Alaba da un respiro a Ancelotti

El Mundial de Clubes será un torneo muy importante para David Alaba. El austriaco vuelve después de un mes. Su último partido como titular fue la derrota contra el Villarreal en LaLiga, y fue entonces cuando una lesión muscular lo frenó. Ha estado siete encuentros fuera de combate: Valencia, Barcelona, Villarreal, Athletic, Atlético, Real Sociedad y, de nuevo, Valencia. Jugó unos minutos contra el Mallorca y, aunque todavía no se encuentra al 100% y no está confirmada su titularidad contra el Al Ahly, su mera presencia en el torneo es un alivio para el Real Madrid.

Se trata de una vuelta muy esperada por Ancelotti y su cuerpo técnico. Alaba tiene un peso específico en el equipo blanco tanto en lo deportivo como en lo psicológico. Sobre el terreno de juego, el ex Bayern es el mejor arma que tienen los blancos en salida de balón, aclarando con buenos pases interiores y en largo las presiones rivales. Los equipos que aprietan arriba hacen que el Real Madrid sufra más de la cuenta, y él es un buen antídoto contra esto. Además, es muy efectivo corrigiendo la posición y lee muy bien el juego.

Desde el punto de vista del liderazgo, Alaba asumió un rol importante desde su llegada la temporada pasada. No le pesó llevar el '4' que dejó Sergio Ramos y capitaneó la defensa con la ayuda de un inconmensurable Militao, al que moldeó con consejos. Es de los que no para de hablar sobre el terreno de juego, colocando y dando instrucciones, además de no tener miedo de pedir la pelota cuando el equipo lo necesita.

Su importancia está fuera de toda duda, y los números lo refrendan. A pesar de esta última lesión, tiene casi los mismos minutos de juego (1.825) que Militao (2.026) y Rüdiger (2.005). Hasta antes de la lesión era el jugador de campo más utilizado tras Vinicius. Había disputado todos los partidos como titular excepto uno de LaLiga (Almería) y dos de Champions (Shakhtar y Leipzig). Su balance con él en el once es de 15 triunfos, dos empates y dos derrotas.

A pesar de que su rendimiento en el comienzo de curso no llegó a lo mostrado el pasado, en ningún momento perdió el puesto en favor de Rüdiger, fichaje del último verano y una apuesta del club que llegaba a pelear por la titularidad. Se barajó la posibilidad de utilizarlos a los dos moviendo a Alaba al lateral, pero el austriaco quiere seguir como central y no desplazarse a un costado.

No se arriesgará con él, teniendo en cuenta que el equipo está en una racha de partidos muy larga hasta finales de marzo y con duelos contra Liverpool, Atlético o Barcelona por el camino. El buen nivel que siempre deja Nacho y la adaptación de Camavinga al lateral invitan a no precipitar su regreso. Pero lo que no ha perdido a pesar de todo es su etiqueta de jugador importante en los planes de Ancelotti.