Johnny Herbert, el comisario que sancionó a Fernando Alonso, recibe amenazas de muerte

El comisario que sancionó a Fernando Alonso en Australia ha recibido amenazas de muerte. Bueno, sigue recibiéndolas, como él mismo ha confirmado. Johnny Herbert fue uno los responsables de castigar, de forma polémica, al asturiano durante el Gran Premio en Melbourne, reconoce que está siendo víctima de un "aluvión de amenazas de muerte" a través de las redes sociales.

"La mayoría de amenazas eran de españoles. Fui comisario en el GP de Australia y las repercusiones fueron terribles", ha dicho Herbert tras la sanción a Alonso tras el accidente de George Russell, según recoge Crash.net. "Tengo suerte de tener los hombros anchos, me parece patético que me señalaran a mí", ha añadido el expiloto de F1. Al español se le castigó por "conducción errática" con 20 segundos y perdió dos posiciones en Melbourne.

"Había mensajes con emojis de puñales en la parte inferior de la pantalla, gente que decía 'sabemos dónde vives, iremos a por ti", ha confesado. "La mayoría eran españoles, deberían haberlo entendido, porque estaba muy claro cómo y a qué decisión se había llegado en el comunicado que se emitió. La gente también decía que, como nunca había sido campeón del mundo, no estaba cualificado para opinar", ha añadido Herbert.

"Las amenazas duraron dos semanas y siguen llegando, es parte del mundo de las redes sociales, donde todo el mundo tiene una opinión pero no tiene hechos que la respalden", ha señalado el comisario. "Los comentarios sobre saber dónde vivía, los puñales y las amenazas de que me iban a hacer daño. No entiendo la mentalidad de la gente que hace eso, no son verdaderos aficionados a la F1 y estoy seguro de que Fernando se avergonzaría si supiera que sus fans están haciendo eso", ha denunciado Johnny Herbert.

El origen del 'pique' entre Alonso y Herbert viene de hace años, desde 2016, concretamente. "Se remonta a Baréin hace unos años, creo. Algunos años antes, cuando estaba con McLaren, Alonso había estado en la radio criticando el motor casi cada carrera diciendo que era como un motor de GP2. Era muy ruidoso. Yo trabajaba para Sky y dije que si a Alonso no le gustaba, debería dejar el equipo. No dije que se retirara", ha explicado con detenimiento.

"Entonces se me acercó en directo en Baréin y me espetó que era campeón del mundo y que no se retiraría para convertirse en comentarista porque yo no era campeón del mundo", ha completado.

Herbert asegura que es ajeno a las amenazas de muerte: "No me ha desanimado como comisario. Por desgracia, todo forma parte de ello. Yo era el comisario de pilotos en Melbourne, así que cuando se trata de un comisario de pilotos, él es el que se lleva la peor parte. Lo acepto. No es un problema", ha admitido.