Fernando Alonso y el espíritu del samurái: "Mi mayor temor es no ofrecer lo que la gente espera de mí"
El piloto español se sincera sobre sus miedos y sobre el objetivo que persigue día tras día.

Fernando Alonso ha sido un amante de la cultura japonesa y de los samuráis en especial desde hace años. El bicampeón del mundo de Fórmula 1 lleva tatuada una imagen de estos antiguos guerreros nipones en la parte alta de su espalda. Y llega a este fin de semana del GP de Japón, 16ª cita de la temporada 2023, con ganas de volver a presentar batalla, después de los problemas que tuvo Aston Martin en Singapur.
El asturiano sigue en la pelea por el tercer puesto del Mundial, a 10 puntos de Lewis Hamilton, aunque su equipo ha caído al cuarto puesto y cede ya 72 puntos con Mercedes, segundo en la general. No obstante, los británicos mantienen la calma y esperan levantar el vuelo en Suzuka.
En este contexto, y tras aterrizar en Tokio, el piloto español explicó así de dónde viene su conexión con los samuráis y su cultura: "Creo que un piloto y un samurái están muy conectados. La disciplina, la confianza en uno mismo, el no tener miedo. Luchamos por un solo objetivo, que es ganar. Para los samurái, incluso morir es un privilegio, no un miedo. Como piloto, en cada vuelta, en cada curva, hay peligro. Tienes que estar preparado para cualquier cosa que pueda pasar. Tienes que entrenar y estar listo".
"Creo que los samuráis aprovechaban ese mismo espíritu, utilizando esa disciplina para convertirse en una mejor versión de sí mismos. Ya sea en una carrera o en una batalla, esa disciplina es clave para estar más preparado que el día anterior", añadió en una entrevista publicada en la web oficial del equipo en colaboración con uno de sus patrocinadores, Crypto.com.
Esta temporada, con el paso adelante del equipo de Silverstone y la llegada del español, procedente de Alpine, han logrado siete podios en las primeras 15 carreras, algo impensable hace solo 12 meses. Aun así, en el primer fin de semana que Red Bull falló en todo el año, fueron Carlos Sainz y Ferrari quienes se llevaron la victoria. La 33ª de Alonso sigue esperando.
"Cada carrera que comienzo, incluso aunque no seamos lo suficientemente fuertes para luchar por la victoria, hay un 1% de mí que cuando se cierra el visor y se encienden las luces verdes, aún espera que ese sea el día en el que ganaré. El 99% de las veces fallas, pero con una vez que tengas éxito, merece la pena la espera y todo el trabajo que has puesto en ello", asegura. "El deseo de ganar siempre está ahí. Lo tuve desde el primer día y aún lo mantengo al mismo nivel ahora. No pararé pronto".
Cuando se le preguntó por cuáles son sus mayores temores, el piloto español confesó que el hecho de tener a más de 700 personas trabajando en la fábrica y en los circuitos para respaldarle, es una de esas cosas que le hacen querer sacar su mejor versión cada fin de semana.
"Mi mayor temor es no hacerlo bien, no rendir, no ganar. Vamos a una nueva carrera, a un nuevo país y hay muchas expectativas. Tengo 750 personas detrás de mí en Aston Martin, tratando de tener el mejor coche posible. Hay 20 personas en nuestras paradas en boxes, cambiando neumáticos en menos de tres segundos. Hay ingenieros, estrategas... Todo el mundo está haciendo todo lo que pueden para ponerme en la mejor posición posible y mi mayor temor es no ofrecer lo que la gente espera de mí", afirma.

«Si pudiera elegir cada mañana, seguiría eligiendo ser piloto»
Uno de los lemas que el piloto español lleva como bandera es el hecho de optimizar cada fin de semana sus opciones. Si hay coche para hacer quinto, no hacer sexto; si hay coche para estar en la pelea por el podio, acabar cerca del ganador. Y en la entrevista con el patrocinador del equipo insiste en que no siempre es fácil, pero que estar más preparado que el resto de sus rivales es clave.
"En la vida hay más fracasos que éxitos, y hay que afrontarlos para volver más fuerte. Hace falta disciplina. Hay que estar preparado para analizar los fracasos y aprender de los errores: así es como te conviertes en una persona mejor. Los samuráis utilizan ese fracaso en la batalla, ese hambre que llevan dentro, para entrenar más duro e ir a la siguiente batalla, o a la siguiente carrera, un poco más preparados. Es muy difícil estar preparado al 100% para cada fin de semana, cada carrera, cada vuelta, pero si lo estás al 99,9% todo el tiempo, estarás un paso por delante de los demás", subraya.
Y aunque nunca esperó estar 20 temporadas en la F1, reconoce que sigue siendo lo que le hace levantarse cada mañana con una sonrisa. Y deja claro que mientras se sienta rápido, hay Alonso para rato.
"Nunca pensé que estaría tanto tiempo en la Fórmula 1 porque nunca me sentí parte del circo: todo el glamour, todo el espectáculo, todo lo que pasa en el circuito más allá de las carreras... Pero, si una versión más joven de mí pudiera verme pilotando al más alto nivel en la Fórmula 1 a los 42 años, no se sorprendería porque, incluso entonces, sabía lo mucho que me gustaban las carreras. Correr en la Fórmula 1 es lo que más me gusta hacer. Es la mejor categoría del mundo. Si pudiera elegir una cosa que hacer cada vez que me levanto por la mañana, seguiría eligiendo ser piloto de F1. Mientras me sienta rápido, ¿por qué parar?", concluye.