La peor bronca de Guardiola que se cerró con una pizarra táctica y cervezas hasta las 4:30 am

Pep Guardiola vuelve este martes al lugar de los hechos. Lo hará como entrenador del Manchester City para disputar los octavos de final de la Champions League contra el Copenhague, pero contra ese mismo equipo, cuando en el año 2010 dirigía al Barcelona, tuvo su bronca más viral en una línea técnica cuando se encaró con Ståle Solbakken... hasta que los separó Sergio Busquets.

El caldo de cultivo se originó porque en el partido de ida de la fase de grupos, en el Camp Nou, un silbido de Pinto desde el banquillo propició que Santín, futbolista del Copenhague, lo confundiera con el silbato del árbitro y se quedara parado en medio de una contra peligrosa. Al guardameta le sancionaron con dos partidos. Para la vuelta, en Copenhague, hubo cruce de declaraciones en la previa. Solbakken dijo que "Pinto es un huevo podrido dentro de la cesta del Barcelona", a lo que Guardiola respondió: "Ha calentado el partido y aún va a ser más difícil ganar".

El resultado fue de 1-1. Y Solbakken lo recordó así con el paso del tiempo: "Después del partido empezamos a discutir. Yo estaba muy contento con el empate, él no lo estaba tanto. Hubo insultos y Busquets lo arregló, no fue un combate de boxeo". La imagen de la tensión en la línea de banda dio la vuelta al mundo.

Un par de años más tarde, con Guardiola completando la que sería su última temporada en el Barcelona, llegó el momento del perdón. Solbakken entrenaba al Colonia y aprovechó un partido del Barcelona contra el Bayer Leverkusen -dada la proximidad de las ciudades- para intentar retomar el contacto con el técnico catalán. "El partido era el miércoles y nos pidió que viniéramos el martes. Así que mi segundo y yo nos dirigimos a toda prisa hacia el hotel, pero luego recibimos un SMS de la mano derecha de Pep que decía: 'Ha surgido un tema del que tiene que ocuparse, pero tienes entradas para el partido de mañana y puedes esperar en la recepción del hotel después del partido'", recordaba Solbakken sobre aquel encuentro.

El Barcelona ganó 1-3 al Bayer Leverkusen y después, por la noche, Solbakken y su segundo volvieron al hotel: "Nos llevó a un bar, y cuando llegamos gritó: '¡Fuera todo el mundo!' Entonces todos tuvieron que abandonar el bar. Así que estábamos solo yo, mi segundo, Pep, una pizarra táctica, dos cervezas y una Pepsi Max", decía.

"Y terminamos hablando de fútbol durante cuatro horas. Cuando llegaron su presidente y su vicepresidente, no tuvo tiempo para ellos. Y cuando eran las cuatro y media de la mañana, le dije: 'Muchas gracias, no te molestaremos más'. Pero incluso entonces estaba sentado y moviendo algunas piezas del tablero. Enfermizamente intenso. Y creo que ya tenía idea de que se convertiría en entrenador en Alemania porque me preguntó sobre la cultura alemana, el estilo de juego y cosas así..."

Tras volver a dirigir al Copenhague durante siete años, Solbakken se convirtió en seleccionador absoluto de Noruega en el año 2020.

Precisamente, el fútbol noruego tiene mucha vinculación con el Manchester City actual, donde su principal estrella, Erling Haaland, aterrizó en el verano de 2022. El pichichi de la Premier League tiene como entrenadores a Guardiola y a Solbakken.

Pero no es el único, ya que el joven Oscar Bobb también ha irrumpido en el primer equipo citizen con varias actuaciones destacadas, como su gol en el descuento contra el Newcastle. Y también juega con Noruega. De hecho, en los últimos meses, Guardiola le lanzó un mensaje a Solbakken: "Ya sabe lo que tiene que hacer... creo que Solbakken vio el partido contra el Newcastle y lo bien que jugó Bobb contra un equipo de nivel Champions League, y además fuera de casa".