La dura sanción a Carlos Sainz duele aún más tras la clasificación: "Esperaba más del deporte en esta situación"

No hay quien le quite a Carlos Sainz el cabreo que arrastra desde la madrugada del viernes. Los comisarios de la FIA no consideraron que pudieran utilizar como eximente que los daños en la batería -que obligó a Ferrari a montar la tercera unidad, de las dos permitidas por temporada- fueran provocados por una tapa de una bomba de agua del nuevo circuito de Las Vegas. Esos 10 puestos de sanción le relegan al 12º lugar de parrilla, después de haber peleado a la milésima por la pole position este sábado. Y el gran ritmo demostrado por los Ferrari hace que todo escueza aún más, si cabe.

En una situación que tiene tintes estrambóticos, los comisarios del GP de Las Vegas aplicaron el reglamento a rajatabla -algunos deslizan que Mercedes se negó a que se hiciera una excepción con su rival por el subcampeonato de equipos- y el madrileño ve cómo tendrá que apelar a la remontada el domingo desde la sexta línea de salida. Lejos de su compañero, Charles Leclerc, al que tuvo a 44 milésimas este sábado.

"El equipo ha hecho un grandísimo trabajo. Hemos dominado la clasificación juntos después de un viernes complicado en el que se reconstruyó el coche. Conseguir esa primera línea de parrilla es increíble. Obviamente, me gustaría estar en la pole, porque así empezaría 11º, pero hicimos el máximo hoy", apuntó Sainz nada más bajarse del coche.

"Puf… veremos cómo va la salida, cómo evoluciona el graining de los neumáticos [ampollas] y lo fácil que sea adelantar aquí. Parece que claramente tenemos ritmo y me gustaría mucho luchar por la victoria con Max y Charles, pero desgraciadamente voy a estar en un modo remontada, aunque espero llegar a la parte de arriba y estar con ellos".

El español, que acabó segundo en cada una de las tres sesiones de clasificación, reconoce que su compañero de equipo estuvo "un pasito por delante en cuanto a confianza", y que no le sorprende el rendimiento del SF23 en Las Vegas, como ya avisó el jueves.

"No, no me sorprende. Cuando vi la configuración, ya lo dije al principio del fin de semana, excepto en las curvas 1 y 2 es una mezcla de Monza y Singapur, que han sido las pistas donde hemos ido mas fuertes esta temporada, donde conseguimos pole e incluso ganamos. Dije que teníamos una buena posibilidad de pole y como siempre la carrera sería un interrogante para nosotros", añadió.

"Esperábamos que los adelantamientos fueran más fáciles. Ha sido muy complicado seguir a otro coche cerca por los muros y la confianza que pierdes con un coche delante a la hora de frenar, que tampoco ves bien las referencias. Espero adelantar mañana, sin duda, pero cuánto y a qué ritmo lo haré, no lo sé. Todavía estoy con muy malas sensaciones de lo de ayer, muy descontento y sin muchas ganas de hablar. Estoy de mal humor. Intentando pensar en mañana y a ver si se puede remontar".

La carrera del domingo estará condicionada por las bajas temperaturas (en torno a 15ºC en el asfalto), que provocarán ampollas en la parte externa del neumático. El equipo que mejor sepa gestionar este problema, tendrá un punto a favor. El ritmo de Ferrari es ilusionante, pero Sainz tendrá que gestionar una arrancada en mitad del pelotón con poco espacio en la llegada a la primera curva y los adelantamientos en un trazado urbano, siempre complicados.

La sanción al piloto español se mantuvo el viernes después de que no se alcanzase unanimidad entre los equipos rivales de Ferrari para apoyar una excepción de la aplicación del reglamento ante el incidente. En el paddock se habla de que fue Toto Wolff, jefe de Mercedes-AMG, el que se mantuvo inflexible. No en vano, solo 20 puntos les separan de los italianos en la batalla por el subcampeonato de Constructores.

"Esperaba más del deporte en esta situación. Me sorprende que el órgano de gobierno tenga el poder de, en casos de fuerza mayor, anular un poco en este tipo de situación en la que está tan claro que es algo que está completamente fuera del control del equipo y completamente fuera del control del piloto y no lo aplique", apuntó el español en Las Vegas.

"Pero, por alguna razón, hubo equipos rivales presionando para que me cayese una sanción que me sorprende en cierto modo. Llevo demasiado tiempo en este deporte como para entender que es un negocio. Hay demasiado dinero en juego en la posición final en Constructores o lo que sea para que un equipo no amenace con solicitar una penalización para mí. Al mismo tiempo, como he dicho, no me sorprende. Estoy muy decepcionado y, sinceramente, muy molesto con toda la situación, con el deporte. Estoy muy disgustado, es la palabra correcta, y de mal humor porque esperaba más".

Fréderic Vasseur, jefe de equipo de Ferrari, que el viernes se mostró muy molesto con la situación que ha vivido su equipo, insistió en la injusticia de la sanción hacia su piloto.

"Hay que preguntar a los comisarios. Creo que es completamente injusto, no es responsabilidad nuestra, sino del organizador. Nosotros hemos pagado el precio de los daños. No se lo dijimos antes de la FP2 para que no pensara en ello. Creo que aun así ha estado ahí desde la primera vuelta de los libres 2 y ha estado con buena cara desde el comienzo, ha podido rendir y ha sido consistente", apuntó en el micrófono de DAZN F1.

"Sí, es un resultado mega. Desde los libres 1 hemos tenido buen ritmo aunque el fin de semana hay sido caótico en un lado del garaje. Pero Carlos se ha repuesto bien y hemos obtenido un un resultado. Pero mañana lo tendrá un poco más difícil porque saldrá 12º, pero seguro que con el ritmo consistente y fuerte que ha demostrado en la FP3 podrá remontar, porque al carrera será complicada.