Ancelotti se defiende de la acusación de Hacienda: "Estoy convencido de que soy inocente"

Unas horas antes del partido salió a la luz que la Fiscalía acusaba a Carlo Ancelotti por un delito fiscal. El técnico italiano, tras comentar el mal partido de su equipo, también despachó la pregunta sobre lo sucedido. Hacienda es un problema, el partido también. Ancelotti, eso sí, no cambió el tono de voz, se le veía algo abatido por el partido, pero no especialmente preocupado. De hecho su mensaje era inequívoco, el técnico está convencido de su inocencia.

"Es una vieja historia que empezó por una declaración de 2015", explicó el técnico italiano cuando fue preguntado. "La fiscalía piensa que yo era residente en España y yo creo que no. Ya he pagado la multa, el dinero está en la Fiscalía y están hablando mis abogados para encontrar una solución", remarcó el técnico que se considera inocente de los cargos que se le imputan.

"Yo estoy convencido de que soy inocente, no era residente en 2015, a ver qué decide el juez", quiso zanjar el técnico. La Fiscalía pide 4,9 años de prisión para el entrenador por un un fraude al erario público de algo más de un millón de euros dividido en dos ejercicios. El problema surge porque Hacienda considera que solo declaró los rendimientos del salario percibido del Real Madrid pero no por la explotación de derechos de imagen que tenía cedido a otras entidades.

El escrito de acusación sostiene que Ancelotti firmó el 4 de julio de 2013 un contrato de trabajo como entrenador del Real Madrid para el periodo comprendido entre el 5 de julio de 2013 y el 30 de junio de 2016 "especificándose en su remuneración para ese periodo, además de unos rendimiento de trabajo, unos rendimientos derivados de la cesión de los derechos de imagen al club". El texto de la Fiscalía remarca que desde el mes de julio de 2013 Ancelotti pasó a trabajar y residir en España, fijando como su domicilio y residencia habitual una céntrica plaza madrileña y por lo tanto que dos años más tarde seguía viviendo en Madrid.

Eso mismo es lo que rechaza Ancelotti, que arguye que en realidad ese último año no lo cumplió en Madrid y que, por lo tanto, ese año 2015 no se le debería contar como residente fiscal en España.