Trágica semana para el Bayern: pierde el liderato de la Bundesliga y se agrava su crisis

Dos empates, dos victorias, dos derrotas. Eliminados de Champions y Copa de Alemania. La llegada de Tuchel al Bayern Múnich no fue como los dirigentes del club bávaro esperaban, la dinámica del equipo no era buena y el alemán no pudo revertirla. Además, la pelea entre Mané y Sané que terminó en sanción deportiva y económica para el senegalés y la derrota ante el City en cuartos de final de Champions fue la gota que colmó el vaso.

Pero queda la Bundesliga y el Bayern tiene la obligación de ganarla.Un segundo puesto en la competición liguera, dejando al Borussia Dortmund primero, sería la hecatombe para el club más grande de Alemania, situación que ya es realidad tras la derrota sufrida hoy en el campo del Mainz 05 y el triunfo de los amarillos contra el Eintracht. El Borussia ya encabeza la clasificación.

El Bayern tiene un problema con los delanteros y el gol. Entre lesiones y malos rendimientos, Choupo-Moting, Mathys Tel o Gnabry no son capaces de ver puerta. El camerunés y el alemán marcaron por última vez a principios de marzo contra el PSG, desde entonces, nada. Ante esa sequía, Pavard es el máximo goleador desde ese día con tres tantos, pero no es normal que un club como el Bayern sufra en este aspecto.

Sin Choupo-Moting, Tuchel le dio la oportunidad a Mané de jugar arriba junto a Muller contra el Mainz. Ganar era clave y el senegalés se echó el equipo a la espalda, marcando a los 15 minutos un gol que poco después fue anulado y después abriendo el marcador, ya de manera legal, tras un buen pase de Cancelo.

El Bayern dominaba por momentos pero el Mainz salía a la contra con un poco de peligro siempre que podía. Hace mucho tiempo que no se ve a un Bayern tan frágil y los rivales buscan aprovechar esas debilidades. El gran punto negativo para los visitantes fue la lesión de Davies, que sufrió problemas musculares.

Lo que parecía un partido tranquilo, pasó a ser todo lo contrario. El Mainz veía que podía empatar el encuentro y los aficionados protestaban todas las acciones dudosas. Kohr se llevaba la amarilla tras encararse con Musiala y tenía que ser sujetado por Goretzka. Mientras tanto Tuchel seguía sin hacer cambios, confiaba en los mismos diez que arrancaron de inicio y Mazraoui, que entró por el lesionado Davies.

Y claro, cuando el Bayern se relaja, sufre. Le pasó ante el Hoffenheim y le pasó frente al Mainz. En una jugada a balón parado con muchos rebotes, Cancelo se durmió, levantó la mano pidiendo fuera de juego y el balón le cayó a Ajorque para marcar el empate tras una buena parada de Sommer.

Aún así, había tiempo para más. Minutos después, el Mainz ponía patas arriba la Bundesliga de manera momentánea tras un error grosero del Bayern. Barreiro marcaba el segundo tras una asistencia de Onisiwo. Y Tuchel se movía.

Tras el gol del Mainz, Tuchel por fin movía el banquillo y quitaba a los grandes referentes: Kimmich y Muller. En su lugar entraban los jóvenes Gravenberch y Tel, pero los problemas iban más allá de ellos, ya que en defensa el Bayern hacía aguas.

Las pruebas de que la defensa del Bayern no estaba bien llegaron minutos más tarde con el tercer gol de los locales. El lateral español Aarón Martín marcaba tras una buena jugada con un gran zurdazo ante el que Sommer no pudo hacer nada. Las cámaras se iban a Tuchel, también a Kahn.

El Bayern no pudo conseguir remontar, ni un atisbo de peligro sobre la portería de Zentner. El Mainz conseguía la tercera victoria consecutiva en casa contra el equipo bávaro pero ninguna de tan relevancia como esta.