cambia mucho, porque no solo corres para un equipo de F1, lo haces para un país entero. Estás como en la selección italiana. Toda Italia apoya a Ferrari, quiere verles ganar. Toda la prensa está apoyando a Ferrari. No es como un club, es una nacionalidad, prácticamente. Eso sí que es verdad que hace que haya muchísima más atención mediática, muchísima más atención de los tifosi, más presión, más detalle de todo lo que pasa aquí, que hasta que no estás dentro y lo vives, no te das cuenta. Yo lo he podido vivir estos dos o tres años, lo he podido disfrutar, porque también luego tiene cosas como correr en Monza o Imola, que es algo que nunca olvidas, e intento darlo por ello.
Es precisamente esto lo más complicado, ¿el hecho de que sea más que un equipo?
(Duda) Hay que saber gestionarlo. No es ni complicado, ni… si lo quieres ver complicado, lo ves complicado, pero la realidad es que es lo que es y tienes que aprender a gestionarlo. Se aprende también con experiencia y con el paso de los meses, de las carreras, de los años, sabes cómo gestionarlo mejor. He aprendido muchísimo estos tres años y ahora estoy en un momento bueno, estoy cómodo, estoy feliz aquí.
Ningún español ha ganado el Mundial con Ferrari nunca, ¿tú sueñas aún con ello?
Sí, mi objetivo siempre ha sido ganar un Mundial y, obviamente, ahora que estoy en Ferrari, pues más todavía. Estoy en el mejor sitio que he estado hasta el momento para intentar conseguirlo. Sí que es verdad que desde fuera puede parecer que estamos lejos, porque la verdad es que el campeonato no está siendo posible estos últimos meses y años. Pero creo que trabajando bien, sabiendo las cosas que hay que cambiar y mejorar, yo también seguir progresando como piloto, creo que podemos ponernos en la posición de intentarlo. Luego ya, si lo consigues o no, es otra cosa, pero por lo menos ponerte en la posición de luchar por el campeonato es lo que más me motiva.
"En Ferrari no corres para una escudería, lo haces para un país entero y hasta que no lo vives, no te das cuenta"
Piloto de Ferrari en F1Vivimos en una época en la que parece que en redes sociales hay que ser el más guay, el más gracioso, el que más cosas hace. No sé si esto te ha hecho cambiar cómo te muestras a ti mismo, cómo te comportas y qué enseñas.
Tiene doble cara, porque por un lado el mundo pide contenido ahora. Todo el mundo quiere saber más de ti, de tu vida personal y familiar. Es lo que más curiosidad le despierta a la gente, porque fotos en Ferrari vestido de rojo las ven en todo momento. Es lo que más gusta, pero por otro lado, para mí siempre ha sido lo más privado y lo más reservado posible, lo que intento proteger el máximo posible porque confío en que esa es la manera de hacer las cosas. Luego, siempre hay una doble vara de medir. Siempre te encuentras con gente que te apoya y hay alguno que cada cosa que subas va a criticarla o le va a sacar un pero, o una crítica. Desgraciadamente, este es el mundo en el que vivimos ahora. Por eso intento encontrar un punto intermedio que hasta ahora no me ha ido mal y que intentaré adaptar con el paso de los años, pero seguir midiendo.
¿Se puede vivir con los pies en el suelo siendo piloto de F1?
Sí, perfectamente. Sobre todo si te rodeas de la gente adecuada, que saben calmarte, o manejar las situaciones. Luego, si tienes principios, y sabes lo que realmente es importante en esta vida, no como la fama, o la atención mediática que tenemos, sino realmente centrarte en lo importante, que son los valores, la familia, los amigos, la gente que te llena… creo que se puede perfectamente, en eso no tengo ninguna duda.
¿Quién es Carlos Sainz fuera de la F1?
Creo que soy mucho más… antes usaba la palabra tonto. Hago muchas más tonterías de lo que parece. Soy como bastante más infantil que la cara más madura o seria que se ve aquí en la F1. Creo que además es prueba de ello la época con Lando [Norris] en McLaren, la cantidad de tonterías que hacíamos y cómo nos lo pasábamos. Quizás esa es la versión más casera mía, ¿no? Es algo que de vez en cuando en algún vídeo de YouTube o Instagram intento mostrar más para que la gente no me vea solo serio y concentrado, sino también ese lado un poco más infantil, más de hacer tonterías que siempre he tenido.
Este año, Fernando Alonso ha generado una ola de ilusión al volver de nuevo a pelear por podios, ¿cómo lo gestionas tú, te abstraes o intentas tratar de generar tu propia ilusión?
No, sinceramente es que es mejor para mí. Cuanta más atención haya en la F1 en España y en Fernando, mejor para mí. Lo que pasa es que desgraciadamente esa ola de Fernando yendo mejor con Aston Martin ha coincidido con un pequeño bajón a principio de año de Ferrari. Yo no podía tampoco destacar mucho en carrera, ni hacer grandes cosas porque la verdad es que cada carrera que hacíamos, nos íbamos un poco para detrás y era algo frustrante. Entiendo perfectamente la atención que han podido generar los podios de Fernando a principio de temporada, su lucha por volver a estar ahí arriba, incluso a poder pelear por carreras. Pero me da rabia que haya coincidido con ese bajón de rendimiento de Ferrari, porque si hubiese estado ahí con él en los podios, peleándole esos podios y esas carreras, hubiese sido mejor para los dos también.
Si tuvieses que explicarle a alguien que nunca ha oído hablar de ti, ni de la F1, quién eres, ¿cómo lo harías?
¡Qué complicada! Pues Carlos Sainz es un chaval de Madrid, de 29 años, que lleva nueve años en la F1. Ha pasado por cuatro equipos, ha aprendido sus cosas... Obviamente, tuvo que luchar mucho para llegar a la F1. Hay que tener en cuenta que aquí llega un piloto cada año o cada dos años y que ser uno de esos que llega quiere decir que tienes que haber hecho las cosas bien y tener ese puntito de suerte. Y eso es cumplir un sueño. Pilotos de F1 solo hay 20, pilotos de Ferrari solo hay dos y ahora mismo es uno de ellos y está disfrutando al máximo posible el momento, la vida y la suerte que tiene de hacer lo que más le gusta.