La apertura de los grandes estadios en la Liga F: ¿éxito o fracaso?
Durante el parón por el Mundial, muchos clubes han abierto la puerta de sus estadios al fútbol femenino. La Liga F les ayuda con 15.000€.

Durante los pasados meses de noviembre y de diciembre, LaLiga Santander se paró por la disputa del Mundial de Catar. Un parón que repercutió de forma directa en la Liga F. Muchos de los clubes de primera división decidieron aprovecharlo para albergar en sus estadios los partidos de sus equipos femeninos: el Levante, el Athletic Club, el Valencia, la Real Sociedad, el Betis y el Atlético de Madrid. Además del Recreativo de Huelva, que le cedió el estadio al Sporting Huelva. En total, ocho partidos de la Liga F cambiaron su ubicación habitual por la de un gran escenario.
Teniendo en cuenta las cifras oficiales de espectadores -las proporcionadas por los clubes- tan solo tres de los ocho encuentros superaron la barrera de los 4.000 aficionados. El Betis - Athletic Club, que se disputó en el Benito Villamarín, tan solo congregó a 1.851 personas, registrando la entrada más baja de todas.
En el lado opuesto de la moneda: el Atlético de Madrid - Barça, el Athletic Club - Real Sociedad y el Valencia - Levante. El duelo disputado en el Cívitas Metropolitano superó los 24. 000 espectadores, siendo el encuentro con mayor presencia en las gradas. Seguido muy de cerca por del derbi vasco, con 22.412 espectadores y a más distancia del derbi valenciano: 8.096.
LIGA F: ASISTENCIAS A LOS ESTADIOS
Una ayuda de 15.000€
La Liga F, con el objetivo de incentivar la apertura de los grandes estadios para aumentar la visibilidad y enganchar a cada vez más espectadores, sufraga parte de los gastos aportando un total de 15.000€ al club.
Sin embargo, esta cifra no siempre es suficiente y los clubes no recuperan su 'inversión'. A pesar de que las cifras de espectadores crecen de forma significativa cuando se abre un gran estadio respecto al número de espectadores habitual, lo cierto es que albergar un partido de fútbol femenino en el estadio sigue siendo para los clubes -en muchas ocasiones- tirar una moneda al aire.
Recientemente, Beatriz Álvarez Mesa, la presidenta de la Liga F, abordó este tema en los Desayunos de Europa Press: "Es evidente que hay mucha diferencia entre cuando se abren estadios a cuando juegan en sus lugares habituales. Necesitamos fidelizar y sólo será posible cuando tengamos un producto sostenible", aseguró.
A pesar del crecimiento del fútbol femenino, la importancia del partido, la atracción de los equipos, las fechas y la promoción del encuentro, entre otros muchos factores, siguen siendo claves a la hora de que los estadios registren una buena entrada.
El Athletic Club, un ejemplo a seguir
El pasado 19 de noviembre, el Athletic Club volvió a abrir San Mamés para albergar un partido de las de Iraia Iturregi. Aunque el resultado deportivo no fue el esperado -perdieron por 1-3- el templo rojiblanco registró una buena entrada: 22.412 espectadores. Una cifra que dejó al club muy satisfecho.
El Athletic se volcó con la promoción del partido. En los días previos al encuentro, se ofreció una rueda de prensa en favor del esukera y, el mismo día del partido, se celebró una fan zone en los aledaños de San Mamés.
Para ese partido, el Athletic Club sacó a la venta entradas a cinco euros para los menores de 14 años y de 10 euros para los que superasen esa edad. Las localidades se podían retirar vía online y en la taquilla del estadio. Además de todas estas acciones y de la importancia del partido -un derbi vasco- también ayuda la tradición de fútbol femenino existente en Bilbao y el sentimiento de pertenencia a su equipo.
Casi un mes después, el 11 de diciembre, el Reale Arena albergó el Real Sociedad - Levante de la Liga F. Sin embargo, la cifra de espectadores estuvo muy lejos de alcanzar la de San Mamés. Ambos equipos congregaron a un total de 3.666 personas. La grada del Real presentó una imagen muy diferente a la que se vio en el partido de Champions ante el Bayern -11.479- . Para el encuentro frente al Levante, la Real Sociedad sacó entradas a la venta por 12€ y 20€, pero tan solo se vendieron alrededor de 150. El resto se repartieron entre invitaciones y los socios.
El 'boom' del Barça
El Barça sigue marcando el paso y rompiendo todos los esquemas. A pesar de que el conjunto blaugrana tan solo ha abierto una vez -desde su profesionalización- el Camp Nou para un partido de la Liga F, y fue durante la pandemia, lo cierto es que cada vez que la afición del Barça siempre responde cuando recibe recibe la llamada de su equipo femenino.
En lo que va de curso, el Barça ha disputado dos partidos en el Camp Nou: frente al Bayern y ante el Rosengard. Cuando se midieron al conjunto germano, 46.967 espectadores se dieron cita en las gradas del Camp Nou, batiendo el récord de asistencia a un partido de la fase de grupos en la Champions. Frente al Rosengard, estuvieron cerca de superar los 30.000 aficionados (28.720).
En la pasada edición de la Champions, el Barça rompió todos los registros batiendo en dos ocasiones el récord mundial de espectadores a un partido de fútbol femenino. 91.553 aficionados frente al Real Madrid y 91.648 fans cuando se midieron al Wolfsburgo.
Además, las de Jonatan Giráldez son el equipo que mejor entrada registra en los partidos de la Liga F, disputados en el Johan Cruyff, con una media que supera los 4.000 espectadores.