F1 | GP HUNGRÍA

Lando Norris lidera el doblete de Mclaren mientras los españoles sonríen; Carlos Sainz partirá cuarto y Fernando Alonso, séptimo

Aston Martin confirma su mejoría a una vuelta con sus dos coches en Q3. El madrileño vuelve a superar a Leclerc.

Lando Norris, el poleman de Hungría./REUTERS
Lando Norris, el poleman de Hungría. REUTERS
Jorge Peiró

Jorge Peiró

Budapest.- Que Max Verstappen ya no tiene el coche más rápido no es ninguna novedad. Mclaren lleva pulverizando el crono varias semanas pero el neerlandés resiste como puede aunque tenga momentos en los que su Red Bull no le dé para más. Hungría fue testigo del cohete que pilotan Lando Norris y Oscar Piastri tras su doblete en Hungaroring: pole para el británico, escoltado por el australiano. Solo les falta tener madera de campeones.

Carlos Sainz lo hará desde la cuarta plaza y Fernando Alonso desde la séptima. Cuando Norris cruzó la meta y le metió tres décimas a la mejor vuelta de Verstappen, las gradas estallaron. Curioso porque estaban repletas de camisetas naranjas neerlandesas. El piloto de Red Bull partirá tercero y seguro que intenta algo cuando se apague el semáforo. La 'qualy' en Hungría es fundamental por lo que cuesta adelantar así que la salida será clave para rascar un botín de puntos.

Tsunoda arruinó el último intento de todos cuando se estrelló. Restaban dos minutos y trece segundos cuando salió la bandera roja y el japonés fue despedido hacia las barreras. El susto del nipón provocó que algunos como Verstappen machacaran a golpes su volante. Ni él ni Alonso se subieron al coche para buscar una última vuelta porque sabían que no tenían tiempo y se les vio caminando por el pit lane con la sesión todavía en marcha.

Aston Martin había dado más de una vez la sorpresa en la Q2. Solía ser negativa cuando no lograban colarse entre los diez primeros por culpa de su indomable y nervioso coche. En Hungaroring, al revés: Stroll y Alonso pasaron como sexto y séptimo sin apuros. Parecen haber encontrado el punto al AMR-24 desde los libres del viernes.

La tanda larga del asturiano en los últimos entrenamientos ya fue consistente. Faltaba la velocidad a una vuelta. Carlos Sainz pasó a Q3 con facilidad porque lleva todo el Gran Premio de Hungría de F1 muy cómodo en su Ferrari. Hulkenberg, Bottas, Albon, Sargeant y Magnussen fueron eliminados en Q2. Hamilton, por cierto, pasó por una centésima, al encontrarse tráfico en su vuelta.

El protagonista de la Q1 fue Sergio Pérez. Su accidente detuvo la sesión durante unos minutos. Aunque George Russell tampoco tiene motivos para sonreír ya que cayó junto a él a las primeras de cambio. El británico preguntó al equipo por radio por qué no le habían puesto más gasolina antes de enterarse de que había caído eliminado. Error de Mercedes con el piloto que venía de hacer la pole en la última carrera.

Carlos Sainz y Fernando Alonso pasaron el corte sin problemas y cerraron vueltas sólidas pronto. La lluvia hizo acto de presencia pero no fue suficiente para montar el neumático intermedio. Todos con blandos en una pista húmeda, cayeron eliminados Gasly, Ocon, Zhou, Russell y Pérez.

Otra bandera roja de Checo

Nadie sabe cuánto le queda en Red Bull. Con clasificaciones como la de Hungría, Checo Pérez sigue sin hacer méritos para pilotar al lado de Max Verstappen. El mexicano reconoció ayer lo cómodo que se estaba sintiendo durante el fin de semana y, al día siguiente, chocó. Otra vez en Q1, como en Silverstone cuando se fue a la grava.

Pérez perdió su coche después de pasar por la chicane de Hungaroring y provocó bandera roja a falta de seis minutos para terminar la primera parte de la clasificación. Otra bandera roja más y otra salida en carrera desde atrás, una zona que no le corresponde a un Red Bull. El mexicano partirá desde la decimosexta mientras se sigue jugando su futuro. La próxima carrera en Spa será determinante.