BARCELONA - CHELSEA

Alexia Putellas y las facturas que tuvo que pagar en su peor época como futbolista: "Había cosas que me alucinaba, que eran mentira"

La jugadora del Barcelona recuerda el proceso que tuvo que pasar durante sus dos lesiones y cómo le sirvió para aprender lo que no se ve del fútbol profesional.

Alexia Putellas durante un partido con el Barcelona ante el Atlético de Madrid./EP
Alexia Putellas durante un partido con el Barcelona ante el Atlético de Madrid. EP
Equipo Relevo

Equipo Relevo

El Barça vuelve a unas semifinales de la Champions League. Lo hará hoy (18:00 horas, DAZN) en el partido de ida ante el Chelsea en una ronda que las azulgranas han convertido en costumbre y casi exigencia. No obstante, es la sexta temporada consecutiva en que las jugadoras culés se cuelan entre los cuatro mejores equipos del Viejo Continente hasta convertirse en el equipo de referencia en el fútbol femenino.

Un conjunto que lleva años caminando de la mano del éxito y la exigencia. Y de esos dos términos sabe mucho Alexia Putellas, la jugadora que transformó por completo la imagen del fútbol femenino, llevándolo a una esfera inimaginable hace apenas cinco años. Sin embargo, la futbolista de Mòllet del Valles no sólo ha sentido las mieles del triunfo, sino que también ha saboreado el lado más amargo del deporte profesional y el de ser el rostro de un cambio que ha llegado para quedarse.

La capitana del Barça tuvo que reinventarse para volver tras dos graves lesiones de rodilla. Dos bajas en las que aprendió los otros aspectos que no tienen que ver con la técnica y la táctica, pero que son parte indivisible del mundo del fútbol profesional. Especialmente con el ruido que se genera alrededor del balón, pero que nada tiene que ver con lo que sucede en el césped.

Alexia Putellas. AFP
Alexia Putellas. AFP

"Al final ya me reía. Había cosas que yo alucinaba, que eran totalmente mentira. Me he ido acostumbrando un poco a ese ruido. Y, como quien dice, tengo el culo pelao. Entiendo cómo va esta industria. Fue un máster para mí. Mi única preocupación era estar centrada en ganarme mi renovación, este club no es una ONG, en que volvieran a confiar en mí, en que iba a rendir después de las lesiones. Y así fue", confiesa Putellas en una entrevista concedida a El País antes de enfrentarse al equipo londinense.

Alexia, a pesar de lo que se pueda creer, no lo ha tenido fácil en estos dos años. Por eso ha aprendido a relativizar todo lo que escapa a su control. Incluso cuando se dudaba de su renovación con el Barcelona. "Ya no me molesta nada", recuerda una Putellas que ha aprendido a vivir con esa frase tan manida como desafortunada de 'no volverá a ser la misma'. "Todo eso es una mochila que luego cuesta mucho sacar [...] Tenía claro que iba a llegar a lo que estoy haciendo ahora. Pero sí que entiendo que pudiesen existir esas dudas. Cuando hay estas lesiones es muy típico, y aprovecho para decir que no ayuda a la persona que la sufre. Cualquier jugador o jugadora que haya tenido una lesión de cruzados lo sabe. Es muy difícil, y volver y tener las expectativas, tanto tuyas como externas, es muy complicado gestionar".

"Tengo el culo pelao. Entiendo cómo va esta industria. Fue un máster para mí. Mi única preocupación era estar centrada en ganarme mi renovación, este club no es una ONG"

Y en medio de ese camino, ruido, mucho mucho ruido. A veces sordo, otras ensordecedor. Unas veces inocuo y muchas, dañino, aunque Putellas decidió no contestar. "Sí [tuve ganas de desmentir], sobre todo cuando no se están diciendo verdades o se está intentando atacar por otros intereses a mi figura como futbolista. Pero si lo haces marcas un precedente, y no puedes estar todos los meses saliendo a explicar cómo son las cosas, sobre todo porque algunas no se pueden explicar públicamente".

Al ser preguntada por si se están cogiendo los vicios del fútbol masculino, Alexia lo tiene claro: "No sé si son vicios, es la manera de funcionar, al menos el fútbol español. Es normal que hablen de ti, incluso de tu vida personal, me atrevo a decir. ¿Qué vas a hacer? No lo vas a cambiar".

Lo que sí ha cambiado es la dimensión del fútbol femenino. Y en parte (mucha) es gracias a ella. "Ahora la visibilidad sí está", recalca, aunque no siempre fue así. "Estamos tan metidos en el círculo que no nos damos cuenta de realmente el crecimiento que ha habido. La mitad de las temporadas que el Barça ha sido profesional ha llegado a una final de la Champions. Lo mismo con la Selección: al tercer Mundial, lo ganas. Es muy fuerte. A nivel deportivo estamos creciendo muchísimo, y hay margen de mejora que requiere tiempo. Esto ha crecido tanto que te tenías que ir adaptando, ha sido un reto. He tenido el talento, pero otras cosas las he tenido que aprender para seguir y liderar. Los medios de comunicación, la exposición, la presión, ir creciendo a la vez que crece el fútbol femenino… Hace 10 años te veían 500 personas, y ahora millones. Como te centres en pensar en eso, hay personalidades que se les encoge el pie".