Carlos Sainz ya tiene su victoria soñada con Ferrari; el homenaje a Fernando Alonso termina en drama

En la Fórmula 1 hay héroes, villanos y, en ocasiones, historias de cuento de hadas. El idilio entre Carlos Sainz y Ferrari se saldará sin un Mundial de Pilotos pero será recordado como un cuatrienio mágico. El madrileño llegó con perfil bajo a Maranello en 2021 y se irá en diciembre por la puerta grande. En México volvió a demostrar con una victoria de renombre, su cuarta vestido de rojo, y la clase de piloto que se pierde Ferrari.

Sainz se fue con sabor agridulce tras lograr la pole porque sabía lo difícil que iba a ser retener la primera posición. Tenía la carrera en su cabeza y la representó durante las 71 vueltas el domingo, con sobresaltos como la salida. Perdió terreno con Verstappen pero exhibió agresividad para adelantarlo. Luego, inteligencia y ritmo para enseñar a la parrilla el piloto que va a recibir con los brazos abiertos Williams en 2025. Dominó el finde desde los primeros Libres.

Ferrari lleva semanas poniendo la directa hacia el título de Constructores y salió con un gran botín de puntos del Autódromo. Charles Leclerc terminó tercero tras pasarse toda la carrera detrás de su compañero de equipo y ceder posición a Lando Norris en la vuelta 63. El británico, que tuvo sus más y sus menos otra vez con Verstappen, recortó once puntos a su rival por el Mundial aunque lo tiene realmente complicado.

El homenaje a Fernando Alonso tuvo poco de celebración y mucho de frustración. El asturiano no pudo festejar su carrera 400 en el Gran Circo y abandonó en las primeras vueltas de la cita. Su Aston Martin sigue sin correr pero él mantiene la pasión por volver a lograr algo grande en la categoría donde logró dos Mundiales hace ya demasiado.

La carrera empezó accidentada y el coche de seguridad tardó muy poco en salir y mucho en irse: siete vueltas. Yuki Tsunoda y Alex Albon ni llegaron a la curva uno y terminaron contra el muro. Para más caos, la salida de Checo Pérez fue sancionada con cinco segundos por arrancar delante de la línea amarilla donde hay que colocar las ruedas.

Ya tiene su victoria soñada. La que tanto quería para despedirse de Ferrari. Quien la sigue la consigue y Carlos Sainz llevaba semanas persiguiendo su cuarta victoria en Fórmula 1. Su última victoria vestido de rojo es casi tan especial como la primera, aquella de Silverstone hace un par de años. Tras lograr una superpole el sábado, el madrileño completó el trabajo con 71 vueltas muy serias. Un triunfo de ensueño que le refuerza como uno de los pilotos más sólidos de la parrilla.

En la salida perdió la pole pero tardó poco en recuperar el liderato. El español tiró en la relanzada de agresividad para atacar a Verstappen: se tiró desde el más allá y dejó atrás al neerlandés en la curva uno. El madrileño dominó en México aplicando un fuerte ritmo metiéndole décima a décima a su compañero Leclerc, que era segundo. Llegó a alejarse ocho segundos mientras se paseaba por el Autódromo de los Hermanos Rodríguez. Williams se frota las manos más que nunca con el piloto que recibirán el año que viene.

Tanto fue el cántaro a la fuente que al final tenía que romperse en algún momento. Los roces entre Verstappen y Norris este año han sido incontables: en la última cita en Austin elevaron el nivel y en México se pasaron de la raya. Recordó un poco a las luchas al límite entre el neerlandés y Hamilton en aquel épico 2021. En la vuelta once, el piloto de Red Bull contactó con el de McLaren en la curva cuatro y, unos metros más tarde, volvieron a salirse de pista.

Verstappen mantuvo la posición usando sus artimañas y agresividad, muchas veces cuestionable. Esta vez, no se fue de rositas como de costumbre y lo terminó pagando con una sanción ejemplar: 20 segundos que aplicó en su pit stop para caer a las últimas posiciones mientras Norris peleaba por el podio. Al final, podio para el británico, que le recorta once puntos al tricampeón.

Una fiesta aguada. Alonso, que no está para muchos homenajes, no olvidará su fin de semana 400 en Fórmula 1. Por más motivos negativos que agradables. Arrancó el Gran Premio enfermo y lo terminó antes de tiempo. El asturiano se retiró en la vuelta dieciséis por problemas mecánicos aunque su carrera ya estaba cogiendo el color de las últimas: ir perdiendo poco a poco posiciones y carente de ritmo.

Ninguna conclusión positiva en un fin de semana que tenía que ser de festejo y acabó pareciéndose más a un funeral. La única buena noticia es que Fernando Alonso se mantiene en activo con 43 años y, por lo menos, seguirá pilotando durante un par de años más. Disfrutando "cada vuelta y cada entrenamiento", la misma pasión del debut vence la lentitud de un Aston Martin que sigue muy perdido en la parrilla.

Un fin de semana de pesadilla. De empezar la semana aclamado como un Dios a terminarlo estancado en las últimas posiciones. Checo Pérez no pudo sonreír durante los cuatro días que pisó el paddock. Todo mal. Se clasificó decimoctavo el sábado y flaqueó, una carrera más, el domingo. Ni el inmenso calor local de los miles de chequistas le salvaron del desastre.

El mexicano ganó cinco puestos en la salida pero fue sancionado por situar su coche de forma equivocada. Giros más tarde, se peleó contra Lawson y Stroll por ganar posiciones en la zona media después de sufrir una sanción de cinco segundos. Se llevó un par de boquetes en su Red Bull que le condicionaron toda la carrera: pasó penurias en la decimosexta posición y su futuro en Fórmula 1 está más oscuro que nunca.

1- Carlos Sainz.

2- Lando Norris.

3- Charles Leclerc.

4- Lewis Hamilton.

5- George Russell.

6- Max Verstappen.

7- Kevin Magnussen.

8- Oscar Piastri.

9- Nico Hulkenberg.

10- Pierre Gasly.

11- Lance Stroll.

12- Franco Colapinto.

13- Esteban Ocon.

14- Valtteri Bottas.

15- Guanyu Zhou.

16- Liam Lawson.

17- Sergio Pérez.

18- Fernando Alonso (DNF).

19- Alex Albon (DNF).

20- Yuki Tsunoda (DNF).