La Champions del Madrid: todas las remontadas del Bernabéu vistas desde dentro del vestuario
Toni Fuidias, tercer portero del Real Madrid el pasado curso, cuenta lo que sintió al vivir la Champions de las remontadas desde dentro.
La noche del 9 de marzo no fue una noche cualquiera en Madrid. El Bernabéu acogía un partido a vida o muerte contra su mayor enemigo en Europa, el PSG. Y se pasó toda la eliminatoria medio muerto, menos unos minutos de nada.
El Real Madrid juega sus partidos en unos minutos de nada. Desde las nueve y cuarto hasta las diez menos cuarto de aquella noche, el elenco de Ancelotti le explicó al PSG primero, y después al fútbol, cómo se hacen las cosas. Eso no fue una remontada; fue la ópera prima. Benzema culminó un hat-trick imposible en un visto y no visto, contra todo el dinero de Catar y las caras hundidas de Mbappé y Messi.
Cuenta la leyenda, que en la misma celebración del triunfo contra el PSG, Carvajal le decía a todo el mundo: "Tras esto, no nos va a ganar nadie en esta Champions". Esta vida pide otra.
El Chelsea no debió escuchar las palabras de Carvajal. Timo Werner silenció al Bernabéu con su propia medicina: estaban derrotando al Real Madrid con una remontada gloriosa. Era imposible contener la herida. Pero era de noche otra vez. Con todas las luces apagadas, a Modric se le encendió el exterior de su bota derecha. El Madrid se agarró a la lámpara del croata cuando vieron el fin mirándole a los ojos. Rodrygo y Benzema le pusieron nombre a otra cosa muy distinta a una remontada normal.
Las remontadas del Madrid según Toni Fuidias
Ya en mayo nadie creía que los jugadores del Madrid fueran mortales. Hombres de otra pasta. Una plantilla elegida de entre todos los rincones del mundo, en la que también figuraba Toni Fuidias, ahora en el Girona. El meta catalán fue el tercer portero que Ancelotti nombró para jugar una Champions histórica.
Sin palabras… CAMPEONES DE EUROPA 🤍 #HalaMadrid pic.twitter.com/oc06Gkq6Tu
— Toni Fuidias (@iamtonifuidias) May 29, 2022
Toni Fuidias intenta explicar a Relevo cómo se vivieron desde dentro todas las noches de Copa de Europa en el Bernabéu. No hay explicación. Aunque Toni reconoce que todos los jugadores del Madrid sentían algo: "En cada eliminatoria que disputábamos en el Bernabéu la gente nos mostraba una convicción increíble, de que todo allí era posible".
Fuidias se detiene en el público. "Esta Champions fue el premio a la fe de todo el público que quería con tanta fuerza que ganáramos la Decimocuarta". Como si el sentimiento de toda la gente que creía en las noches del Madrid se impusiera al destino de manera irremediable.
La remontada final
Aún faltaba el truco final. El City llegó a la capital de España con un plan y una ventaja. Los de Guardiola lo ejecutaron a la perfección; todo salió como Pep había pensado. El Madrid solo tenía una hoja de ruta: "En Madrid vamos a hacer una cosa que es ganar", dijo Benzema justo al acabar el partido de ida en Manchester
Guardiola no tenía mapeados los milagros. Mendy salvó un gol seguro y Rodrygo marcó dos tantos inventados, inverosímiles, cuando el encuentro ya había acabado para cualquier ser humano con dos dedos de frente. Pero a quién no le gustan los milagros. El Madrid llegó a la final de Champions por un camino sin líneas. Era más seguro el camino más largo, pero era más largo.