Los tifosi reafirman quién es su favorito en un momento 'tierra trágame' para Lewis Hamilton

La expectación en Italia es máxima. Queda una semana para que los coches vuelvan a rodar en 'modo competición' en el primer gran premio de la temporada. Albert Park acogerá una de las primeras pruebas con más dudas por resolver de la Fórmula 1 moderna, y es que los test de Baréin no dejaron nada en claro y nadie sabe quién es el líder en la sombra de los constructores. Se prevén un McLaren por encima del resto, un Mercedes mejorado, un Red Bull en la misma línea del final de temporada pasada... y a Ferrari soñando con todo.

El trabajo de todo el invierno en Maranello ha dado sus frutos, y al SF25 se le presupone un rendimiento capaz de luchar por victorias y, a la larga, por ambos mundiales. De hecho, desde la fábrica se ha filtrado la creencia de que no firmar el doblete sería una "decepción".

Más aún con un siete veces campeón del mundo en sus filas. La llegada de Lewis Hamilton es la guinda para ilusión de los tifosi, que ven más cerca que nunca su vuelta a la cima. Aún así, el británico no tiene el trono ferrarista todavía. La creencia general desde que se supo que el inglés aterrizaría en la Scuderia en 2025 fue la de que se haría rápidamente con los mandos y sería el favorito de la afición. Pero nada más lejos de la realidad.

A falta de ver en pista el verdadero rendimiento del nuevo coche y cómo lo doman Hamilton y Charles Leclerc, es el monegasco el que sigue un peldaño por encima en la carrera por ser 'el niño mimado' de Ferrari. A fin de cuentas, pelea por las victorias del equipo desde 2019 y sigue siendo considerado un potencial campeón del mundo.

Milán ha reafirmado su status. Ambos pilotos se han pasado por la ciudad lombarda para hacer los típicos 'donuts' a modo de exhibición (lógicamente, con modelos de temporadas anteriores) y presentarse en comunidad antes de comenzar la temporada. Subidos en el escenario y hablando con la multitud, los tifosi han arrancado con un grito unánime en apoyo a Leclerc: "Oh, Leclerc, ¡tráenos el campeonato!". Un cántico que ha hecho que Hamilton pasara su primer momento 'tierra trágame' enfundado en un mono rojo.

El inglés tendrá que hacer mucho más que enseñar su currículum para ganarse el cartel de piloto número uno del equipo. En Australia tendrá la oportunidad de demostrar que aún casa con las victorias y las conversaciones de posible campeón mundial. El primero con ocho coronas.