Una derrota contra el Villarreal despertó el interés del Bayern por Rüdiger: "Llegaron tarde..."

Antonio Rüdiger (31 años) es uno de los innegociables de Ancelotti esta temporada. Desde comienzo de curso su presencia ha marcado la diferencia en una zaga sin Militao y Alaba durante muchos meses, además de la más que sensible baja de Courtois. El alemán ha puesto la cara, a veces literalmente, para sostener el sistema defensivo del técnico. En el Real Madrid lo celebran, pues ahora que se acerca el partido definitivo contra el Bayern, saben que su estrella pudo haber formado parte de la plantilla alemana.

Sucedió en 2022, cuando los blancos ataron su fichaje. Llevaban tiempo negociando con su entorno cuando apareció el Bayern. Fue justo después de que el Villarreal eliminase a los bávaros de la Champions en cuartos de final. En esa misma ronda, Rüdiger se enfrentaba al Madrid con el Chelsea y estaba a menos de tres meses de finalizar su contrato. Los directivos alemanes se lanzaron con todo.

Según ha podido saber Relevo, estaban dispuestos a realizar una gran oferta. Hubo contactos con su entorno para tratar de convencerlo, pero sin suerte. "Llegaron tarde", cuenta una fuente cercana al futbolista. Por aquel entonces Rüdiger tenía apalabrada su llegada al conjunto blanco, el cual había sido su prioridad desde que apareció en las negociaciones. Las mismas fuentes aseguran que la propuesta del Bayern era muy atractiva, pero no cambió el plan del central, decidido a aterrizar en el Bernabéu.

Fue la primera y única vez que desde Múnich mostraron un interés formal por Rüdiger. De joven, cuando jugaba en el Borussia Dortmund, lo ojearon diferentes scouts, conscientes de que se trataba de un futbolista de talento, pero nunca se materializó el interés. Lo mismo cuando dio sus primeros pasos en el Stuttgart, ya como profesional.

El respeto del jugador berlinés hacia la entidad bávara es total. Primero, por todos los compañeros de selección que juegan allí. Guarda una magnífica relación con Sané, Musiala, Kimmich o Neuer. Junto a ellos peleará por recuperar el trono europeo en la Euro del próximo verano. Pero también porque algunos familiares viven allí y son simpatizantes del Bayern.

Se vio en las celebraciones durante el partido de ida. Siempre enérgico, en esta ocasión Rüdiger no dio la nota. Ni pegó a los compañeros ni festejó con especial efusividad. Se limitó a gritar desde la lejanía. Allí lo vieron varias personas de su entorno, entre ellas, Sahr Senesie, hermanastro y agente del jugador.

El partido de vuelta es especial para él. Contra el gran equipo de su país y en búsqueda de su segunda final de Champions. Ganó la Orejona con el Chelsea en 2021 y quiere repetir. Falta por saber si jugará acompañado de Nacho o de Tchouameni, pero lo que es seguro es que Rüdiger comenzará el encuentro y será el líder de la defensa madridista.