Carlos Sainz y Williams evitan una sanción deportiva tras incumplir la normativa de las cámaras

Los comisarios de Fórmula 1 han multado a Williams con 50.000 euros (54.070 dólares) el sábado por incumplir la normativa relativa a las cámaras integradas en los coches durante el Gran Premio de China. La sanción, de no reincidir en lo que resta de temporada, se vería rebajada a 10.000 euros.

Los comisarios han afirmado que la escudería británica no proporcionó las imágenes de las cámaras inalámbricas delantera y trasera dentro del plazo establecido. "El motivo del fallo fue, al parecer, que el equipo creía que las cámaras vendrían equipadas con tarjetas SD proporcionadas por la FIA (la entidad responsable). No comprobaron si las tenían", han declarado en un comunicado.

"Cuando se descubrió la ausencia de las tarjetas SD después de la sesión de entrenamientos del viernes, el equipo no informó al Delegado Técnico de su incumplimiento", se ha explicado. Las imágenes de vídeo eran necesarias como parte de una nueva directiva técnica (DT) que endurece las normas sobre la flexibilidad de los alerones traseros.

"Para evitar dudas, no se sugirió que los alerones no cumplieran con los requisitos de flexibilidad de la carrocería", han declarado los comisarios. Williams ha reconocido su fallo y ha explicado que se ha debido a un malentendido. "No tenemos ninguna preocupación sobre la legalidad de nuestra ala. Es la misma que usamos en Melbourne, cumple totalmente con la normativa y no tuvimos que hacer ningún ajuste adicional para la emisión del nuevo TD", han añadido.

"El problema de ayer fue de procedimiento y confiamos en que proporcionaremos todas las grabaciones futuras sin problemas", han concluido desde el equipo. Con la tranquilidad en el garaje ante los rumores de una posible descalificación, los de Grove continuarán con normalidad el fin de semana en busca de sumar los máximos puntos posibles.