FÓRMULA 1
Las horas bajas de Lewis Hamilton no se ciñen solo a Ferrari y los circuitos
El británico sufre un bache deportivo y no termina de adaptarse a su nuevo coche.
Todo era de color de rosa en la vida de Lewis Hamilton cuando se convirtió en piloto de Ferrari el día 1 de enero. Desde entonces, el heptacampeón ha sufrido más que disfrutado desde que se subió al coche rojo. Hasta el punto de terminar a casi 31 segundos de su compañero Charles Leclerc en la última carrera y ser duramente criticado por la prensa italiana, que se impacienta con la adaptación de su fichaje estrella.
'La Gazzetta dello Sport' habla de un Hamilton 'sin salida'. 'Lewis Hamilton y Ferrari aún no se llevan bien, en un túnel sin salida. El comienzo de Lewis estuvo muy por debajo de las expectativas', critican. El británico ocupa el séptimo lugar del campeonato con 31 puntos mientras su compañero Leclerc es quinto con 47. Desde su triunfo en la carrera al sprint de China, el expiloto de Mercedes solo deja declaraciones catastrofistas y apocalípticas.
"Cero positivos. No hay nada. Salvo para Charles, que ha hecho podio y es bueno para el equipo. Ha sido horrible, no he disfrutado nada y no tengo respuestas", declaró tras la carrera de Yeda. Así cada día y predice que tampoco irá bien en Miami. Al bache deportivo de Hamilton se une un quebradero de cabeza de carácter extradeportivo y su bache va más allá de la Fórmula 1: el cierre de uno de sus negocios por pérdidas. La clausura de la cadena de comida rápida vegana de 'Neat Burger' dejará cerca de 150 personas sin trabajo, recoge The Sun.
El negocio de Hamilton cerrará todos sus locales en el Reino Unido tras sufrir importantes pérdidas financieras estimadas en cerca de nueve millones de euros. Fundada en 2019 con el apoyo de Leonardo DiCaprio y Thibaut Courtois, la cadena aspiraba a ser la primera marca internacional de hamburguesas de origen vegetal del mundo. Hamilton, que se hizo vegano en el año 2017, siempre ha estado muy implicado en la causa.
A pesar de estar valorada en cerca de noventa millones de dólares en 2023, registró pérdidas atribuidas a la disminución del tráfico peatonal en Londres y la menor demanda de reparto a domicilio tras la pandemia, revela prensa británica. Si bien sus sucursales en Milán y Nueva York cerraron en 2023, los dos últimos restaurantes en el Reino Unido se unen ahora a las clausuras.