Las historias de la final de Wembley: "Pagamos 15.000€ y no sabemos si vamos a entrar"

Las finales de Champions sobre todo son de los aficionados que hacen lo que sea para ver a su equipo hacer historia en el estadio. Gente que viaja desde cualquier rincón del mundo para juntarse con los suyos y presenciar un momento inolvidable. Da igual lo que cueste.

En Londres, el equipo de Relevo fue guardando historias de seguidores del Real Madrid que se dieron cita en Wembley.

Alba y Marta son dos hermanas madrileñas que se juntaron con su padre en Londres para la final de Champions. Alba ahora vive en Mallorca, y también viajó a Mánchester para vivir los penaltis contra el City. Desde ahí dice que no puede fallar ya a los partidos del Madrid.

Si le preguntas a Marta, el día que más recuerda es el de la Décima. A Londres viajó en el asiento de al lado de Roncero. La final de Wembley no la olvidarán.

De Blas es de Segovia y un experto en finales. Así que le pregunté por alguna historia. Me contó que la que más le impactó fue la de un aficionado de River que para viajar a la final de Libertadores de Madrid vendió su panadería. De Blas se partía de risa.

Gracias a su batería externa de iPhone se salvaron varios periodistas, y también fue guiando por el metro a aficionados del Borussia Dortmund. Un crack, con una Champions más.

Nathalie y Astrid iban en el metro rumbo a Wembley y comentaban: "Estos deben ser periodistas". Aproveché para hablar con ellas. Me dijeron que venían desde Guatemala, madre e hija, y que se habían gastado ¡15000€! en el viaje.

Además sus entradas eran compradas por viagogo y no sabían si iban a poder entrar (por viagogo suele haber muchas estafas). Esperemos que sí.

José Enrique trabaja en Taylor Made fabricando palos de golf a medida. Pero de momento es más conocido por su Copa de Europa. Con 22 años, José Enrique salió con sus colegas a Ámsterdam a ver la Séptima Champions del Real Madrid. Llevaban tanto tiempo sin ver ganar una Champions que se quedaron saboreando el momento hasta que cerraron el estadio, y allí dieron con una Copa destartalada por los suelos.

 Se la quedaron. Y desde 1998 la lleva a cada final de Champions del Real Madrid, salvando los controles de los aeropuertos. Es infalible. De 9 finales, 9 Champions.

Estas chicas son estudiantes de medicina en la universidad de Canterbury y decidieron ponerse en la estación de Wembley para recaudar dinero para un viaje a Ghana.

Colaboran con una organización que está desarrollando hospitales allí. Contaban que estaban recibiendo mucho dinero por la final, pero sólo de los madridistas. "Con los alemanes ya ni lo intentamos".

Dagoberto es de Costa Rica pero vive en Madrid. Para llegar a Londres recorrió una travesía: Madrid-Pisa-Tirana-Edimburgo-Londres. Y todo ello, para llegar a Wembley sin entrada. Él sólo quería estar cerca de su equipo.