F1 | GP CHINA

Los motivos de Aston Martin para darle las llaves del equipo al "gruñón" Alonso: "Nunca hemos visto nada parecido"

El jefe de equipo, Mike Krack, se rindió nuevamente a su recientemente renovado piloto, y desveló la capital importancia que atesora de puertas para adentro.

Fernando Alonso, celebrando su tercer puesto en la clasificación del GP de China. /REUTERS
Fernando Alonso, celebrando su tercer puesto en la clasificación del GP de China. REUTERS
Daniel Knecht Escobar

Daniel Knecht Escobar

Otro milagro de Fernando Alonso, y ya van… Al asturiano le gusta China, disfruta del circuito como un niño pequeño. Así lo aseguraba el asturiano justo después de sacarse de la chistera un 'vueltón' para dejar a todos con la boca abierta y asegurarse el tercer puesto en la parrilla de salida para la carrera de mañana. Después de una carrera accidentada al sprint, en la que Sainz y él tuvieron sus más y sus menos, remontó el día para ilusionar a todos con una provisional segunda plaza que luego Sergio 'Checo' Pérez le quitó.

Incluso supo sacar el lado positivo sobre el lance con Carlos Sainz. "Hubiese acabado séptimo o lo que sea, no sé si eran dos puntos, y ha sido una carrera muy divertida", dijo con una sonrisa pícara de oreja a oreja en los canutazos. Sorprende que, escuchando declaraciones así y sus continuos paseos en patinete por el paddock, su jefe lo tilde de "gruñón". Algo sabe que se nos escapa al resto.

Mike Krack y Aston Martin están encantados con el trabajo del asturiano. A su rendimiento incontestable en pista, se le suma la gran influencia que tiene entre bambalinas, y oír al jefe de equipo denota el rango que ha alcanzado Fernando en la marca. "A veces es un poco gruñón, pero puede serlo cuando quiera". Su carácter y experiencia son claves para un desarrollo de equipo y, en especial, del coche que, según el mandamás británico, va por la "dirección adecuada".

Alonso tiene las llaves de la escudería. Así lo demuestra su reciente renovación multianual y lo permisivo que es su jefe con él. Y todo eso tiene una explicación: "Muestra mucha precisión en las reuniones de equipo, y siempre está a tope desde la primera vuelta". Es ahí donde más impresiona a los suyos y se ha ganado una renovación por la que Krack, personalmente, se ha desvivido.

"Tiene un extra que nadie más tiene. Nunca he visto nada parecido, por eso he empujado para su renovación". El objetivo ya está cumplido: a sus 42 años, Fernando ha alargado dos temporadas más su estancia en la Fórmula 1, hasta 2026, para permanecer en un proyecto sobre el que tiene esperanzas a corta, media y larga distancia. Ahora sólo queda seguir disfrutando de él.

Sorpresas constantes

Krack disfruta como el que más. Se le nota en la cara cuando habla. Volvió a pasar por los micrófonos de DAZN y la escena se repitió: estaba rendido a su piloto. En Suzuka clasificó quinto, hoy en Shanghái subió la apuesta hasta el tercer lugar, ante coches mejores y las dichosas simulaciones que cada fin de semana inundan de pesimismo el box de Aston Martin. Pero con Fernando siempre hay lugar para la sorpresa, y el luxemburgués no termina de acostumbrarse: "Nos sorprendió, pero se lo merece".

Es normal, tras su abandono en la carrera al sprint. "Después de esta mañana no sabíamos si íbamos a poder terminar tan altos, ha sido una gran remontada. Un resultado increíble", admitía el jefe de equipo. Aunque ya lo dijo él y los datos no mienten, porque durante la vuelta a China cinco años más tarde, los tiempos del español han mejorado vuelta tras vuelta hasta llegar a un tercer puesto de salida que se convierte en el primer 'podio' del equipo esta temporada.