La Champions femenina también es una mina de oro: Bilbao se prepara con habitaciones a 300 euros y bares que alargan turnos

La final de la Champions League femenina está a la vuelta de la esquina y Bilbao lo empieza a comprobar. Con cuentagotas llegan los primeros aficionados franceses, mientras los trabajadores de UEFA, aún tranquilos, se dejan ver con sus acreditaciones en los puntos calientes de una ciudad que se prepara para este sábado. El gran choque entre el Olympique de Lyon y el Barça ha despertado mucho interés internacional y la ciudad vasca espera ansiosa que comience una fiesta en la que se espera miles de seguidores de ambos conjuntos, con mayoría azulgrana.

Aunque algunos hosteleros dudan de lo que se vivirá durante el sábado, se alistan para una gran jornada, conscientes de que las reservas hoteleras están en máximos y que la locura ha llevado a que en los últimos días se ofrezcan alojamientos a precios desorbitados. El 90% de las plazas en Booking están ocupadas y los precios se han disparado en las últimas semanas, desde que se conoció quiénes serían los dos conjuntos que lucharán por el título.

El hecho de que el Barça repita en una final, con el apoyo que tiene el cuadro de Jonathan Giráldez, así como las facilidades de desplazamiento para las dos aficiones, han potenciado aún más la fiesta. Esto ha llevado a una masiva reserva de plazas que ha disparado los precios, haciendo difícil encontrar un alojamiento privado por menos de 300 euros la noche. Además, muchos hoteles de la capital vizcaína tenían acuerdos firmados con diferentes empresas patrocinadoras de UEFA desde hace meses y, en algunos casos, que venían desde la frustrada sede de Bilbao en la Eurocopa de 2020.

En esta situación, la mayoría de restaurantes consultados por este medio tienen sus mesas completas para el sábado al mediodía y los diferentes bares del centro de Bilbao se preparan para un día de partido. "Como si jugase el Athletic", dicen en Pozas, zona de bares que sirve de encuentro en la previa de partidos en San Mamés. Aunque algunos son algo más escépticos. "Al ser algo nuevo no sé lo que esperar, pero me voy a preparar igual", explican en un establecimiento de la conocida calle bilbaína. "La calle petada de peña, eso se espera", responden desde Pozas 42, uno de los bares más concurridos en día de partido rojiblanco. "Es el último baile de la temporada", dicen encantados con sumar una nueva jornada a este histórico curso en Bilbao.

Y es que Licenciado Pozas volverá a ser el corazón del ambiente previo a un choque que se disputa a las 18:00 horas en San Mamés. La única duda, explican, es el perfil de los aficionados que se esperan, en muchos casos familias. La hora del encuentro también trastoca algo los planes de los hosteleros, aunque la buena noticia es que desde el Ayuntamiento de Bilbao se ha decidido retrasar en dos horas el horario de cierre de los locales de hostelería tras una petición de la Asociación de Hostelería de Bizkaia.

Otro factor muy positivo para ellos es que los aficionados del Olympique de Lyon tendrán su punto neurálgico en la Plaza de Indautxu, en las cercanías de Pozas, y está previsto que desde las 16:00 horas haya un gran ambiente con una charanga que recorrerá la conocida calle. Por su parte, los seguidores culés se concentrarán en el Parque de Doña Casilda, a pocos metros también de San Mamés.

Más allá del ambiente que pongan las dos aficiones en Bilbao, desde la organización se ha querido hacer partícipes a todos los habitantes de la ciudad. Por eso habrá actividades destinadas a los más pequeños desde este viernes. Se instalará un campo hinchable y una plataforma flotante sobre la ría, en la zona del Itsasmuseum. Además, en la explanada de San Mamés se encontrará la zona de activación de UEFA, en la que los diferentes sponsors oficiales ofrecerán actividades y música en un lugar de reunión para todas las edades entre las 10.00 horas y las 17.30, media hora antes del comienzo de la final.

El Ayuntamiento también ha informado de los diferentes cortes de tráfico y las zonas reservadas de aparcamiento. En este caso serán las mismas que en cualquier partido de LaLiga del Athletic, en los barrios de Indautxu y Abando, aunque ampliando el horario hasta el viernes, ya que ambos equipos realizarán sus entrenamientos en San Mamés el día previo al choque. Todo está listo para una gran fiesta que vuelve a demostrar que el fútbol femenino vende y que se ha convertido ya en todo un espectáculo masivo.