La evolución 'imposible' de Vinicius se consuma en Alemania cuatro años después del "juega contra nosotros"

¿Qué tal se le da jugar de delantero centro a Vinicius Junior (23 años)? "Más o menos", decía él mismo saliendo del Allianz Arena a la carrera y con su MVP bajo el brazo, el segundo de la temporada. Junto a Kroos y Tchouameni, salvó a un Real Madrid que parecía dispuesto a fracasar contra el Bayern. Pero esta posibilidad no entra en la cabeza de un jugador acostumbrado al éxito y al gol. Su evolución como delantero, en banda o por el centro, ha sorprendido a todos.

Dos veces silenció a la ruidosa afición alemana. Ambas, cuando más sufría su equipo. Primero, en el 24, con un movimiento de arrastre perfecto para romper a Kim y definir con calma ante Neuer, y el segundo, en el 83', asumiendo la responsabilidad de un penalti que quemaba. Cristiano había sido hasta la fecha el único atacante procedente de Chamartín capaz de hacer un doblete en el estadio muniqués.

Brilló en Alemania. Casi cuatro años después de un momento negativo pero muy importante en su carrera. Jugaban contra el Borussia Monchengladbach y las cámaras cazaban a Benzema, desesperado con el brasileño. "No juegues con él, va contra nosotros", le comentaba a Mendy en el túnel de vestuario. Una frase que pudo dilapidar su carrera en el Madrid. Lo hubiese provocado con cualquiera, pero no con un Vini que cuatro temporadas después se ha convertido en jugador franquicia. Ahora todos quieren jugar con él.

Se le da especialmente bien la fase del KO de la Champions al brasileño. 10 de sus 20 goles en la competición continental han llegado en eliminatorias. Se estrenó precisamente en el ejercicio 2020-21, en una ida de cuartos de final mágica con dos tantos al Liverpool. Ese encuentro fue un antes y un después para él. Desde entonces no ha parado: otros dos en la 2021-22, tres en la 2022-23 y tres en la actual. Con sus 20 en Champions ha igualado a jugadores como Bale, Torres, Anelka o Mahrez.

Sólo Ancelotti le vio condiciones de delantero centro. "Creo que puede jugar ahí. Ha aprendido a moverse bien sin balón. A atacar la espalda. Es muy frío de cara a la portería rival", dijo en rueda de prensa. El italiano le invita a que juegue a pocos toques y que aproveche su velocidad para romper al espacio que deja el rival, como en el primero contra el Bayern. También los genera. Lo demostró ante el City con un movimiento de apoyo y dándole el gol a Rodrygo. Vini cada vez se encuentra más a gusto.

Varios ídolos ayudan a entender el por qué de su evolución, empezando por Ronaldo Nazario. Ha visto infinidad de jugadas del brasileño, al que intenta imitar en partidos y entrenamientos. Lo mismo con Cristiano Ronaldo. Por él lleva el dorsal 7. Pidió que ambos quedasen inmortalizados en el muro de las leyendas de su gimnasio personal. Por último, a Karim, al que tiene en un pedestal y del que aprendió mucho durante los años que compartieron equipo. Referentes en los que se fija constantemente.

Lo que más ha sorprendido es su mejor en el acierto en los disparos. En Champions, sus números son de crack: ha disparado 16 veces, nueve de ellas han ido a puerta (56,5%) y cinco han acabado en gol (31,2%). De los que llevan los mismos o más tantos, sólo Julián Álvarez (41,6%), Griezmann (33,3%), Galeno (33,3%) y Kane (32%) promedian mejor acierto por disparo. Por si fuera poco ha repartido otras cinco asistencias. Las horas extra en Valdebebas mejorando el tiro dan sus frutos.

Son ya 21 goles y 13 asistencias en el curso. Está muy cerca de batir su mejor marca goleadora, la que consiguió en la temporada pasada con 23. Quién se lo iba a decir cuando acabó la 2020-21 con seis. O la 2019-20 con cinco. Pero la capacidad de crecimiento de Vinicius ha dejado de sorprender y ahora, como sus ídolos, quiere marcar aún más goles. Como extremo o como delantero centro.