REAL MADRID-CHELSEA

Un Chelsea renovado y herido que se transforma con el himno de la Champions

El rival del Madrid promedia casi el doble de victorias en Europa que en la Premier este curso.

El Chelsea, en el entrenamiento de este martes./REUTERS
El Chelsea, en el entrenamiento de este martes. REUTERS
Sergio Santos

Sergio Santos

Chelsea y Real Madrid vuelven a cruzarse en cuartos de final de la Champions un año después, aunque con un panorama muy distinto al de entonces, principalmente por los cambios que se han producido en el conjunto inglés. El curso pasado los londinenses llegaban como defensores del título (lo habían ganado en 2021, tras eliminar al Madrid) y los blancos con la confianza que les generó la remontada heroica frente al PSG en octavos.

En el Madrid, casi todo sigue igual. El mismo entrenador y pocos cambios en la alineación: nueve de los once futbolistas que alineó en la ida de la temporada pasada Ancelotti apuntan a repetir en esta ocasión. Sólo se caen Mendy (por lesión) y Casemiro, que abandonó el club el pasado verano. Courtois, Carvajal, Militao, Alaba, Kroos, Modric, Valverde, Benzema y Vinicius estuvieron presentes en aquella brillante victoria en Stamford Bridge (1-3).

El Chelsea no puede decir lo mismo, porque en su caso hay pocas cosas como entonces. Lo primero, el banquillo: Tuchel fue despedido en septiembre y hace pocas semanas el sacrificado fue Potter. Lampard ha cogido las riendas de un equipo a la deriva en Premier (son undécimos a 17 puntos de la zona Champions) y lo fían todo a la Copa de Europa. De aquel once, tres piezas fundamentales no están en la plantilla (Christensen, Rudiger y Jorginho) y las caras nuevas que han llegado a golpe de talonario (Fofana, Koulibaly, Joao Felix…) aún están en proceso de adaptación después de tantos cambios en el banquillo. En la portería blue, aunque siguen los mismos, ha habido un cambio: Kepa le ha quitado el puesto a Mendy.

Quien sigue es Havertz, autor del único tanto londinense en la ida, y que también apunta a ocupar la punta de ataque a pesar de no ser delantero centro. Debe asumir una responsabilidad goleadora que no tuvo el curso pasado en el Bernabéu, donde Rudiger, Werner y Mount fueron los anotadores en ese intento de remontada del Chelsea donde murió en la orilla (el Madrid marcó dos goles tras ponerse 0-3 en el marcador).

Fiable en Europa

A pesar de que los dos han perdido sus opciones de pelear por Liga y Premier, el estado de ánimo de ambos conjuntos es muy diferente. El Madrid llega con la moral alta tras la goleada al Barça en Copa, mientras que el Chelsea lleva cuatro partidos sin conocer la victoria (dos empates y dos derrotas) y tres encuentros consecutivos sin marcar un solo gol. Un rival herido ante el que el Madrid no podrá confiarse, porque se transforma cuando escucha el himno de la Champions: cinco victorias (el 62,5%), un empate y dos derrotas esta temporada en Europa, nada que ver con el pobre 33,3% de triunfos que tiene en la Premier.