Fernando Alonso se harta de las 'falsas mejoras' en su Aston Martin: "No vamos a prometer nada"
El equipo británico ha montado piezas nuevas en cada Gran Premio esta temporada pero ninguna de ellas ha surtido efecto.

Fernando Alonso y su Aston Martin vuelven a aparecer en la peor foto posible al término de un Gran Premio: debajo de los diez primeros, en la lista de pilotos que se van de vacío a casa. En este caso no habrá tiempo para ello, nadie podrá descansar porque Austria está a la vuelta de la esquina y el jueves los equipos aterrizan en Spielberg. Dentro de dos aguarda Silverstone, por lo que sin tiempo para introducir y experimentar cambios el objetivo del español es claro: "Acabar las carreras".
Quién diría que la situación sería esta después de que la marca británica irrumpiera en 2023 con fuerza y podios. Después de un inicio de temporada aterrador para los Ferrari, Mercedes o McLaren, claros opositores a ser la segunda potencia tras Red Bull, prometían traer mejoras que les propulsaran a la lucha por victorias. Pero todo salió del revés, y las piezas introducidas en el monoplaza podrían más bien tildarse como 'peoras'.
En 2024 se ha tratado de enmendar la situación con al menos un cambio en cada circuito y ninguna ha surtido efecto. "Espero las mejoras, pero las hemos esperado también desde el año pasado y a principios de este, así que tampoco vamos a prometer nada, vamos a trabajar duro", dijo Fernando, de nuevo, resignado.
Más trabajo y menos palabras
Barcelona es la gota que colma el vaso de su paciencia, porque el asturiano se ha cansado de escuchar que esos paquetes serán milagrosos y arreglarán todos los problemas. Eso es imposible, al menos por ahora.
A raíz de ello, su imagen cambia. Hace semanas se dedicaba a ir "circuito a circuito" e intentar rascar en cada cita un resultado algo mejor del que las simulaciones pronosticaban. Pero cada semana auguran algo peor que la anterior, y aunque terminan rascando posiciones los sábados (Fernando ya dijo que esperaban quedarse en Q1 y terminó siendo 11º en Cataluña), los domingos son sepulcrales.
🗣️ Fernando Alonso, en DAZN
— DAZN España (@DAZN_ES) June 23, 2024
"Lo peor es no tener ritmo. Barcelona no te miente, en 66 vueltas acabas donde tienes que acabar"#EspañaDAZNF1 🇪🇸 pic.twitter.com/aIUbMe52zV
Ha llegado un punto en el que espera "un minifuneral en cada rueda de prensa". Está cansado de dar explicaciones tras cada traspié, y prefiere dejar que el tiempo hable más que el propio equipo o los 'gurús' de la Fórmula 1 acerca de si las mejoras funcionan o no. Es más práctico esperar y que el rendimiento de las piezas hable por sí solo.
De esta manera, "si van bien las disfrutaremos y si van mal intentaremos mejorarlas", dice. Y este procedimiento, aparte de ser lógico, protege a Aston Martin de un hype ficticio creado alrededor de la ilusión por ver a Fernando de nuevo en la pomada por ganar la famosa '33'.
Parece difícil que eso pueda ocurrir, aunque la probabilidad no es cero. Pero por ahora Fernando es tajante con lo que está por venir: "No va a haber mejoras todavía, es lo que hay". Advirtió que los dos próximos fines de semana serán más de lo mismo, y que Hungría supondrá un nuevo comienzo para ellos. A partir de la 13ª carrera, pasado el ecuador del campeonato, esperan otra película y avisa a los que critican el sorpasso sufrido con Alpine: "A final de año hacemos cuentas".
Hasta entonces toca agachar la cabeza y "poner trabajo sobre la pista", y sobre todo no escuchar los rumores sobre si las piezas surtirán efecto o no. Fernando ataca a ese runrún, y no tanto a su equipo, al que ya ha ensalzado por el gran trabajo realizado en la fábrica de Silverstone durante los últimos meses para reconducir el rumbo.
Ya tienen la solución
De lo que sí debe estar cansado Fernando es del dolor de cabeza que le produce la comprensión de la influencia de estas piezas en su coche. Desde marzo del año pasado no paran de llegar esos paquetes que se supone que elevarán ese monoplaza verde a otro nivel, pero todos ellos han actuado en dirección contraria. Año y medio más tarde, parecen entender el porqué.
"Creo que el año pasado, cuando hemos introducido algún paquete de mejoras, esperábamos una cosa y los resultados eran otros. Creo que ahora hemos entendido el porqué de todas esas discrepancias". Con el misterio resuelto, únicamente el tiempo y la paciencia pueden ayudar a Aston Martin. Es lo que pide Fernando, esperar a los resultados en vez de lanzar promesas al aire, y hasta que funcionen, silencio y trabajo. Sólo eso.