Mónaco vuelve a coronar a un intratable Verstappen y la 33 de Alonso tendrá que esperar
El piloto neerlandés no dio opciones, ni si quiera con la llegada de la lluvia en las últimas 28 vueltas, y Ferrari volvió a fallar.
Mónaco.- No hay nubes que oscurezcan este 2023 de Max Verstappen y Red Bull. Ni siquiera todos los astros alineados para que la 33 de Fernando Alonso llegase en Mónaco, un circuito especial, de exigencias técnicas diferentes, retuvieron el empuje del neerlandés bicampeón del mundo. Llovió, como se esperaba; llegó a tocar los muros más de lo necesario, pero tiene estrella y vive en un estado de gracia único. Este domingo se anotó su 39ª victoria y ya está a dos de Ayrton Senna.
Alonso hizo todo lo que estaba en sus manos. Le siguió el ritmo al inicio; redujo las distancias cuando el líder llegó a los primeros doblados; se quedó en el margen de los 10 segundos, por si salía un Safety Car, pero esta vez Aston Martin no estuvo acertado cuando empezó a caer el aguacero en Montecarlo y tuvo que hacer dos paradas en cuestión de dos vueltas tras calzar un neumático de seco cuando tocaba el de mojado. Quinto podio para él en seis carreras. Ya iguala esa misma cifra que consiguió en 2006 (aunque aquella vez de su segundo Mundial, con tres victorias).
Los invitados de excepción fueron Esteban Ocon y Alpine, a quien no se les esperaba después de un inicio de año apagado, polémico y en el que han llegado a amenazar a sus empleados. Pero el francés se desquitó con una gran clasificación y este domingo supo aguantar al Ferrari de Carlos Sainz detrás cuando tocaba y aprovecharse de su posición en pista. El madrileño vio dilapidadas sus opciones reales de podio por una nueva pifia del equipo italiano que le impidió demostrar su ritmo con aire limpio cuando tocaba. Suma y sigue.
MAX VERSTAPPEN
👏 Mis 'dieses'
Inquebrantable. El chico de oro de la nueva generación de pilotos es capaz de ganar en cualquier tipo de condición, incluso cuando todo se le pone en contra, como este domingo. El de Red Bull había conseguido abrir un hueco razonable con Alonso cuando la lluvia comenzó a caer, abriendo la posibilidad de que las barajas se entremezclaran en su contra. Pero, pese a que en algunos momentos arriesgó más de la cuenta y a punto estuvo de poner en bandeja la 33 de su amigo español, mantuvo el tipo y llevó a meta un Red Bull que va camino de convertirse en uno de los mejores coches jamás construidos en la F1.
FERRARI
🤔 Hay runrún…
El equipo italiano no se encuentra, ni a sol ni a sombra. Este fin de semana en Mónaco tenían ante sí una oportunidad de oro para lograr un gran resultado en un trazado que se les ha dado realmente bien en los últimos tres años. Pero en lugar de ello, tiraron por la borda un más que seguro podio de Carlos Sainz en condiciones de seco. Ya el sábado le sacaron en tráfico a su último intento de Q3, y el ingeniero de Charles Leclerc no estuvo ágil a la hora de avisarle del tráfico que venía detrás al final de la sesión (tres puestos de sanción en parrilla por molestar a Norris). Pero lo de este domingo con el madrileño ha sido para hacérselo mirar. Después de aguantar detrás de Esteban Ocon (3º) -incluido un intento de adelantamiento a la salida del túnel que dañó un flap del alerón delantero del Ferrari- hasta la vuelta 32 (tras dos intentos fallidos del muro italiano de engañar a sus rivales franceses fingiendo que hacían parar a Sainz), desperdiciaron la ocasión. Detuvieron al español una vuelta después, evitando que impusiera su ritmo y aprovechara la parada lenta de Alpine. El cabreo del piloto no fue para menos. "Exactamente lo que he dicho, exactamente lo que he dicho. No me importaba Hamilton, iba jodidamente rápido". Así, no.
FERNANDO ALONSO
😎 Me reafirmo
Es capaz de generar ilusión cada fin de semana, como en los tiempos de gloria que la afición pensaba que nunca volverían. A sus 41 años (cerca de cumplir los 42) está más en forma que nunca, compite al mismo nivel de siempre y su energía se irradia del mismo modo que a mediados de los 2000, cuando derrocó el imperio de Ferrari y Schumacher. El fallo de Aston Martin en esa primera parada que podría haberle permitido presionar a Verstappen pasada la mitad de carrera impidió mantener la emoción hasta la última vuelta, pero ha completado su mejor arranque de año desde 2006 (cuando fue campeón por segunda vez) después de años de bagaje en el desierto. Está de vuelta. En todos los sentidos. No hay quien le pare.
LA LLUVIA
✅Un tuit que me representa
Estaba invitada, pero se hizo de rogar. La lluvia llegó cuando más podía llegar a influir en el resultado del GP de Mónaco: pasada la mitad de la misma (en la vuelta 50 de 78) y cuando muchos ya pensaban en entrar en boxes. El aguacero empapó rápidamente el circuito urbano y obligó a todos a montar neumáticos de mojado. Pero Aston Martin erró al calzarle los medios de seco a Alonso en la vuelta 53, lo que les hizo parar de nuevo al final de la misma para montar los intermedios que estaban montando el resto de sus rivales. El caos que provocó recorrió el ancho y largo del pelotón: Sainz se pasó de frenada en la bajada desde el Casino librando de milagro el abandono; Stroll terminó de redondear un fin de semana desastroso; los Haas dieron el show y Russell y Pérez se tocaron en una imagen de auténtico videojuego (5 segundos de sanción al inglés por reincorporarse a pista de manera insegura). Ya van dos ediciones seguidas con agua en Montecarlo y ¡qué espectáculo!
Tsunoda diciéndole a su ingeniero que si quiere que se estrelle 😂
— DAZN España (@DAZN_ES) May 28, 2023
Genio y figura#MonacoDAZNF1 🇲🇨 pic.twitter.com/Ak6dBS5ZpR
SERGIO PÉREZ
🚨 Poco se habla de…
El piloto mexicano ha defraudado este fin de semana de principio a fin. Primero con el error que cometió en la Q1 el sábado tras entrar pasadísimo en la primera curva e impactar contra las protecciones. Pero el domingo, en una situación muy complicada desde el fondo de la parrilla, no ha sido capaz de mostrar esas pinceladas de inspiración que había regalado en el pasado en escenario urbanos (cinco de sus seis victorias son en trazados callejeros). Aunque inicialmente ejecutó bien la estrategia a la desesperada de montar el duro temprano, se encontró rápidamente en tráfico con Lance Stroll. Desdibujado en mitad de la parte trasera del pelotón tocó a Magnussen por detrás cuando luchaba por el 14º puesto. Y después de que hiciese aparición la lluvia, no solo no lo aprovechó sino que se vio doblado en hasta dos ocasiones por su compañero de equipo.... con el que se esperaba que luchara el Mundial. Ya está a 39 puntos. "¡Qué fin de semana tan malo! Lo siento, fue mi culpa. Volveremos a nuestro nivel en Barcelona", se disculpó el mexicano con su equipo al final de la carrera.