La exhibición de Alisson con el Liverpool pone en jaque los 30 millones que pagaron al Valencia por Mamardashvili

Ya es una de las mejores actuaciones de esta Champions League. Alisson Becker ganó el partido contra el PSG: no metió el gol, no remató ese balón que superó a Donnarumma, pero lo que hizo lo vieron todos. Una tras otra, y así hasta nueve paradas, que salvaron al Liverpool de una cascada de oportunidades del equipo de Luis Enrique, muy superior durante todo el partido pero incapaz de derrumbar al portero brasileño, que dejó una exhibición en el Parque de los Príncipes.

En total fueron 27 disparos del PSG, 10 de ellos a puerta. Y Alisson los contuvo de mil maneras diferentes. Blocando o despejando, sacando una mano milagrosa o saliendo rápido para achicar espacios. "Ha estado excepcional", dijo Slot después. Alisson también habló: "Probablemente he hecho el mejor partido de mi vida". Y quien opine lo contrario probablemente vio el partido de espaldas.

Alisson Becker, con 32 años, ha sido una pieza indispensable del Liverpool que hemos conocido en los últimos tiempos. Clave en varios momentos decisivos (aquella parada mágica contra el Nápoles en la fase de grupos de 2019, ese gol de cabeza contra el West Brom), su trayectoria en los reds le ha colocado en el escalón que se merece, comparado con uno de los mejores, o el mejor: sus nueve paradas ante el PSG igualan la cifra de Courtois en la final de 2022... contra el Liverpool.

Pero desde la temporada pasada han cambiado cosas. Con la opción de Arabia Saudí en el horizonte, Alisson todavía tiene contrato hasta 2027. Pero el Liverpool ha ido trabajando por adelantado y el verano pasado se aseguró la llegada de Giorgi Mamardashvili, ahora en el Valencia, por 30 millones de euros. Un fichaje que tiene sentido para cubrirte las espaldas ante una posible salida, un escenario que visto el rendimiento de Alisson sería un claro problema para el Liverpool.

¿Qué debe hacer el Liverpool? ¿Mamardashvili llegaría para ser suplente? El georgiano, según pudo saber Relevo, no está cedido sino que tiene una obligación de traspaso para el verano, pero más allá de ese detalle está atado por el Liverpool.

Además, esto coincide con el momento más dubitativo de Mamardashvili en el conjunto che. Esta temporada está registrando su peor porcentaje de paradas desde que debutó con el Valencia (59.3%), muy diferente al 73.8% del curso pasado o al 76% que alcanzó durante su estreno en la Liga española.

Alisson Becker nunca ha estado cuestionado en Liverpool. Y los suplentes que ha tenido, a pesar de las buenas sensaciones que siempre ha dejado Kelleher, nunca le han conseguido apartar de la titularidad. Si no hay un traspaso de por medio, eso es alto que a priori tampoco conseguirá Mamardashvili, aunque su llegada está enfocada al largo plazo y es ahí donde está la duda con Alisson: ¿Aprovechará alguna de las opciones que se le presenten en el mercado para terminar su carrera en otro lado?