Guardiola se olvida de los cambios en el empate del City y Lukaku se reconcilia con el gol

En Alemania veíamos el partido de siempre del City de Guardiola. Dominio contra un equipo replegado, que dejaba jugar. Llegaba el gol de Mahrez y tras un arreón citizen, tras la tempestad, la calma. Pero en la calma, el City se relaja y Gvardiol lo aprovechó y empató el partido.

Por otro lado, Milán. El Inter era un quiero y no puedo, mientras que el Oporto lo intentó y se topó con Onana. Ambos equipos lo intentaban, buscaban el gol, pero ambos porteros se convertían en figuras. Desde la expulsión de Otávio, dominio italiano... con premio, porque apareció Lukaku.

Después de lo vivido ayer en Anfield, todo iba a parecer aburrido. Tanto en Leipzig como en Milán los equipos se tanteaban, pero en Alemania apareció el de muchas veces para destrabar los partidos del Manchester City.

El argelino Riyad Mahrez aprovechó un error de la defensa del equipo germano para definir con su zurda prodigiosa y abrir la eliminatoria de octavos de final y la noche del miércoles de Champions.

Sustituir a una leyenda como Handanovic, no es nada fácil. Y Onana lo ha conseguido. Al final de la primera parte y tras una gran dejada de Taremi de espaldas, Grujic llegó de atrás y fusiló al camerunés, que estaba bien situado y salvó a su equipo. En la segunda parte, más de lo mismo, una doble parada salvó a su equipo.

El exportero del Ajax se ha ganado con buenas actuaciones la titularidad y no hubo polémicas a pesar de que el esloveno es uno de los futbolistas con más partidos en la historia del club, con 448 en más de diez temporadas en el conjunto nerazzurro.

Volver a ver a Nkunku dentro de un terreno de juego es una alegría para todos. El atacante francés volvió unos minutos en Bundesliga pero hoy ya jugó más de 25 minutos en Champions League.

Tras perderse el Mundial, ahora tiene más ganas que nunca de volver a disfrutar del fútbol y su equipo puede dar un paso adelante gracias a su calidad y su olfato goleador.

Al igual que contra el Nottingham Forest hace unos días en Premier League, el conjunto de Guardiola se dejó ir y sufrió el empate. Intentó levantar el partido con los cambios, pero fue tarde. Álvarez, por ejemplo, entró en el minuto 88. Y hoy ni siquiera ingresó.

Pep, en la previa, había dicho que la eliminatoria se iba a resolver en Inglaterra. Y tuvo razón, claro. Pero nadie imaginaba que iba a ser de esta manera, con un empate y la pobre imagen del segundo tiempo.  Tras finalizar el encuentro, el técnico español reunió a varios de sus jugadores para hablar sobre el encuentro... y no se le veía muy contento.

Centro de Barella y gol de Lukaku. Apenas unos días después de haberse peleado, reconciliado y vuelto a jugar. Porque el italiano y el belga son de sangre caliente y aunque lo habían solucionado en la semana, este abrazo significa mucho.

En la previa, Marotta, director deportivo del Inter, había dicho: "¿Por qué Lukaku sigue en el banquillo? Romelu tiene 103 kg para cargar sobre sus hombros, debe estar en buena forma física. Todavía no está al 100%, está volviendo a su mejor forma".

Inzaghi sabe que al belga se le lleva de a poco, pero este gol le puede dar mucha confianza para lo que queda de Serie A y lo que resta de Champions.